Pienso que la incoherencia es algo demasiado común en la raza humana y que–lamentablemente–no es la herencia ni el sello propio de un determinado grupo de personas, sean o no creyentes. La incoherencia tiene que ver con la fragilidad, a veces; con la conveniencia, a veces; con la ignorancia, otras veces más. nuestros ideales se desconectan de nuestras obras y nos volvemos incoherentes por muchas causas, y me atrevo a pensar que no está en nuestro poder eliminarlas absolutamente todas.
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