La santa pureza

La santa pureza la da Dios cuando se pide con humildad.

¿Qué hermosa es la santa pureza! Pero no es santa, ni agradable a Dios, si la separamos de la caridad. La caridad es la semilla que crecerá y dará frutos sabrosísimos con el riego, que es la pureza. Sin caridad, la pureza es infecunda, y sus aguas estériles convierten las almas en un lodazal, en una charca inmunda, de donde salen vaharadas de soberbia.

Hace falta una cruzada de virilidad y de pureza que contrarreste y anule la labor salvaje de quienes creen que el hombre es una bestia. -Y esa cruzada es obra vuestra.

Muchos viven como ángeles en medio del mundo. -Tú… ¿por qué no?

Cuando te decidas con firmeza a llevar vida limpia, para ti la castidad no será carga: será corona triunfal.

Me escribías, médico apóstol: “Todos sabemos por experiencia que podemos ser castos, viviendo vigilantes, frecuentando los Sacramentos y apagando los primeros chispazos de la pasión sin dejar que tome cuerpo la hoguera. Y precisamente entre los castos se cuentan los hombres más íntegros, por todos los aspectos. Y entre los lujuriosos dominan los tímidos, egoístas, falsarios y crueles, que son características de poca virilidad”.

La gula es la vanguardia de la impureza.

No quieras dialogar con la concupiscencia: despréciala.

El pudor y la modestia son hermanos pequeños de la pureza.

Sin la santa pureza no se puede perseverar en el apostolado.

La oracion como principio y fundamento

¿Santo, sin oración?… -No creo en esa santidad.

Si no eres hombre de oración, no creo en la rectitud de tus intenciones cuando dices que trabajas por Cristo.

Le decías: “No te fíes de mí… Yo sí que me fío de ti, Jesús… Me abandono en tus brazos: allí dejo lo que tengo, ¡mis miserias!” -Y me parece buena oración.

La oración del cristiano nunca es monólogo.

“Hacer un minuto de silencio por…”. -Deja eso para los que tienen el corazón seco. Los católicos, hijos de Dios, hablamos con el Padre nuestro que está en los cielos.

No dejes tu lección espiritual. -La lectura ha hecho muchos santos.

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 8 de 8, Crecer en la fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

8. Caminos de crecimiento en la fe
8.1 Oración: “Señor, aumenta mi fe.” “Señor, que vea”
8.2 Escucha de la Palabra (“La fe viene de escuchar” – Romanos 10)
8.3 La liturgia y los sacramentos, especialmente la Eucaristía y la Confesión
8.4 La fe crece al ponerla en práctica (Mateo 7)
8.5 La fe se afianza recibiendo testimonio en la propia comunidad
8.6 La fe se amplía al contacto con las vidas de los santos
8.7 La fe se purifica y consolida con el estudio, si es humilde y en comunión con la Iglesia
8.8 La fe se consolida en la victoria sobre la tentación
8.9 La fe se robustece compartiéndola en la evangelización
8.10 Leer el paso de Dios en la propia historia

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 7 de 8, Enemigos sutiles de la fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

7. Enemigos sutiles de la fe
7.1 Las “películas”: lo que uno supone que sería “normal” para uno
7.2 Los “derechos”: el intento de asegurar un mínimo de retorno a la inversión
7.3 Las comparaciones con el bueno y con el malo
7.4 La rutina, la costumbre, la fe “sociológica”
7.5 La comodidad, el área de confort.

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 6 de 8, Amenazas a la fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

6. Amenazas contra la fe
6.1 Autoexclusión (la “mala suerte;” el poder del pasado)
6.2 Propia cobardía, incoherencia, impenitencia, curiosidad, descuido
6.3 Antitestimonios no digeridos
6.4 Eventos trágicos no asimilados
6.5 Confusión doctrinal: falso ecumenismo, super-simplificación (“al fin y al cabo todo va a lo mismo”), tolerancia sin discernimiento, engañosa paz social
6.6 Los partidos y facciones en la comunidad
6.7 Los “ismos”: ateísmo, agnosticismo, sincretismo, panteísmo, subjetivismo, psicologismo, irenismo

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 5 de 8, Falsificaciones de la fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

5. Falsificaciones de la fe
5.1 Convicción subjetiva
5.2 Energía / pensamiento positivo
5.3 Negación de la realidad (“Hagamos de cuenta…”)
5.4 Esquema plausible y racional
5.5 Activismo y búsqueda de relevancia social
5.6 Espiritualismo y sobrenaturalismo
5.7 Fanatismo

