Esta meditación es la tercera y última de tres, de un Retiro en agosto 2007 a un grupo de Vírgenes Seglares. De particular interés para personas consagradas, ayuda a todos a comprender aspectos esenciales y muy hermosos del camino del “seguimiento de Cristo.” La unidad está profundamente en el Corazón de Cristo. Si el pecado es división porque cada uno busca lo suyo, la unidad es fruto de la conversión y de la generosidad de todos. No puedo romper la unidad sin romper la unidad del Corazón de Jesús.
Un vaso de agua…
Padres nuevos para un mundo nuevo
La Cruz de Cristo es el “mirador” que nos permite contemplar en su conjunto la maravillosa obra de nuestra propia salvación. Desde la fuerza redentora de la Cruz hacemos un recorrido por la redención y renovación de lo que significa ser hombre, ser varón. La solución para nuestra sociedad no es poner a competir hombres y mujeres, sino descubrir que los errores cometidos por una masculinidad insegura han de ser profundamente sanados pues sólo con papás nuevos tendremos familias nuevas, y un mundo nuevo. Esta predicación se ofreció en el marco del Congreso de Familias de la Asociación María Santificadora, el día 5 de Agosto de 2007.
Cuatro años después…
El próximo 1° de septiembre cumpliré cuatro años de haber llegado por primera vez a Irlanda con el propósito de hacer un doctorado de teología en Milltown Institute. El camino recorrido ha sido extenso e intenso y creo que, sin bajar la mirada que ya apunta hacia el final de esta etapa, es saludable hacer balance, sobre todo para no dejar perder lo que se ha podido lograr con tanto esfuerzo.
Por lo pronto me llama la atención cómo la experiencia de formación intelectual de nivel superior ha ido cambiando en la historia reciente de nuestra Provincia, especialmente si la comparamos con lo que podía ser esta clase de estudios en años no muy lejanos. Me refiero en particular a tres aspectos: uso de los idiomas, servicio a instituciones internacionales y relación viva con otras culturas y países. Mi impresión es que los cambios que se han producido son ya permanentes y por lo tanto conviene conocerlos, discutirlos y quizás pensar en tomar las previsiones apropiadas para que nuestra Provincia se sitúe del mejor modo en el conjunto de la Orden, de cara al servicio que nos es propio como predicadores.
Mi Familia es mi Tesoro
Predicación del 4 de Agosto de 2007, en el contexto del Congreso de Familias organizado por al Asociación María Santificadora. Consta en la Biblia que desde el principio de la Historia el enemigo ha querido destruir la familia, que es hogar, comienzo y restauración de la vida humana. La batalla no está perdida, sin embargo, pues la misma Escritura nos da pistas para valorar y defender el tesoro de la familia.
Maravillas de la Ingeniería
Fascinados por la Palabra: Ventanas de Oportunidad
Cuando llega el momento de tomar una decisión todos pasamos por lo que se llama una “ventana de oportunidad,” es decir, ese tiempo e el que uno está dispuesto a recibir una palabra o consejo. ¿Sabes cómo aprovechar tus ventanas de oportunidad?
77. El Domingo
77.1. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
77.2. Cada domingo la Santa Iglesia celebra la resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. No tendría sentido esta celebración si no fuera ella misma la que marca el ritmo de la Historia humana hacia el domingo sin ocaso que es el Cielo. Como todo es preciso que lo aprendas a su tiempo y en su medida, también es necesario que aprendas a vivir el Día del Señor.
Tener fe…
Por sus heridas hemos sido sanados
En toda herida hay un aspecto exterior, que corresponde a los hechos, y un aspecto interior, que corresponde al significado o peso que damos a esos hechos. En la vida y el ministerio de Jesucristo encontramos claves fundamentales no sólo para sanar lo que nos ha sucedido sino para no dejarnos herir. No se trata de un blindaje ni de aplastar a otros sino de una comprensión profunda de la miseria humana y la misericordia divina.
