Maestros en la Fe, 5 de 6, Pablo VI y el valor de creer

[Curso a las Monjas Dominicas del Monasterio de Santa Ana, en Murcia, España.]

Tema 5 de 6: Pablo VI y el valor de creer

Breve perfil biográfico

* Trabajó en la Secretaría de Estado del Vaticano de 1922 a 1954, cuando fue nombrado Arzobispo de Milán (sede de San Ambrosio y San Carlos Borromeo, entre otros).

* Continuó el Concilio (1963-1965), fue el primero en aplicarlo e interpretar sus enseñanzas, rodeado de presiones, sospechas e incluso acusaciones.

* Papa de gran espiritualidad mariana, escribió tres encíclicas sobre el Rosario y sobre la Virgen, a la que dio por primera vez el título de “Madre de la Iglesia.”

* Valiente y a la vez deseoso de acoger a todos, le correspondió una época de profundos cambios y un tiempo muy convulso: Llegada del hombre a la Luna, Guerra Fría, Guerra de Vietnam, auge de las Brigadas Rojas; fue el primer pontífice en dirigir la palabra a las Naciones Unidas. No menores fueron las tensiones en la Iglesia: extremismos postconciliares, publicación del catecismo holandés, levantarse de la rebeldía lefebvriana, y sobre todo: desobediencia cínica frente a su Encíclica Humanae Vitae.

* Escribió así cuando fue elegido Papa el 21 de Junio de 1963: “Según palabras del mismo Montini, él sabía lo que venía. Escribió en su diario: “La posición es única. Me trae gran soledad. Yo era solitario antes, pero ahora mi soledad llega a ser completa e impresionante…” Pero no tenía miedo a la nueva soledad que se esperaba de él. Reconoció que sería inútil buscar ayuda fuera, o de confiar todo a los demás. Se veía tan solitario, con Dios. La comunicación con Él debía ser completa e inconmensurable.

El Credo del Pueblo de Dios

* Pablo VI convocó el Año de la Fe (1967-1968), con ocasión de los XIX siglos del martirio de los apóstoles Pedro y Pablo, y ante las desviaciones doctrinales que ya asomaban, como en el Catecismo Holandés. Jacques Maritain, filósofo, católico convencido, y amigo personal del Papa, le sugirió que el Papa expresara en lenguaje sencillo, para todos, la fe de la Iglesia. La redacción del texto estuvo a cargo, primero, del mismo Maritain y pasó el examen del Card. Charles Journet. La versión final fue revisada y cuidada por el mismo Papa Pablo VI, que la proclamó el 30 de Junio de 1968. Sigue la parte pertinente del texto:

* Queremos que esta nuestra profesión de fe sea lo bastante completa y explícita para satisfacer, de modo apto, a la necesidad de luz que oprime a tantos fieles y a todos aquellos que en el mundo —sea cual fuere el grupo espiritual a que pertenezcan— buscan la Verdad.

* Por tanto, para gloria de Dios omnipotente y de nuestro Señor Jesucristo, poniendo al confianza en el auxilio de la Santísima Virgen María y de los bienaventurados apóstoles Pedro y Pablo, para utilidad espiritual y progreso de la Iglesia, en nombre de todos los sagrados pastores y fieles cristianos, y en plena comunión con vosotros, hermanos e hijos queridísimos, pronunciamos ahora esta profesión de fe…

ESCUCHA, Fe y Tiempo

* El Nuevo Testamento caracteriza el tiempo en que viven los cristianos con expresiones más bien sombrías: son “tiempos malos” (Efesios 5,15-16: Tened cuidado cómo andáis; no como insensatos, sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.) Se nos amonesta: “Sed salvos de esta perversa generación” (Hechoas 2,40), en continuidad con el lamento de Jesús: “¡Oh generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con vosotros? ¿Hasta cuándo os tendré que soportar?” (Mateo 17,17). San Pablo advierte: “Debes saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles” (2 Timoteo 3,1; véase 4,3)

* Por otra parte, el tiempo es breve: 1 Corintios 7,29. Estos son los últimos tiempos (Hebreos 1,1), y lo sabemos porque Cristo se ha manifestado (1 Pedro 1,20). A todos se nos advierte: “no sabéis cómo será vuestra vida mañana. Sólo sois un vapor que aparece por un poco de tiempo y luego se desvanece” (Santiago 4,14). Por eso hay que saber sufrir durante un breve tiempo (1 Pedro 5,6.10).

