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He aquí una madre de seis hijos, que pudo aportar a su país tres nuevas Comunidades religiosas. Llegó a tener tres hijas religiosas y un hijo sacerdote, además de dos hijos comprometidos con la fe católica y padres de familia.
Nació en París en 1565, de noble familia. Sus padres deseaban mucho tener una hija, y tras varios años de casados no la habían tenido. Prometieron consagrarla a la Santísima Virgen, y Dios se la concedió.
Tan pronto nació, la consagraron a Nuestra Señora. Poco después fueron al templo a dar gracias públicamente a Dios por tan gran regalo.
De jovencita deseaba mucho ser religiosa, pero sus padres, por ser la única hija, decidieron que debería contraer matrimonio.
Ella obedeció con humildad, y se casó con Pedro Acarí, esmerándose por ser la mejor esposa y madre, educando a sus seis hijos en lo espiritual.
Desde los primeros años de su matrimonio, dispuso llevar una vida de mucha piedad en el hogar. Al personal de servicio le hacía rezar ciertas oraciones por la mañana y por la noche.
A la vez que les prestaba toda clase de ayudas materiales, se preocupaba mucho porque cada uno cumpliera muy bien sus deberes para con Dios.
La bondad de su corazón alcanzaba a todos: alimentaba a los hambrientos, visitaba enfermos, ayudaba a los que pasaban situaciones económicas difíciles, asistía a los agonizantes.
Instruía a los que no sabían bien el Catecismo, trataba de convertir a los herejes, a los que habían pasado a otras religiones, y favorecía a todas las Comunidades religiosas que le era posible.
Su marido a veces se disgustaba al verla tan dedicada a tantas actividades religiosas y caritativas. Pero, después bendecía a Dios por haberle dado una esposa tan santa.
Al fallecer su esposo, María empezó a dedicarse con más devoción a las labores espirituales, en especial a una que le ha sido revelada por una visión divina de Santa Teresa: el tener que esforzarse para que la Comunidad de las carmelitas logre llegar a Francia.
Desde esa fecha, la Beata se dedica a conseguir los permisos para que las Carmelitas puedan entrar a su país.
Mas, las dificultades que se le presentan son muy grandes, pues hay leyes que prohiben la llegada de nuevas comunidades. María habla con el rey y con el Arzobispo. No obstante, cuando todo parece ya estar listo, de nuevo se les prohibe la entrada.
Una nueva aparición de Santa Teresa viene a recomendarle que no se canse de hacer gestiones para que las religiosas carmelitas puedan entrar a Francia. Porque, esta comunidad va a hacer grandes labores espirituales en ese país.
Al llegar San Francisco de Sales a Francia, y al saber de las gestiones de María, se convierte en su mejor aliado. Habla con las más altas personalidades para ayudarla a conseguir los permisos que necesita.
Finalmente, con la colaboración de todos, logran que el Papa Clemente VIII envíe un decreto permitiendo la entrada de las hermanas a Francia.
En 1604 llegaron a París las primeras hermanas Carmelitas. Iban dirigidas por dos religiosas, que después serían Beatas: la Beata Ana de Jesús y la Madre Ana de San Bartolomé.
María, con sus tres hijas, las estaba esperando en las puertas de la ciudad. Poco después, las tres hijas de María ingresaron al Convento de las monjas carmelitas.
Luego, ella también decidió ingresar a la Orden, dedicándose a los oficios más humildes y a obedecer en todo, como la más sencilla de las novicias.
Al ser nombrada su hija como Superiora del Convento, la mamá, de rodillas le juró obediencia.
Los últimos años de la Hermana María de la Encarnación, -nombre que tomó en la Comunidad-, fueron de profunda vida mística y de frecuentes éxtasis.
En abril de 1618 enfermó gravemente y quedó paralizada. El 16 de ese mes, luego de un último éxtasis, falleció.
Auditorio: Green Acres Middle School 1147 N. Mooney Blvd., Visalia, CA 93291
Predicadores: Padre Said León (Colombia) Padre Edwin Mercado (Puerto Rico) Hno. Felix Pimentel (N.Y. USA) Hno. Rafael Angel (Puerto Rico) Hna. Gela (Los Angeles) Hno. Chuy (El peregrino de Emaus) Inf. (559)736-4465 -- (559) 732-7417 -- (559) 732-5063
Abril 16,17 y 18 de Abril Viernes: 6pm a 9pm. Sábado: 8am a 7pm. Domingo:8am a 6pm.
