Signos de nuestro tiempo
Tema 1: Introducción General
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Resumen
* Los temas más populares para atraer gente a una reunión de tipo religioso, hoy en día, son invariablemente la sanación y la liberación. Y no cabe duda que siempre los necesitaremos porque todos necesitamos ser sanados de las consecuencias y liberados de las cadenas del pecado.
* Pero la vida cristiana no es solamente eso, ni consiste únicamente en encerrarse uno a mirarse y a preguntarse indefinidamente cómo se siente uno mismo. De hecho, ese mirarse demasiado uno a sí mismo puede llevar a los mismos males que vemos en la gente mundana, es decir: egoísmo, vanidad y narcicismo.
* En los evangelios, Cristo nos llama varias veces a atender los signos de los tiempos (Lucas 21), y nos reprocha que no seamos capaces de reconocerlos (Lucas 12,56). En el capítulo 4, versículo 35, de San Juan nos invita a “levantar la cabeza” para reconocer que la cosecha está madura–para evangelizar, se entiende.
* ¿Uno debe mirar hacia adentro y conocerse a sí mismo? Por supuesto. Tal mirada tiene tres objetivos y sólo tres: (1) Encontrar los propios pecados, para confesarlos; (2) Reconocer las propias heridas y fracturas, para entregarlas a Dios que, en su sabiduría, hará lo que más nos convenga; (3) Detectar y luego agradecer con alabanza la presencia de su Providencia en nuestra historia.
* Pero hay que “levantar la mirada” y ver lo que está sucediendo en torno nuestro. Por eso damos especial atención a algunos rasgos de esta época, a saber, el cientificismo, el relativismo, el pensamiento mágico, y esa extraña combinación de agresividad y tendencia depresiva.
ATENCIÓN: Escucha el retiro completo, o baja las notas de los cinco temas, en PDF.