Un Ciego Con Luz

Había una vez, hace cientos de años, en una ciudad de Oriente, un hombre que una noche caminaba por las oscuras calles llevando una lámpara de aceite encendida. La ciudad era muy oscura en las noches sin luna, como aquella. En determinado momento, se encuentra con un amigo. El amigo lo mira, y de pronto lo reconoce. Continuar leyendo “Un Ciego Con Luz”

Carta De Charles Dickens A Su Hijo

Londres , Octubre de 1868.

Querido hijo mío:Te escribo hoy esta carta porque tu partida me preocupa mucho, y porque quiero que lleves contigo unas palabras mías de despedida, para que pienses en ellas de cuando en cuando, en los momentos de tranquilidad. No necesito decirte cuánto te quiero, y que siento mucho, lo siento en el alma separarme de ti. Pero la mitad de esta vida está hecha de separaciones, y son dolores que hay que sobrellevar; además, la vida con sus pruebas y peligros te enseñará más que cualquier estudio o tarea que pudieras realizar.

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Bienes Invisibles

Tomás es un chico de siete años que vive con su mamá, una pobre costurera, en su solo cuarto, de una pequeña ciudad del norte de Escocia. La víspera de Navidad, en su cama, el chico espera, ansioso, la venida de Papá Noel. Según la costumbre de su país, ha colocado en la chimenea una gran media de lana, esperando encontrarla, a la mañana siguiente, llena de regalos. Continuar leyendo “Bienes Invisibles”

Aliento!

Cuando las preocupaciones te agobien y sientas que tu cuerpo ya no puede más, no te encierres en una idea solamente: desahógate, y piensa que en ese momento estás viviendo un instante de tu larga vida.

Y todos los problemas son circunstanciales y las circunstancias son igual que las olas: vienen y se van. La felicidad espiritual no consiste en borrar de la mente las preocupaciones ni olvidarlas; la tranquilidad espiritual consiste en la búsqueda constante de soluciones para nuestros problemas.

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No Te Detengas…

No te detengas en lo malo que has hecho; camina en lo bueno que puedes hacer.

No te culpes por lo que hiciste, más bien decídete a cambiar.

No te mires con tus ojos, contémplate con la mirada de Dios.

No pienses en lo largo que es el camino de tu transformación,

sino en cada paso que puedes dar para ser lo que Dios quiere que seas.

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¡No Te Metas En Mi Vida!

Esta frase caló hondamente en mí, tanto, que frecuentemente la recuerdo y comento en mis conferencias con Padres he hijos. Si en vez de sacerdote, hubiese optado por ser padre de familia, qué le respondería a esa pregunta inquisitiva de mi hijo? Esta podría ser mi respuesta:

HIJO, UN MOMENTO, NO SOY YO EL QUE ME METO EN TU VIDA, TU TE HAS METIDO A LA MÍA!!!

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Hermano, No Te Rindas

No te rindas, aún estás a tiempo de abrazar la vida y comenzar de nuevo, aceptar tu sombra, liberar el lastre y retomar el vuelo.

No te rindas, que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, abrir las esclusas, destrabar el tiempo, correr los escombros y destapar el cielo.

No te rindas, por favor, no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el sol se ponga y se acalle el viento, aún hay fuego en tu alma, aún hay vida en tu seno.

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Para Ser Feliz

HUMILDAD. Pide cuando te falta, pregunta cuando no sabes, despójate de la pretensión de ser el más listo, el más rápido. Despójate de la pretensión de ser perfecto y encontrar perfectos a los demás.

INCERTIDUMBRE. Bendice la oscuridad del futuro porque es muy probable que si vieras desde hoy todos las adversidades que pueden llegar a sucederte, quedarías paralizado. Cuando llegues a cada río, si te lo propones, encontrarás cómo cruzarlo.

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