* Enseña san Pedro: “Puesto que Cristo ha padecido en la carne, armaos también vosotros con el mismo propósito, pues quien ha padecido en la carne ha terminado con el pecado, para vivir el tiempo que le queda en la carne, no ya para las pasiones humanas, sino para la voluntad de Dios. Porque el tiempo ya pasado os es suficiente para haber hecho lo que agrada a los gentiles, habiendo andado en sensualidad, lujurias, borracheras, orgías, embriagueces y abominables idolatrías.” (1 Pedro 4,1-3)

* Es Pedro también quien saca la conclusión: “El fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de espíritu sobrio para la oración. Ante todo, sed fervientes en vuestro amor los unos por los otros, pues el amor cubre multitud de pecados. Sed hospitalarios los unos para con los otros, sin murmuraciones. Según cada uno ha recibido un don especial , úselo sirviéndoos los unos a los otros como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén.” (1 Pedro 4,7-11).

La Verdad y el Amor, 11 de 12, Fe y consejos evangelicos

[Retiro Espiritual en el Real Monasterio de Monjas Dominicas en Caleruega, Octubre de 2012.]

Tema 11 de 12: Fe y consejos evangélicos

* Los “consejos” que brotan del Evangelio son susurros del Espíritu Santo, voces suyas que nos ayudan a descubrir en lo concreto e irrepetible de cada vida dónde está nuestro bien, no como contrapuesto sino como integral al bien de la Iglesia.

* Los consejos que da el Espíritu son también impulsos suyos que nos ayudan a vencer nuestras malas inclinaciones, y que a la vez nos dan una pregustación del bien que nos aguarda, como si nos dijera: “Sigue por aquí, que te conviene, y te irá bien…”

* Es la fe la que mantiene abierto el canal a esa voz del Espíritu. Con fe hemos recibido el primer anuncio. Con fe hemos obedecido ya, al desechar nuestros antiguos pecados. Si se cierra el canal de la fe no valdrá haberlo tenido abierto porque la vida no está en empezar sino en continuar, no perderse, perseverar hasta la meta.

* Además, si se cierra el canal que nos acerca las voces del Cielo pronto se abrirán los canales que traen las voces de infierno. Si no atendemos a los susurros de la gracia, los susurros que tientan con tipo de soberbias, codicias y lujurias nos irán conquistando desde dentro.

* Bien se ve que no pueden vivirse los votos si no hay por dentro fascinación con los consejos, y no podrán recibirse los consejos sin la fe que nos hace sensibles y a la vez inteligentes a la voz de Dios, y su voluntad.

* Suele definirse a la vida consagrada como “seguimiento de Cristo.” Pues hay que anotar: (1) Seguirle implica que nos pase lo que a él le pasó. Sin la sabiduría de la Cruz no habrá seguimiento del Crucificado. (2) Seguirle requiere que se le vea, que se le tenga a la vista, y eso lo da la fe. Pedros se hundió en las aguas cuando quitó la fe y la mirada de Cristo, mientras que la Carta a los Hebreos invita a que tengamos nuestros ojos siempre en él, como lo concede la fe.

La Verdad y el Amor, 09 de 12, Fe como cimiento

[Retiro Espiritual en el Real Monasterio de Monjas Dominicas en Caleruega, Octubre de 2012.]

