Pido respeto para el amor de las parejas
He dicho que nunca me sentí llamado a formar un hogar. Eso me acerca al tema primero que surge cuando se habla de sacerdotes: el celibato.
Dado el número de escándalos de violación de menores que han surgido en la Iglesia recientemente –en la inmensa mayoría de los casos, abusos homosexuales a niños– se airean nuevamente frases del estilo de “¡Ahí están las consecuencias del celibato! ¿Qué más tendrá que pasar para que el Papa entienda que los sacerdotes deben casarse (o poderse casar)?”