El viaje a Madrid fue puntual y placentero. Por cierto, el primer vuelo que me toca con el nuevo estilo de venta abordo. Nada de pasabocas o comida gratis: si quieres algo, lo compras. Iba con sed, y hube de pagar 1.50 euros por una lata de 7Up. La entrega de las maletas bastante demorada, pero el proceso de inmigración muy ágil, simplificado al máximo. Eso fue agradable. El límite de 20 Kg de equipaje en bodega se va generalizando, de modo que hay que ser parcos para no pagar excesos de equipaje.