En la Cruz he nacido

Al principio, la Cruz de Cristo parece ajena; parece la historia del fracaso de un hombre lejano en el tiempo y la distancia.

Luego sorprende el modo peculiar de su muerte: no tanto lo que le hicieron sino cómo reaccionó él.

Pero uno se cree bueno porque no hace cosas malas. La vida de Cristo muestra que sólo se es bueno cuando se hace el bien, y hacer el bien no es simplemente intercambiar unas cosas por otras, como cuando uno ama al que lo ama. Ser bueno es ser como el Padre del Cielo: es no necesitar excusas ni pagos para hacer el bien.

Entonces uno descubre que en realidad no es bueno, y también descubre que la suma del egoísmo y engaño de cada uno engendra una atmósfera de muerte que todos respiramos.

Con un paso más uno llega a sentir verdadero disgusto del propio corazón, y entonces tiene dos alternativas: la desesperación o la conversión. La conversión es un retorno al misterio de la Cruz, desde la contemplación de la verdad del pecado, de la verdad más pura de lo que es ser “humano” y desde la compasión de Dios. Y entonces la vida cambia, porque uno ha nacido de la Cruz.

7 respuestas a «En la Cruz he nacido»

  1. Padre Fray Nelson, desde la teologia se nos ha enseñado que la Cruz permite ver de un modo casi intuitivo que el mal resulta inevitable en un mundo finito y que Dios sólo podría eliminarlo a costa de destruir su propia creación, interfiriendo continuamente en ella y anulándola en su funcionamiento, por ejemplo si Dios hubiese librado a Jesús del patíbulo, hubiese tenido que suprimir la libertada de los que lo condenaron o suspender las leyes naturales para que los instrumentos no lo dañasen o las heridas no le causasen la muerte. La cruz hace visible en todo su horror el mal, el cual es inevitable en el mundo finito.

  2. Como principio general, estimado George,es bueno seguir este: aquel que pretende negar la resurrección corporal de cristo para hacer más comprensible el evangelio ha renunciado a la fe católica. No siempre lo más reciente es más profundo ni mejor, y hoy asistimos a una abundancia de teólogos que creen hacerse más comprensibles cuanto más racionalistas, que no racionales.

  3. Así escribe Torres Queiruga en Repensar la Resurrección” : “Se ha producido un cambio importante, en el sentido de que son ya muchos los autores que no hacen depender la fe en la resurrección de la postura que se adopte al respecto: se reconoce que pueden creer en ella tanto los que piensan que el sepulcro ha quedado vacío como los que opinan lo contrario. La opción por tanto depende, en definitiva, del marco teológico en que se encuadra. Y la verdad es que, superadas las adherencias imaginativas que representan al Resucitado como vuelto a una figura (más o menos) terrena, y tomado en toda su seriedad el carácter trascendente de la resurrección, la permanencia o no del cadáver pierde su relevancia…” ESA NO ES LA FE CATOLICA.

  4. Gracias Padre, me gustaria que me orientara con obras teologicas que me den seguridad en lo que estoy aprendiendo y que no me despisten de mi ansiedad por conocer mas de nuestro señor Jesucristo. amo a mi iglesia católica y sigo muy de cerca las enseñanzas de nuestro Santo Padre. que opina de la páginahttp://servicioskoinonia.org/biblico/calendario/index.php en donde se sugiere esta lectura. gracias por su orientación se he generado un poco de angustia en mi interior por esta lectura de Torres Queiuga

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