249. Más vale morir sin hijos que tener hijos impíos. (Sir 16,3)
250. Honra a tu padre de todo corazón y no olvides los dolores de tu madre; recuerda que ellos te engendraron, ¿qué les darás por lo que te dieron? (Sir 7,27-28)
251. Dejad que los niños se acerquen a mí; no se lo impidáis porque el reino de Dios pertenece a los que son como ellos. Os lo aseguro, quien no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él. (Mc 10,14-16)
252. El que peca es el que morirá; el hijo no cargará con la culpa del padre, el padre no cargará con la culpa del hijo; sobre el justo recaerá su justicia, sobre el malvado recaerá su maldad. (Ez 18,20)