Hay desquites y desquites

Tres sentidos muy diversos de la palabra “desquite”: dos son perversos y uno es bueno y santo. Meditación a partir de la Primera Lectura del Domingo III de Adviento (Isaías 35, 1-6a. 10):

1) Desquite como venganza: el anhelo de venganza envenena el corazón y hace que se pierda tiempo valioso. Entre más años esté el veneno contigo más te dañará. Hacer justicia no es buscar la venganza. Esta es muy sutil y puede pasarnos diariamente.

2) desquite como simple compensación: desquitarse con la vida. Es una lógica que puede que fácilmente nos olvidemos del prójimo.¨Puede endurecer el corazón, va secando y helando al alma. Es arrogante.

3) desquite como fruto de la confianza en Dios y la certeza de su respuesta: Recibe de Dios como regalo lo que siempre quiso. Es mirar todo como regalo, y en estas circunstancias no se olvidara del prójimo. Es una oportunidad para que otros puedan avanzar. Desquite como una bendición o regalo.

Ejemplos claros de este tercer sentido de desquite : Jesus y Maria.

-Jesus: El desquite de Cristo no es venganza ni compensación, más bien dice: “yo estaré con ustedes hasta el último día” (Mateo 28:20) y se dice de El: “por eso Dios lo levanto sobre todo” (Filipenses 2:9)

-Maria: En el Magnificat está el abajamiento (kénosis) “El Señor a mirado la humillación de su esclava”(Lucas1:48) , y luego dice “porque el Señor hace obras grandes por mi” (Lucas1:49)

*Respecto al Evangelio (Mateo 11,2-11) :

Cuando dice que “A los pobres se les anuncia el evangelio y dichoso el que no se escandalice de mi “, quiere decir que dichoso el que entienda que el Camino de la venganza y la compensación (a pesar de ser atrayente) no es el correcto, solamente debe haber súplica, gratuidad, gratitud y el deseo de servir al prójimo.

Una buena parte de la teología de la liberación tomó este mensaje y lo convirtió en una consigna cercana al marxismo.

Hay que pedirle a Dios que seamos los del desquite Santo.