Tema 9 de 12: Fe como cimiento

* El subjetivismo infecta por igual el pensar y el obrar. La lógica consecuencia de imaginarse que uno puede definir lo que es verdadero, es que después uno imagine que puede definir qué es lo correcto. Por eso la pérdida del recto pensamiento (ortodoxia) conduce prontamente a la pérdida del recto obrar (ortopraxis).

* El subjetivismo mira la fe como un fruto de la fantasía o como una sugestión que a uno se le antoja agradable o conveniente. O también la mira como aquello que la “alta gerencia” de la Iglesia estima que debe creerse. De esta última postura surge una idea servil de la Iglesia, como si su principal tarea fuera buscar la aprobación del mundo. Es la Iglesia que vive en “rebajas” y que se considera dueña de lo que enseña o manda.

* Por contraste, la frase Pablo en 1 Corintios es: “Aquello que recibí, lo mismo transmití.” No se siente dueño del mensaje ni se pone por encima de él. El verdadero apóstol ve al depósito de la fe en los mismos términos que hablaba san Agustín refiriéndose a la Escritura. como un pozo que sacia mi sed, pero de cuyas aguas no soy dueño: Carezco entonces del derecho de dañar lo que otros habrán de beber.

* Eso de contaminar la fe que es bien de todos ya aparece en el Nuevo Testamento. En pasajes como 1 Colosenses 2 vemos a Pablo advirtiendo sobre el peligro de dejarse llevar por doctrinas capciosas, o de dejarse convencer de “filosofías humanas.”

* Si hay algo que tiene que ser la fe es verdadera, porque sólo una fe verdadera es cimiento de una esperanza que vaya más allá del deseo. Y sólo una fe verdadera revela el amor de Dios en su sorprendente dimensión, aquella que nos colma y nos hace capaces de amar.

Que NO es y que SI es la fe

Fray quisiera apelar a su sabiduría, y podría en 5 frases o 5 palabras, que me diga: QUE ES LA FE PARA UD., y 5 frases o palabras que me resuman, QUE NO ES FE. — S.M., Paraguay

* * *

QUÉ NO ES LA FE:

1. No equivale a la sugestión ni a “pensar con el deseo.”

2. No es lo mismo que una actitud optimista, a la manera del pensamiento positivo o la llamada programación neuro-lingüística.

3. No es la simple repetición de frases de religión, en caso de que uno ni siquiera las entienda ni acoja de corazón.

4. No es irracionalidad, como si al apagar la razón empezara la fe, o al apagar la fe empezara la razón.

5. No es simple costumbre o práctica social establecida.

QUÉ SÍ ES LA FE:

1. Es el primero entre los dones que el Espíritu Santo otorga a un ser humano, cuando le concede afirmar con certeza el ser y el obrar de Dios.

2. Es la RESPUESTA que damos a la PROPUESTA de Dios en la persona de su Hijo Jesucristo.

3. Es un movimiento de confianza y entrega total hacia Dios porque hemos descubierto su bondad, sabiduría y poder.

4. Es la perfección máxima que puede alcanzar nuestro entendimiento en esta tierra porque al abrirse a creer se apoyo en el entendimiento mismo de Dios.

5. Es el lenguaje común, el código genético mismo, de la iglesia, pueblo santo que ha nacido de la predicación y es regido por el cuidado de los apóstoles y sus sucesores.

Para que sirven los dogmas

Lo que sigue es mi comentario a esta entrada del blog Espada de doble filo de Bruno Moreno..


Brillante. Oportuno. No te digo más elogios para no tentar la vanidad, Bruno. Dios te bendiga.

Agrego algo: observemos cómo, detrás del desprecio al dogma cristiano y católico está también la desconexión entre verdad y libertad, o entre bien y verdad. El bien se ve como fruto del puro apetito, de la espontaneidad buenista, o de un consenso social que se asume… dogmáticamente. Lo “bueno” es, por dogma postmoderno, lo que la sociedad secularizada declare como tal.

