|
Homilías de Fr. Nelson Medina, O.P.Derechos Reservados © 1997-2024
Miércoles, Julio 13 de 2005[Lectio Divina] [Laudes] [Vísperas] [Completas] Sobre las fechas y horas de publicación de estas oraciones mira aquí Ten presente en tus intenciones de este día:
Tiempo Ordinario, Año Impar,
|
Lectura: |
Haz click en la referencia bíblica: |
---|---|
1a. |
El ángel del Señor se apareció en una llamarada entre las zarzas (Éxodo 3,1-6.9-12) |
Salmo |
El Señor es compasivo y misericordioso. (Salmo 102) |
Evangelio |
Has escondido estas cosas a los sabios y se las has revelado a la gente sencilla (Mateo 11,25-27) |
Núm. |
Datos |
Escuchar |
Más... |
---|---|---|---|
1 |
1999/07/14 |
|
|
2 |
2011/07/13 |
|
|
3 |
2013/07/17 |
|
|
4 |
2015/07/15 |
|
|
5 |
2015/07/15 |
|
|
6 |
2017/07/19 |
|
|
7 |
2019/07/17 |
|
|
8 |
2021/07/14 |
|
|
9 |
2023/07/19 |
|
|
10 |
2024/07/17 |
|
Haz una donación
para que esta obra continúe, y llegue a más personas! ¡La gloria sea para Dios!
Versión |
Homilía para leer: |
---|---|
1 |
1. "Ven" y "No te acerques"1.1 El llamado que Dios hace a Moisés nos sirve de modelo para apreciar algunos rasgos preciosos de las llamadas de Dios. Por eso, antes de continuar, apreciemos en su medida lo que esto significa: que Dios llame al hombre. Nada más natural que el hombre llame a Dios, porque nuestra condición de creaturas nos hace prontos al dolor y la indigencia, y por ello, prontos a la súplica. Hay que considerar en cambio como "sobrenatural" que Dios llame al hombre, que lo implique en sus planes, que cuente con él y haga un camino junto a él. 1.2 Dios atrae a Moisés. Lo llama por su nombre, mostrando ya en ello que lo conoce de modo singular, así como conoce en su singularidad, urgencia y agudeza el dolor de su pueblo. 1.3 Y sin embargo Dios también le pone un límite a Moisés: "el lugar que pisas es tierra sagrada." Notemos el papel de lo sagrado aquí. Los dolores de los israelitas son concretos y aparentemente "terrenales": falta de descanso, sobrecarga de trabajo, maltrato de los capataces. Para solucionarlos, Dios marca una frontera, define una tierra como sagrada. No es un detalle que sobre en la Biblia, pues en ella nada sobra. 1.4 Lo que sucede es que Faraón se ha considerado dueño y señor de la tierra. Moisés está en el Horeb, y Dios está diciendo: "esta montaña es mía." La montaña misma, con sus rocas, arena, zarzas y piedras no es lo más importante, sino el hecho de que Dios afirme que hay un límite a las pretensiones de los reyes, también del que se creía todopoderoso en aquella época. Lo que Dios dice es: "Lo sagrado existe; vuestra tierra no es unívocamente vuestra." Entendemos así que, con el llamado a Moisés, Dios está de hecho restaurando el orden original de la creación: las cosas serán nuestras si nosotros somos de Dios. 2. El Reino revelado a los pequeños2.1 Así como uno puede pasar por encima de un tronco viejo sin descubrir sus retoños nuevos, así uno puede pasar por el mundo sin descubrir los brotes del Reino. Hablando en términos generales, que son los términos de los grandes teoréticos, los grandes estrategas y los grandes comerciantes, el Reino no importa mucho. En términos generales y en una visión de bulto el Reino hace poco y pesa poco. Mas hay gente, la gente sencilla, la gente pequeña, que no tiene una vida grande sino una vida pequeña, y por eso tienen ojos para descubrir el misterio, la belleza y la fecundidad de lo pequeño. Así nos lo muestra Jesús en el evangelio de hoy. 2.2 Los "sabios y entendidos" buscan la verdad en aquello que se impone. Necesitan ser abrumados por el poder de algo para desear comprenderlo. El Reino de Dios se les escurre entre los dedos y travieso se oculta a sus ojos. El que se impone es débil porque no puede vencer la verdadera fortaleza del hombre, que es su corazón. Allá, en esa fortaleza, es donde nos encerramos a odiar a los que nos oprimen y a maldecir a los que pretenden imponerse sobre nosotros. Por eso el Reino no se impone, porque el que tiene que imponerse en ello mismo demuestra que nada puede frente a la muralla interior que cada uno construye en su corazón. 2.3 Los sencillos y humildes, en cambio, han aprendido otro lenguaje. Saben distinguir las señales de auxilio del que padece necesidad quizá porque han tenido que utilizarlas en su momento. Saben que todos pasamos por horas difíciles en las que nada podemos y todo necesitamos. Ese es el lenguaje del Reino de Dios. Ese es el lenguaje de Jesús. Ese es la atmósfera que irradia, discreta y humilde y pura, la Eucaristía. |
-Fr. Nelson Medina, OP
Suscríbete gratis a mi Boletín de Evangelización Católica |
|