Bogotá, Colombia (2011) - Encuentro de Hombres - Taller sanado heridas Sábado 16 de Abril y Domingo 17 de abril. Una experiencia inolvidable en el encuentro con Jesús.
El día de Pentecostés, decía Pedro a los judíos: "Todo Israel esté cierto de que al mismo Jesús, a quien vosotros crucificasteis, Dios lo ha constituido Señor y Mesías." Estas palabras les traspasaron el corazón, y preguntaron a Pedro y a los demás apóstoles: "¿Qué tenemos que hacer, hermanos?" Pedro les contestó: "Convertíos y bautizaos todos en nombre de Jesucristo para que se os perdonen los pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque la promesa vale para vosotros y para vuestros hijos y, además, para todos los que llame el Señor, Dios nuestro, aunque estén lejos."
Con estas y otras muchas razones les urgía, y los exhortaba diciendo: "Escapad de esta generación perversa." Los que aceptaron sus palabras se bautizaron, y aquel día se les agregaron unos tres mil.
Convertíos y bautizaos todos en nombre de Jesucristo (Hechos 2,36-41)
Salmo
La palabra del Señor es sincera, / y todas sus acciones son leales; / él ama la justicia y el derecho, / y su misericordia llena la tierra. R.
Los ojos del Señor están puestos en sus fieles, / en los que esperan en su misericordia, / para librar sus vidas de la muerte / y reanimarlos en tiempo de hambre. R.
Nosotros aguardamos al Señor: / él es nuestro auxilio y escudo. / Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, / como lo esperamos de ti. R.
La misericordia del Señor llena la tierra. (Salmo 32)
Evangelio
En aquel tiempo, fuera, junto al sepulcro, estaba María, llorando. Mientras lloraba, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos de blanco, sentados, uno a la cabecera y otro a los pies, donde había estado el cuerpo de Jesús. Ellos le preguntan: "Mujer, ¿por qué lloras?" Ella les contesta: "Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo han puesto." Dicho esto, da media vuelta y ve a Jesús, de pie, pero no sabia que era Jesús. Jesús le dice: "Mujer, ¿por qué lloras?, ¿a quién buscas?" Ella, tomándolo por el hortelano, le contesta: "Señor, si tú te lo has llevado, dime dónde lo has puesto y yo lo recogeré." Jesús le dice: "¡María!" Ella se vuelve y le dice: "¡Rabboni!", que significa: "¡Maestro!" Jesús le dice: "Suéltame, que todavía no he subido al Padre. Anda, ve a mis hermanos y diles: "Subo al Padre mío y Padre vuestro, al Dios mío y Dios vuestro."" María Magdalena fue y anunció a los discípulos: "He visto al Señor y ha dicho esto."
En la Pascua somos llamados a experimentar el fruto de reconciliación y santidad que Cristo ganó para nosotros. Ese fruto se dio con abundancia en Pentecostés, y por eso las lecturas de esta octava nos invitan ya a prepararnos para la cumbre y conclusión del tiempo pascual: la donación del Espíritu Santo. 4 min. 23 seg.
Los que niegan la resurrección diciendo que es relato que crearon los discípulos no tienen cómo explicar que los textos nos presentan discípulos escépticos y resistentes a la fe. 17 min. 14 seg.
El don del Espíritu es el cumplimiento de las promesas de Dios, como ha sucedido en virtud de la eficacia del sacrificio de Cristo en la Cruz. 5 min. 36 seg.
La Pascua es la fuerza vital que nos lleva hacia una vida nueva, a detestar el pecado y a inaugurar el mundo nuevo que ya tuvo su comienzo en el Resucitado. 4 min. 24 seg.
Cristo que ha salido del sepulcro nos saca del nuestro, el Resucitado nos hace resucitar, su voz nos invita a un encuentro de amor con Él. 6 min. 6 seg.
Si crece en nosotros el amor, crecerán las experiencias de tristeza porque Dios es ofendido; pero crecerán más las experiencias de alegría por el triunfo de su gracia en nuestras vidas. 5 min. 16 seg.