Esa “bondad,” indigesta y de muchos modos contradictoria consigo misma, no resiste análisis. Se refugia es su dogmatismo intolerante, subjetivista, rabioso, arrogante. Esa pésima “bondad” sólo habla de Cristo para negarlo, desfigurarlo o blasfemar de su Iglesia.

De ahí la increíble capacidad de nuestra sociedad “racional” y “desarrollada” para detestar a un hombre como Benedicto XVI. El Papa que el Espíritu Santo nos ha dado es exactamente la peor noticia que podían recibir los que creen en el dogma buenista, ultrasecularizado y subjetivista. Pero también hoy Cristo cumple su promesa: “He orado por ti, Pedro, para que tú fe no desfallezca.”

Esto da tristeza, las cadenas de correos electronicos

Una señora, supuestamente muy católica, me ha enviado hace poco este correo electrónico:

POR SI ACASO….Los ángeles se han enterado de que estas luchando contra algo y dicen que ya ha pasado y recibirás una bendicion. Si crees en los ángeles envia este mensaje, no lo ignores por favor, estas avisada. Esta noche se arreglaran dos asuntos de tu vida para tu alivio. Deja todo lo que estas haciendo y reenvía el mensaje. Mañana sera el día mejor en absoluto. Envía este mensaje a 10 amigos (incluyéndome a mi) si no vuelve supongo que no soy parte de ellos. En cuanto recibas 5 mensajes, alguien que te quiere te hará un sorpresa silenciosa

Es decir: un caso más de las detestables “cadenas.” Se me ocurre ofrecer estas reflexiones:

  1. ¡Qué largas son esas cadenas! Llegan sin permiso a millones y millones de personas. Se propagan a impulsos de dos alas muy propias en el corazón humano: el anhelo de recibir buenas noticias, y el temor de ser castigado. El deseo de recibir algo gratis, una sorpresa, una sonrisa inmerecida, un regalo… ¡cuánto poder tiene en el corazón humano! ¿Pero no es eso lo que hemos recibido de Dios Padre en la Persona adorable de su Hijo Jesucristo, puesto que el Padre que nos ha dado a su Hijo “cómo no nos dará con él todas las cosas” (Romanos 8,32)? Y el temor de una reprimenda, de un error irreparable, de un desengaño final, ¿no es de lo que hemos sido librados en Cristo, y por eso se lee: “No pesa ya condenación alguna contra aquellos que están en Cristo Jesús” (Romanos 8,1)?
  2. ¡Qué pesadas son esas cadenas! Bajo su peso cruje la fe verdadera. La manipulación de sentimientos y expectativas, ¿se puede hacer impunemente? El tomar a los Santos Ángeles  como si fueran piezas de un juego arbitrario que trae o quita la suerte, ¿no es un irrespeto del que nos advierte severamente la Carta de San Judas? El deber de hacer algo, típicamente reenviar y reenviar mensajes, no es pasatiempo absurdo que convierte el destino humano en un caprichoso azar o en una muda ruleta? ¿Y dónde queda el Dios providente, que sabe todo de nosotros (véase Lucas 12,7), si la supuesta suerte de uno depende de revelaciones falsas y de uso abusivo e irrespetuoso del lenguaje de la fe?
  3. ¡Qué frágiles son esas cadenas! No tienen más poder que tu decisión de transmitirlas, y hacerlas así fuertes, o dejarlas morir, y así romperlas. Démonos cuenta de la espantosa fragilidad de las cadenas cuando comprobamos que muchas empiezan con términos como el que he transcrito hoy:  “Por si acaso…” La pobre señora, pobre en la fe, por lo menos, ni siquiera está segura de que eso es verdad. Pero su mundo es el mundo del temor, de la incertidumbre, y por eso prefiere encender una veladora a la superstición, que es como encendérsela al demonio.

