Sólo podemos dar a los demás lo que tenemos dentro de nosotros.
Asume el compromiso personal de hacer lo que quieras y de querer lo que hagas. ¡Hoy!
En cada uno de nosotros hay sitio para el amor. Sólo debemos dejarlo entrar.
Nada es de tu propiedad, y cuanto antes te des cuenta de ello, más estarás en condiciones de conectar con el portentoso principio de la abundancia.