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 4 de 8, Una fe madura

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

4. Rostro de una fe madura
4.1 Firme, estable, perseverante
4.2 Gozosa, contagiosa, luminosa
4.3 Eclesial: situada y a la vez, universal
4.4 Integral, coherente, total
4.5 Profunda, cierta y correcta
4.6 “Obra por el amor”
4.7 Misionera y evangelizadora

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 3 de 8, El contenido de la fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

3. El contenido de la fe
3.1 Las confesiones de fe
3.2 Los símbolos de la fe
3.3 La liturgia
3.4 La catequesis
3.5 La religiosidad poplar
3.6 La teología
3.7 La mística

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 2 de 8, La Fe como Confianza

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España, en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

2. La fe como confianza
2.1 Descentramiento natural (hijo – padre, discípulo – maestro, paciente – médico)
2.2 Descentramiento sobrenatural (pueblo – Moisés, rey – profeta, apóstoles – Cristo)
2.3 Algunos testimonios bíblicos: Abraham, Los Salmos, los Profetas, la Virgen María, los Apóstoles

ESCUCHA, Breve Curso sobre la Fe, 1 de 8, Riqueza y Complejidad de la Fe

Curso ofrecido a las Dominicas del Monasterio de Lerma, España en Junio de 2012, con motivo del Año de la Fe promulgado por el Papa Benedicto XVI.

Tema 1: Riqueza y complejidad de la fe.
1.1 Consciente e inconsciente
1.2 Subjetiva, comunitaria y objetiva
1.3 Intelectual y volitiva
1.4 Acto específico y atmósfera que cobija
1.5 Comprende lo ordinario y lo extraordinario
1.6 Se puede testificar pero no imponer
1.7 Se puede exponer pero es puro don
1.8 Se puede defender pero no demostrar
1.9 Requiere de obras tanto como de palabras
1.10 Transforma el mundo presente pero va más allá de él

Persevera en tu oracion

Cuando vayas a orar, que sea éste un firme propósito: ni más tiempo por consolación, ni menos por aridez.

No digas a Jesús que quieres consuelo en la oración. -Si te lo da, agradéceselo. -Dile siempre que quieres perseverancia.

Persevera en la oración. -Persevera, aunque tu labor parezca estéril. -La oración es siempre fecunda.

Tu inteligencia está torpe, inactiva: haces esfuerzos inútiles para coordinar las ideas en la presencia del Señor: ¡un verdadero atontamiento! No te esfuerces, ni te preocupes. -Oyeme bien: es la hora del corazón.

Esas palabras, que te han herido en la oración, grábalas en tu memoria y recítalas pausadamente muchas veces durante el día.

“Pernoctans in oratione Dei” -pasó la noche en oración. -Esto nos dice San Lucas, del Señor. Tú, ¿cuántas veces has perseverado así? -Entonces…

Si no tratas a Cristo en la oración y en el Pan, ¿cómo le vas a dar a conocer?

Entra de lleno en la oracion

“Et in meditatione mea exardescit ignis” -Y, en mi meditación, se enciende el fuego. -A eso vas a la oración: a hacerte una hoguera, lumbre viva, que dé calor y luz. Por eso cuando no sepas ir adelante, cuando sientas que te apagas, si no puedes echar en el fuego troncos olorosos, echa las ramas y la hojarasca de pequeñas oraciones vocales, de jaculatorias, que sigan alimentando la hoguera. -Y habrás aprovechado el tiempo.

Te ves tan miserable que te reconoces indigno de que Dios te oiga… Pero, ¿y los méritos de María? ¿Y las llagas de tu Señor? Y… ¿acaso no eres hijo de Dios? Además, El te escucha “quoniam bonus…, quoniam in sæculum misericordia ejus”: porque es bueno, porque su misericordia permanece siempre.

Se ha hecho tan pequeño -ya ves: ¡un Niño!- para que te le acerques con confianza.

Habla Jesús: “Así os digo yo: pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá”. Haz oración. ¿En qué negocio humano te pueden dar más seguridades de éxito?

No sabes qué decir al Señor en la oración. No te acuerdas de nada, y, sin embargo, querrías consultarle muchas cosas. -Mira: toma algunas notas durante el día de las cuestiones que desees considerar en la presencia de Dios. Y ve con esa nota luego a orar.

Después de la oración del Sacerdote y de las vírgenes consagradas, la oración más grata a Dios es la de los niños y la de los enfermos.