Estimada amiga: sea libre en Jesucristo. Adore, como hace nuestra Santa Iglesia Católica, el beneplácito divino, el plan bendito de nuestra salvación, que se hace presente de modo infinitamente intenso en los sacramentos, y sobre todo, en la Eucaristía. Cristo rompe las cadenas.

Separa unas veinte horas antes del 11 de Octubre

Con la gracia peculiar de tener sobre sí la preocupación por la Iglesia entera, el Papa Benedicto nos invita a todos al Año de la Fe, desde el 11 de Octubre de 2011 hasta el 24 de Noviembre del 2013. El motivo histórico son os 50 años de la sesión inaugural del Concilio Vaticano II invitado. El motivo pastoral es que la Iglesia entera necesita abrir con generoso amor la Puerta de la Fe, más y más, para vivir con mayor fuerza y proclamar con mayor gozo el Evangelio de salvación.

Si esta invitación te cautiva tanto como a mí, te tengo buenas noticias: en nuestra Casa para tu Fe Católica te esperan 20 horas intensas de formación en audio y video, especiales para este bendito Año de la Fe. Haz click en aquello que toque tu corazón:

  • Breve Curso sobre la Fe: un análisis y una serie de propuestas en torno al estado de la fe y de los creyentes a comienzos de este convulso siglo XXI. Predicado a las Dominicas de Lerma, España.
  • Hombres de Fe: mensajes francos, cargados de amor y lucidez, especialmente para seminaristas y sacerdotes. Predicado al clero de la Diócesis de Socorro y San Gil, en Colombia.
  • Ciencia de la Cruz: si hay algo que NO necesitamos es esa fe descafeinada, esa fe light que esquiva el tema central del Evangelio: la salvación por el amor extremo que llega hasta la Cruz. predicado en el Monasterio de San José y Santa Teresa, en la ciudad de Santa Fe, Argentina.

Hombres de Fe, 8 de 8, Entrar en la Nueva Evangelizacion

¡Hombres de Fe! – Curso de Formación Permanente para la Diócesis de Socorro y San Gil

Tema 8. Entrar en la Nueva Evangelización

  • 1. Un examen de conciencia. El problema de la infecundidad de la evangelización hoy, de la catequesis en los tiempos modernos, es un problema eclesiológico, que se refiere a la capacidad o a la incapacidad de la Iglesia de configurarse como real comunidad, como verdadera fraternidad, como un cuerpo y no como una máquina o una empresa.
  • 2. Una revisión de vida. La pregunta acerca de la transmisión de la fe… no debe orientar las respuestas en el sentido de la búsqueda de estrategias comunicativas eficaces y ni siquiera debe centrar la atención analíticamente en los destinatarios, por ejemplo los jóvenes, sino que debe ser formulada como una pregunta que se refiere al sujeto encargado de esta operación espiritual. Debe transformarse en una pregunta de la Iglesia sobre sí misma.
  • 3. Un deber. “Los hombres podrán salvarse por otros caminos, gracias a la misericordia de Dios, si nosotros no les anunciamos el Evangelio; pero ¿podremos nosotros salvarnos si por negligencia, por miedo, por vergüenza… o por ideas falsas omitimos anunciarlo?” (Pablo VI)
  • 4. Una nueva actitud. La nueva evangelización es una actitud, un estilo audaz. Es la capacidad de parte del cristianismo de saber leer y descifrar los nuevos escenarios, que en estas últimas décadas han surgido dentro de la historia humana, para habitarlos y transformarlos en lugares de testimonio y de anuncio del Evangelio.
  • 5. Un fruto natural. La Iglesia sabe que ella es el fruto visible de esa ininterrumpida obra de evangelización que el Espíritu guía a través de la historia, para que el pueblo de los redimidos dé testimonio de la memoria viviente del Dios de Jesucristo.
  • 6. Un anhelo infinito. Como afirmaba el Papa Juan Pablo II, “nueva evangelización” significa hacer de nuevo el tejido cristiano de la sociedad humana, haciendo nuevamente el tejido de las mismas comunidades cristianas.
  • 7. Una vida de oración. Sólo da a Cristo el que vive en Cristo. hay que ablandar el corazón para que él pueda escribir palabras de gracia en él.