Características de una buena evangelización: (1) UNIVERSALIDAD: En principio, deseamos llegar a todos. (2) CERTEZA: No ofrecemos opiniones sino una verdad profunda de la que nos hacemos responsables con la coherencia de vida. (3) DENUNCIA DEL PECADO: Porque dejarlo en la penumbra es darle fuerza. (4) PROCLAMACIÓN DE QUE DIOS ES MÁS GRANDE: Porque donde abundó el pecado sobreabundó la gracia. (5) CAPACIDAD DE MOVER: Porque sin conversión la labor de evangelizar es ilusoria. (6) DIMENSIÓN SACRAMENTAL: la fe no queda en ideas o propósitos sino que se celebra y alimenta en los sacramentos. (7) CARÁCTER ECLESIAL: El propósito es que cada evangelizado descubra su lugar en el Cuerpo de Cristo y pueda así también llegar a ser evangelizador. 20 min. 21 seg.
El discurso del apóstol Pedro en Pentecostés dio abundantes frutos: (1) Muestra que el crucificado es el mismo resucitado; (2) Revela el "desquite" de Cristo, que, después de haber sido atravesado por nuestros clavos, nos atraviesa con la espada de su Palabra; (3) Anuncia la maravillosa promesa de cómo después de nosotros otros también llegarán a la fe. 17 min. 45 seg.
Aquel que realmente se ha encontrado con Jesús ya no quiere ni puede vivir sin Él. El Señor no está atrapado en el pasado de tu vida, Él está vivo y porque lo está nos abre un presente y un futuro. 5 min. 26 seg.
La flor de alegría de la Pascua tiene su raíz en el dolor de haberse apartado de Dios y en la humildad para recibir el regalo de su amor. 6 min. 34 seg.
El fruto de la vida, pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor es que recibas el Espíritu Santo para que tu corazón sea renovado, para que todo el bien que Jesús quiso para ti, llegue. 6 min. 17 seg.
El Espíritu que resucitó a Nuestro Señor de entre los muertos es el mismo Espíritu que nos da vida a nosotros, que nos hace creaturas nuevas. 5 min. 54 seg.
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1.1 Nosotros traspasamos el corazón de Cristo; ahora, resucitado de entre los muertos, toma "desquite" traspasando nuestro corazón con la palabra enardecida de sus santos apóstoles y predicadores.
1.2 Es lo que presenciamos en la primera lectura de hoy. La divina eficacia del testimonio de Pedro, ungido con el Espíritu Santo, se traduce en una pregunta que ya tiene el apremio del amor que sólo da el cielo: "¿Qué tenemos que hacer, hermanos". ¡Momento glorioso, triunfo bellísimo, fuerza incomparable! ¿Hay algo más hermoso que saber que Cristo ha resucitado del sepulcro? Sí lo hay: saber que con su resurrección ha derramado gracias infinitas sobre el mundo y que tras de él vamos todos por misericordia y en razón de la fe.
2. Los Pasos
2.1 La conversión tiene unos pasos, que empiezan por el hecho de la Resurrección y que siguen este orden: testimonio apostólico, acogida de la palabra, conciencia del propio límite, acto de la fe, expresión pública de la fe en el bautismo, cambios concretos, integración en la comunidad cristiana, formación en la escucha de la enseñanza apostólica, la práctica de la caridad y la celebración de la fe. Tal es el itinerario básico para un adulto que llega a Cristo Resucitado.
2.2 Es muy interesante descubrir el lugar del bautismo. Las palabras de Pedro no dejan lugar a la duda: "arrepiéntanse y bautícense para el perdón de sus pecados". Lo que seguirá, según el primero entre los apóstoles, es la efusión y recepción del Espíritu Santo. Ahora bien, el acto del arrepentimiento y la efusión del Espíritu son actos interiores y en cierto modo "invisibles". El bautismo, por el contrario, es público y tangible. Esto suscita preguntas: ¿por qué es necesario bautizarse? Al fin y al cabo, ¿quién puede medir si tengo o no fe?
2.3 A poco que lo pensemos, sin embargo, resulta obvio que se necesita un signo exterior para la gracia interior, porque la comunidad cristiana como tal no está hecha de seres invisibles pero transparentes unos a otros, como son los ángeles. Nuestra condición corporal pide un signo que exprese con un lenguaje apropiado a nuestra naturaleza qué somos y qué empezamos a ser. Por eso entendemos que, a partir de la Resurrección del Señor somos básicamente un pueblo de bautizados.