Para todos los que hemos caminado a ritmo de los azares de la Asociación Kejaritomene los primeros viernes permanecen como un tesoro en el recuerdo y en el corazón. ¡Cuantas veces nos reunimos, sobre todo en el Convento de Santo Domingo, para alabar a Cristo, para pedirle misericordia, para predicar su Santo Evangelio!
Hoy, como un eco del Día de la Gracia (pasado 22 de agosto), nos hemos congregado en el aula Sanz Tena de la Universidad Santo Tomás como un momento de evaluación y nuevo empeño para los Oratorios que ya existen, y como ocasión propicia para el nacimiento de otros Oratorios. La visita de Fr. Fredy Cano, que tantas a veces ha apoyado a los kejaritomenos en este pasado año nos colmó de alegría.
La nota triste, en cambio, viene de la espantosa masacre de la escuela de Beslán: cerca de 300 muertos, en su mayoría niños inocentes. Sin poder hacer más por ahora, hemos ofrecido la Santa Misa por ellos y sus parientes.