Ayer tuve una buena entrevista con Mark Morelli, un profesor de filosofía de la Loyola Marymount University de Los Angeles. Estuvimos conversando sobre el tema de mi tesis, en lo que tiene que ver con B. Lonergan. Desde ya me declaro agradecido por la generosidad de este hombre que me ha regalado de su tiempo y ha tenido la fineza de incluso invitarme a almorzar.
El kerigma en televisión
Temprano en la mañana, un buen descanso, y algo de televisión. Ha sido un ejercicio maravilloso para seguir avanzando en el idioma inglés. También un modo de acercarse a las bondades y límites de esta cultura.
Por ejemplo, hoy quiero destacar que los Estados Unidos son indudablemente el país de los tele-evangelistas. No menos de cuatro programas diarios en la televisión pública, y un número aún mayor por las ondas de la radio presentan sin cesar el mensaje del Evangelio con variaciones relativamente pequeñas, por lo menos en la superficie.
La síntesis es como sigue.
Día de evangelización
Creo que ya dije antes que estamos predicando cinco personas: dos sacerdotes y tres laicos. El otro sacerdote es el P. Ángel Guzmán, de la naciente comunidad de los Predicadores de Cristo y María. Los laicos son Raúl y Gaby, el matrimonio que dirige Juventud Renovada, y un señor casado, de nombre Oscar Cuevas.
Por sugerencia del P. Ángel, que ya sabía de Oscar antes que yo, he escuchado el testimonio de conversión de este predicador laico que ha recorrido ya miles de kilómetros dentro y fuera de los EEUU contando a la gente su mensaje sobre el amor de Dios. Es un católico convencido, enamorado de la Eucaristía y profundamente sensible a las necesidades de los pobres.
Así como ayer tuvimos la adoración eucarística, hoy tuvimos nuestra Misa Dominical. Me correspondió predicar. Espero poder organizar pronto lo de las transferencias de archivos a Internet, para poder compartir algo de las predicaciones de estos días.
Convención de parejas
Un buen día, el primero de nuestro Encuentro de Parejas, que aquí llaman Convención de Parejas. Somos dos sacerdotes y tres laicos en la predicación.
Me gusta que los cantos del coro son más sencillos y mejor conocidos por la gente que ha venido. De ese modo se da una verdadera participación. La verdad, le he tomado como alergia a eso que a veces se da en encuentros católicos, cuando hay un coro deseoso de mostrar sus últimas producciones musicales y una asamblea que en vano intenta repetir palabras y pedazos de frases de las canciones.
La cultura del automóvil
La noche fue tranquila. Los amigos de Juventud Renovada me han hospedado en un hotel en Ontario. Este hotel pertenece a una cadena que se llama Ramada. La habitación es confortable, pero se nota que es un lugar de paso. Sin un automóvil no hay manera de movilizarse aquí. El transporte público casi no existe y todo queda a distancias muy grandes para ir a pie.
CUARTA CARTA A KEJARITOMENE
Amigos míos,
Hoy recuerdo que la primera carta a ustedes la escribí desde un aeropuerto; hoy les escribo en pleno vuelo.
Hace unos minutos hemos sobrevolado la ciudad de Milwaukee, luego cruzamos el río Mississippi y ahora mismo estamos sobre el estado de Iowa, a casi 11 kilómetros de altura. Este avión ofrece a cada pasajero los datos del vuelo; por eso sé que vamos a 10.668 metros sobre el nivel del mar, y que a esta hora y esta altura la temperatura afuera de la nave es de menos 55 °C. Viajamos a 751 Km./h, pero aún a esa velocidad faltan unas tres horas para alcanzar nuestro destino, la ciudad de Los Angeles. El cielo está despejado. Como vamos en dirección Este – Oeste, contraria a la rotación de la Tierra, el efecto es el de un atardecer prolongadísimo. Y aunque el sol incendia de rojo algunas nubes en la distancia, el paisaje en tierra es de un irremediable color blanco: este invierno se ha dejado sentir con toda su nieve en el Nordeste y el Norte de los Estados Unidos, de modo que los campos se ven solemnes y adustos. Es inevitable pensar en las familias que a estas horas disfrutan o padecen tanta nieve. Quiera Dios que tanto frío y tanta blancura no sean motivo de grave enfermedad o muerte para sus hijos.
Primer Capítulo
Anoche tuve mi primer capítulo conventual. El estilo, sobrio y directo, me sigue gustando. Toda la reunión –en la que también había que tomar algunas decisiones– tomó menos de 40 min., tiempo que incluye la lectura de un par de actas. Eso me encanta de esta claridad anglosajona.
Pienso con la bondad de Dios seguir este diario que me ha servido como camino de meditación en voz alta. Mas debido al viaje de misión a Los Angeles seguramente no podré publicar cada entrada en su día, sino que tocará después.
A quienes esto lean, les encarezco oraciones por mí. Gracias.
Menos por Menos da Más
El primer misterio matemático grande que yo recuerde haber aprendido en el colegio fue aquella famosa ley de los signos: “al multiplicar, signos iguales, dan más; signos distintos, dan menos.” Según eso, “más por más, da más“, pero también, “menos por menos, da más.“
No vamos aquí a discutir las bases o las aplicaciones de esta ley, sino a presentar una aplicación muy particular (y analógica) de ella. Quiero referirme a Irlanda.
La premisa básica es: las condiciones de geografía de una isla grande generan un modo particular de sicología, por darle un nombre, que no se equipara a lo que sucede en un Continente o en una isla pequeña.