Hombres de Fe, 7 de 8, Novedad de la Nueva Evangelizacion

¡Hombres de Fe! – Curso de Formación Permanente para la Diócesis de Socorro y San Gil

Tema 7. Novedad de la Nueva Evangelización

  • “Evangelizar constituye, en efecto, la dicha y vocación propia de la Iglesia, su identidad más profunda. Ella existe para evangelizar.” (Pablo VI)
  • Tres novedades para el Año de la Fe:
  • (1) Iglesia en Estado de Misión. Integración del kerigma en el conjunto de la vida de la Iglesia. “Cualquier hora puede ser la hora de Dios para algún hermano.” Recordar el ejemplo de Jesús y la Samaritana: a pesar del cansancio, el calor, la sed y los prejuicios, el corazón de esa mujer estaba en hora de cosecha para el anuncio de la Buena Nueva.
  • (2) La evangeliza hace a la Iglesia, y la Iglesia hace evangelización. El fruto propio de la evangelización es la constitución y fortalecimiento de la Iglesia; la Iglesia es fiel a sí misma en el acto de transmitir y afianzar la fe. Como el viento no existe si no comunica su fuerza y su frescura, así la Iglesia languidece tan pronto como deja de ofrecer el Evangelio. O la Iglesia es misionera o no es.
  • (3) La respuesta a los múltiples desafíos de una sociedad pluralista requiere de un pres´bitero y quiera y sepa ser “líder de líderes.” Lo suyo no es reemplazar al científico, al literato, al filósofo o al político, sino ser testigo de la fe con tal intensidad que de despierte en ellos y en todos la fascinación por la fe en cristo y en su Evangelio, de modo que todos puedan ser testigos de la gracia en sus lugares de vida y de trabajo.
  • Desde el Concilio Vaticano II hasta el presente, la nueva evangelización ha sido siempre presentada, cada vez con más claridad, como el instrumento gracias al cual es posible enfrentar a los desafíos de un mundo en acelerada transformación, y como el camino para vivir el don de ser congregados por el Espíritu Santo para realizar la experiencia del Dios, que es para nosotros Padre, dando testimonio y proclamando a todos la Buena Noticia –el Evangelio– de Jesucristo.
  • “Nueva evangelización” es sinónimo: de renovación espiritual de la vida de fe de las Iglesias locales, de puesta en marcha de caminos de discernimiento de los cambios que están afectando la vida cristiana en varios contextos culturales y sociales, de relectura de la memoria de la fe, de asunción de nuevas responsabilidades y energías en vista de una proclamación gozosa y contagiosa del Evangelio de Jesucristo.
  • Importante destacar el aspecto de historia y de memoria: sólo la fe valorada, de la que uno se sabe y siente agradecido, es luego transmitida con gozo y convicción.

Hombres de Fe, 6 de 8, Cientificismo y Laicismo

¡Hombres de Fe! – Curso de Formación Permanente para la Diócesis de Socorro y San Gil

