173.1. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
173.2. Por las manos puedes conocer mucho de las personas. Gruesas y fuertes las del campesino; toscas y hábiles las del albañil; finas y ágiles las del citarista; expresivas, casi patéticas, las del pensador; gráciles y elocuentes las del predicador.