El amor es el que humaniza la sexualidad

“Amor: solamente él puede, de hecho, humanizar la sexualidad. Sin embargo, en nuestros días ese término se encuentra envuelto en una compleja confusión en su sentido y comprensión. Muchos lo han reducido apenas a la dimensión del placer y su especificidad erótica. Es cierto que esa palabra engloba también esa dimensión, con todo, el no se encierra apenas en tal expresión…”

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Segundo curso de Teología Moral familiar y sexual, 03: Vectores de la sexualidad humana

[Conferencias en el curso de Teología Moral familiar y sexual ofrecido en la Facultad de Teología de la Universidad Santo Tomás en el primer semestre de 2017.]

Vectores de la sexualidad humana

* La sexualidad se deshumaniza cuando se le considera un impulso ciego. Porque no es “un” solo impulso, sino una pluralidad de “vectores.” Y no es sólo “impulso” sino también freno, modulación, dirección. Y por ello mismo tampoco es simplísticamente “ciego.”

Segundo curso de Teología Moral familiar y sexual, 02: Syllabus y Primeros Fundamentos Bíblicos

[Conferencias en el curso de Teología Moral familiar y sexual ofrecido en la Facultad de Teología de la Universidad Santo Tomás en el primer semestre de 2017.]

Presentación del syllabus de la materia

  1. Fundamentos bíblicos
    1.1 La visión de la sexualidad en el entorno pagano
    1.2 Notas de la sexualidad en el Antiguo y el Nuevo testamento
  2. Dimensiones de la sexualidad humana
    2.1 Vectores: satisfacción, donación, procreación y diferenciación
    2.2 Moduladores: fisiológico, ético, político, trascendente
  3. La familia humana
    3.1 Síntesis de psicología evolutiva
    3.2 Virtudes domésticas (propias de la “domus”)
    3.3 Roles familiares
    3.4 Familia como plenitud y donación
  4. Ubicación de la castidad
    4.1 En las virtudes humanas: prudencia, justicia, fortaleza y templanza
    4.2 En las virtudes teologales: fe, esperanza, caridad
  5. Castidad y estados de vida
    5.1 Infancia y juventud
    5.2 Noviazgo
    5.3 Matrimonio
    5.4 Separación temporal
    5.5 Divorcio
    5.6 Viudez
    5.7 Celibato consagrado
  6. Cuestiones contemporáneas
    6.1 Sexo como entretenimiento: prostitución, pornografía, autoerotismo, relaciones furtivas
    6.2 Juego de roles: BDSM, “50 sombras,” parafilias…
    6.3 Instrumentalización: uso desde el poder económico; uso desde el poder político; uso desde la protesta
    6.4 Misticismo intramundano: idealización, sexo tántrico
  7. Ideología de género
    7.1 Concepto de “género”
    7.2 Complejidad del horizonte homosexual
    7.3 Absolutización del yo
    7.4 Incoherencias internas
    7.5 Agenda a mediano y largo plazo
  8. Perspectiva desde la revelación bíblica
    8.1 Intimidad, conocimiento y corazón
    8.2 Señorío de Dios
    8.3 Plenitud humana, familiar y social
    8.4 La urgencia del Reino

Primeros Fundamentos Bíblicos

* En general, el paganismo no termina de acertar con respecto a la sexualidad: o la idolatra como supremo bien o la desprecia convirtiéndola en un juguete vacío o un simple objeto de comercio; o ve en el sexo la puerta de lo sagrado o abomina del placer como obstáculo para una vida genuinamente humana.

* La revelación judeo-cristiana trae con respecto al sexo grandes novedades: no es lo máximo ni lo único pero tiene su gran importancia, de cara a la vida de familia, la procreación y la formación en la fidelidad. No es una realidad sacra sino secular, es decir: no remite por sí misma a lo sagrado; y sin embargo, vivida según el plan de Dios, apunta hacia el amor infinito de su gracia, y en este sentido puede llegar a ser parte integral de una realidad sacramental: el matrimonio.

Segundo curso de Teología Moral familiar y sexual, 01: Introducción

[Conferencias en el curso de Teología Moral familiar y sexual ofrecido en la Facultad de Teología de la Universidad Santo Tomás en el primer semestre de 2017.]

Comprender las dificultades para el estudio teológico de la sexualidad humana

* El contexto en que hemos de expresarnos es tenso y está duramente marcado por corrientes culturales, políticas y mediáticas que tienen sus propios intereses en cuanto al concepto de sexualidad que quieren en circulación. A ello se añade la Guerra Semántica que vacía de contenido las palabras o simplemente las evita a través de eufemismos del tipo: “suspensión voluntaria del embarazo” (= aborto). es difícil también argumentar en estos temas porque muchos sufrimos influencias próximas, es decir, casos reales de personas que nos interesan y a las que tendríamos que considerar quizás en grave condición moral–si es que la moral merece ser tomada en serio. Es distinto hablar del pecado del adulterio a tener un hijo que fracasó en su primer matrimonio y que ahora con gran esfuerzo está tratando de “rehacer su vida.” Finalmente, el contexto teológico es confuso, hoy más que nunca, por las divisiones que se presentan en la misma Iglesia.

* Un análisis atento nos permite reconocer la fuente de las dificultades epistemológicas: la colisión entre valores intensamente subjetivos, como el propio cuerpo, la afectividad y la identidad, y las consecuencias objetivas, como son los niños, las familias o los sistemas educativos.

* Como es lo propio en un estudio teológico hemos de remitirnos a las fuentes: Sagrada Escritura, Padres de la Iglesia, Magisterio, las grandes síntesis teológicas, y por supuesto, la capacidad argumentativa que, como hemso visto, no hay que darla simplemente por supuesta.