Tema 6. Cientificismo y Laicismo

  • El espacio intelectual más importante en la Edad Media fue la Iglesia Católica. Nicolás Copérnico, Alberto Magno, Galileo Galilei e Isaac Newton, entre muchos otros, representan un conjunto amplio de mentes originales, de gran penetración en los misterios de la ciencia y las riquezas del mundo natural. Todos eran profundamente religiosos.
  • Con el nacimiento de la Royal Society en Inglaterra, con la consolidación de la masonería, y con el fondo oscuro de las guerras de religión en Europa (s. XVII) el panorama cambia. Una nueva clase social, ávida de poder y de independencia académica, quiere separarse de la tutela de la nobleza y del régimen eclesiástico.
  • Las antipatías extra-científicas que desierta una Iglesia poderosa y latifundista se trasvasan al ámbito del conocimiento, ahora visto como un instrumento de ascenso social y político. Es lo que sucede en la Ilustración (s. XVIII).
  • Para erigirse como “árbitros” por encima de las disputas religiosas, los “ilustrados” deifican una razón objetiva, aséptica, neutra, que sólo existe en sus discursos. La estrategia funciona por una combinación de factores políticos y la hábil manipulación de las masas.
  • Surgió así el librepensamiento. La respuesta de la Iglesia a menudo supuso aliarse con partidos y facciones políticas, quizás para protegerse. El efecto fue desastroso. Mucho más eficaz, en cambio, ha sido la expresión viva y comprometida de la solidaridad y la misericordia.
  • APÉNDICE sobre la presencia publica de la religión: (1) Nótese que cuando se trata de religión se quiere aplicar un criterio distinto al que se aplica en otras áreas de la sociedad: en todos los demás aspectos el parecer de la mayoría implica el descontento pero la obediencia de la minoría; en asunto de religión se quiere que aunque haya una mayoría cristiana, su parecer no será respetado. (2) Cuando se habla de que los signos religiosos de una confesión “ofenden” a los demás, se está extrapolando el término ofender. Una cosa es manifestar una diferencia y otra reprimir, insultar o burlarse de las creencias de otro. (3) Recuérdese que prohibir una expresión pública también es coartar un derecho. Alguien que pretendiera impedirme mostrar mi gratitud o afecto por mi madre con una foto, me estaría ofendiendo, ciertamente. Es preciso instruir a los fieles sobre sus derechos en materia de manifestación pública de la fe.

Hombres de Fe, 5 de 8, Estoicismo y Pelagianismo

¡Hombres de Fe! – Curso de Formación Permanente para la Diócesis de Socorro y San Gil

Tema 5. Estoicismo y Pelagianismo

  • La escuela estoica, una de las más vigorosas de las antiguas Grecia y Roma, dejó un amplio legado de enseñanzas y recomendaciones, muchas de las cuales fueron acogidas por los primeros cristianos como expresiones válidas de una vida recta.
  • Los principios que rigen el estoicismo se pueden sintetizar en tres: (1) Hay un “lógos,” una razón para todo lo que sucede; (2) Podemos y debemos aspirar a una vida serena, libre de emociones negativas; (3) La vida está siempre marcada por un destino y es inútil rebelarse contra él. * Uno ve que los principios (1) y (2) son fácilmente compatibles con la fe cristiana bajo los títulos de la providencia divina y del crecimiento en la gracia y la virtud.
  • Los métodos del estoicismo: (1) Visualización de qué sería lo peor que podría suceder; (2) Definición clara de lo controlable y lo no-controlable: esto implica el uso de metas internas más que externas. (3) Amor por lo natural, como medida de lo sano y principio de tranquilidad.
  • Los aspectos riesgosos del estoicismo son las nociones de destino, autonomía, resignación fatalista, moral de promedios.
  • Pelagio (siglo IV) fue un monje que creyó con enorme optimismo en el control de la voluntad sobre la vida humana. Según él, a través de la educación y la ascesis se puede llevar al ser humano a un grado de perfección sin límites, de modo que uno persona educada siempre hacia lo bueno ni siquiera tendría que ser bautizada.
  • Gran adversario de las ideas pelagianas fue San Agustín, que precisamente refinó bastante la enseñanza de la Iglesia sobre el pecado original a partir de las discusiones con este monje y sus sucesores. La postura del santo de Hipona le valió el título de “Doctor de la Gracia.”
  • En general, lo que hable de auto-redención, es decir, de una mejora esencial de la vida humana a través de las solas fuerzas humanas, puede verse como una reedición del pelagianismo, y por lo mismo, un oscurecimiento de la enseñanza centralísima de la gracia.