Bases de la Espiritualidad de SANCTUS, 2 de 2
La Cruz es el horizonte de Cristo; es su “hora” decisiva; es sobre todo el lugar de la revelación decisiva y la entrega completa, la kénosis del Señor. El lenguaje con que Cristo nos absolvió es su propia Sangre. Este es el “misil” de su amor, que quebranta el corazón humano y por fin lo abre a los misterios del arrepentimiento, la gratitud y la misericordia.
Bases de la Espiritualidad de SANCTUS, 1 de 2
El testimonio del Nuevo Testamento nos permite descubrir que hay una secuencia, un orden que va desde la predicación de los Apóstoles a la conformación de comunidades, y de ahí hacia el impulso misionero. Alguna vez pasa que el fervor de un convertido quiere saltarse la etapa de la comunidad por apresurarse hacia la misión pero en realidad es solo en al comunidad donde encontramos hogar, escuela, hospital y plataforma para nuestra vida cristana.
Libertad y Liberacion en la Pasion de Cristo, 2 de 2
En el contexto de una Comunidad Católica Carismática en Bogotá, esta es una predicación sobre cómo nuestros oídos, nuestros ojos y nuestro corazón necesitan ser liberados. Muchas personas piensan que la “liberación” es sólo para casos de posesión y se olvidan que siempre que nuestra voluntad es insuficiente y está atada necesitamos ayuda: necesitamos ser liberados. Esta es la segunda parte, la final, de esa extensa predicación. Incluye oraciones.
Libertad y Liberacion en la Pasion de Cristo, 1 de 2
En el contexto de una Comunidad Católica Carismática en Bogotá, esta es una predicación sobre cómo nuestros oídos, nuestros ojos y nuestro corazón necesitan ser liberados. Muchas personas piensan que la “liberación” es sólo para casos de posesión y se olvidan que siempre que nuestra voluntad es insuficiente y está atada necesitamos ayuda: necesitamos ser liberados. Esta es la primera parte de esa extensa predicación. Incluye oraciones.
76. La Iglesia peregrina en el futuro

76.1. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
76.2. La constancia misma que Dios te ha regalado en la consignación de estas palabras es una señal que no debes desdeñar. Ningún proyecto estrictamente tuyo de esta naturaleza alcanzó ni la mitad de lo que ahora puedes ver que hemos hecho. Es motivo para que le des gracias a Dios, porque, has de creerme, esto que tú estás viviendo, aunque parezca excepcional en este momento, en cierto sentido tendría que ser la vida normal y común de la Iglesia Peregrina. ¿No es normal y común que, si un mismo Dios nos ha creado y nos ha comunicado su gracia, nos gocemos en alabarle a una voz y en todo procuremos unirnos más y más a su amor inconmensurable?
75. Alegraos con los que se Alegran
75.1. Quiero que sepas que me alegra tu alegría. Pablo dejó esta enseñanza: «Alegraos con los que se alegran; llorad con los que lloran», y en cierto modo lo explicó en lo que sigue: «Tened un mismo sentir los unos para con los otros; sin complaceros en la altivez; atraídos más bien por lo humilde; no os complazcáis en vuestra propia sabiduría» (Rom 12,15-16).
75.2. Ese “mismo sentir,” pues, no es una forma de complicidad o, como diría alguna psicología contemporánea, “falta de personalidad.” Más bien es la respuesta cristiana al problema siempre actual de la altivez, ese afán de buscar la propia “altura.” ¿No fue este el pecado de Babel: el ser humano queriendo levantarse a lo alto? Por eso Pablo habla de “un mismo sentir,” porque un terreno llano no tiene “alturas” o “singularidades.” Es algo como lo que alegóricamente puedes entender del conocido texto de Isaías: «Que todo valle sea elevado, y todo monte y cerro rebajado; vuélvase lo escabroso llano, y las breñas planicie» (Is 40,4). La invitación de Pablo es algo así como “vuélvase lo escabroso llano.”