El tamaño importa porque una extensión de tierra habitable, que sea continua y a la vez muy grande, presentará probablemente variaciones culturales lo suficientemente pronunciadas como para disminuir la velocidad con que se hacen públicamente aceptables y aceptadas unas ciertas ideas o costumbres.
TU VIDA ESPIRITUAL
Una Guía para Conocerte y para Darte a Conocer
Este texto puede ayudar en los procesos de dirección espiritual seria. Lo ofrezco con ese propósito. – Fr. Nelson Medina
0. INDICACIONES
0.1 Necesitarás tiempo –probablemente algunas horas– para responder a conciencia todas estas preguntas. Busca un ambiente de soledad, oración y reúne lo mejor de tu sinceridad. Escribe en presencia de Dios. Si sientes cansancio, es preferible reposar un poco o dar una vuelta antes de continuar.
0.2 Ten en cuenta que hay preguntas relacionadas con el presente, con el pasado y con el futuro. Procura que tus respuestas sean completas pero sin salirte de lo preguntado ni decir en la parte del presente lo que pertenece al pasado o así sucesivamente.
0.3 No son necesarias descripciones detalladas ni aspectos anecdóticos. El mejor criterio en este tipo de cuestionario es lalmara a cada cosa por su nombre. No temas demorarte hasta dar con la palabra precisa o la expresión que mejor refleja tu verdad interior.
0.4 Utiliza el borrador o el �delete� de tu computador cuando veas que es necesario. No temas reeditar las cosas. Este NO es un ejercicio de espontaneidad ni va a ser más verdadero lo que primero te llegue a la mente o al corazón.
0.5 Una vez escrito todo, repásalo despacio y corrige especialmente lo que esté en desorden: lo del �pasado� en el �presente�, por ejemplo. ¡Adelante!
María y la Eucaristía
La carne de Cristo era de María en cuanto a su origen. Ella podría decir, pues, como los sacerdotes: “Esto es mi Cuerpo…“, pero no es a eso a lo que se refiere el mandato del Señor cuando dice en la Ultima Cena: “haced esto en conmemoración mía“, como se ve del sentido que tiene su doble entrega: eucarística, en la Cena; sacrificial, en la Cruz.
María, sin embargo, no está ausente del misterio de la Eucaristía. De algún modo, a través de la donación última y radical de nuestro Bendito Salvador alcanza su límite de cielo el sí que pronunciara la Virgen de Nazareth. Y así, es algo de Ella, algo de su intimidad purísima y bellísima, lo que comulgamos, por gracia de Dios…
Pulso de gigantes
Mi país, Colombia, recibió desde comienzos del siglo XVI una imborrable influencia de España. A finales del siglo XVIII se propagaron con fuerza los ideales libertarios de matriz masona, y así se dio la emancipación de la corona española, a comienzos del siglo XIX. Los burgueses ilustrados que asumieron el gobierno tenían como referencia primera sus lecturas de los grandes de la Ilustración francesa. Mientras en Colombia ellos todavía discutían cómo gobernar, si con un modelo federal o con uno centralista, el poderío norteamericano se afianzaba. La secesión de la actual Panamá vino a mostrar, al mismo tiempo, el alcance de la garra del águila estadinense y la brumosa identidad de la Colombia que sin apercibirse ya tenía que saludar el siglo XX.
Foros de diálogo
Por estos días he vuelto a un apostolado que tenía como descuidado: los foros de discusión teológica en Internet.
Y como un aporte en un diálogo intenso sobre la controversia de la ordenación de mujeres escribí esto.
Ahí lo comparto.
Extraterrestres
Las noticias de los últimos días, que incluyen las declaraciones del presidente George Bush, son un gran mensaje de apoyo a la investigación espacial, sobre todo en lo que atañe a su dimensión más teórica, con lo que quiero decir: más relacionada con las grandes preguntas que no producen riqueza o beneficios inmediatos, como aquello de la vida en otros planetas.
¿De qué tamaño es la Tierra?
La pregunta llevaría hoy a cualquier estudiante de secundaria a revisar una enciclopedia o hacer una consulta rápida en Google. La respuesta típica: algo más de 12.000 km de diámetro. Esa es la Tierra, según la ciencia. ¿Qué diría la Biblia?
Pensamiento no-esencialista
Ya hemos visto que la Biblia desconoce la noción de planeta, así como desconoce muchas –la mayor parte– de las nociones científicas. La Biblia no descalifica una hipótesis levógira sobre las enzimas hepáticas entre otras cosas porque no tiene ninguna teoría enzimática en ninguno de sus versículos. Del mismo modo, no entra en su campo de afirmaciones o negaciones si lo que ella llama “tierra” es o no es un planeta. De hecho hay señales claras de que lo que la Biblia llama “Tierra” o “mundo” en ningún caso corresponde con lo que la ciencia posterior a Galileo llamaría “planeta”. Y eso es muy importante tenerlo en cuenta para el diálogo fructuoso con los astrofísicos de nuestro propio tiempo.
¿Hay planetas en la Biblia? ¿Y también enzimas?
Hay un gran supuesto que subyace a las críticas de la astrofísica moderna a la religión. Ese supuesto es que cuando la Biblia habla de “la tierra” se refiere a este planeta, el tercero en la lista del Sistema Solar, después de Mercurio y Venus, y antes de Marte y el gigantón, Júpiter.
Continuar leyendo “¿Hay planetas en la Biblia? ¿Y también enzimas?”