Cuidado con el silencio cómplice – Una Homilía para el día de los Santos Inocentes

La crueldad de Herodes tiene origen en que su mentira y su impostura iban a quedar al descubierto; pero atención que “todo Jerusalén” se sobresaltó con él, porque el silencio cómplice de muchos, que no se consideran “malos” es la abundante fortaleza de los pocos que sí consideramos “perversos.”