“Una maestra de escuela de figura robusta, defensora de los indígenas, escritora y mística que llegó a enfrentarse con el mismo demonio -según lo narra en su autobiografía- será la primera santa colombiana: Laura de Jesús Montoya Upegui, una monja fallecida en 1949…”
Minoridad: (1) Que Cristo sea cada vez mayor en mí; (2) Que yo esté al servicio de mis hermanos, y sea así parte de la solución: (3) Que de todos aprenda.
Espiritualidad de la Vida Apostólica. Retiro Espiritual con las Dominicas de la Inmaculada, en Cuenca (Ecuador).
Tema 1 de 12: Introducción.
* Religiosos y religiosas de vida apostólica se ven enfrentados a diversos desafíos que tienen un efecto centrífugo. Puede echarse de menos un núcleo que de unidad, coherencia y paz a tantas actividades y exigencias.
* Por eso nos preguntamos: ¿Qué espiritualidad puede acoger y unificar los diversos elementos de una vida apostólica intensa como suele ser la nuestra?
* Hay que destacar que entre los “lugares” en que se desenvuelve nuestra vida hay algunos que cuentan con indicadores sumamente claros y verificables, incluso en términos de cantidades. Uno puede saber con facilidad si se ha descuadrado en el presupuesto; es más difícil responder si uno está creciendo en la oración o en la vida fraterna.
* Lo cierto es que tendemos a reforzar la atención hacia lo evaluable y cuantificable, con lo cual nuestra vida se vuelve la de funcionarios que no son gente mala pero tampoco apasionada por Cristo.
* El propósito del retiro es sacudir de nosotros la capa de escepticismo o dureza que nos envuelve y entrar en coloquio de corazón con el novicio o novicia que fuimos.
“La enfermedad sirve a Audrey, en su mundo infantil, para reforzar su sueño más acariciado: llegar a ser una santa carmelita. Incrementa, además, sus oraciones por los demás…”
“Las visiones místicas de Hildegarda son ricas en contenidos teológicos. Hacen referencia a los principales acontecimientos de la historia de la salvación, y usan un lenguaje principalmente poético y simbólico…”
Predicación a los servidores y la comunidad entera de Juventud Renovada en el Espíritu Santo, en Marzo de 2012. Son 21 pasos. Esta segunda de dos partes contiene:
10. Docilidad del nuevo comienzo
11. Hambre de la Palabra y del Espíritu
12. Conciencia de la fraternidad que brota de la paternidad
13. Conciencia de los carismas propios y ajenos
14. Amanecer de la Iglesia como Proyecto de Dios
15. Afán de la gloria de Dios
16. Experiencia de la práctica de la misericordia y del perdón
17. Conciencia de las limitaciones de la propia comunidad local y del propio tiempo
18. Dolor por el pecado del mundo y las heridas de la Iglesia
19. Deseo de gastarse por Dios
20. Iniciativas nuevas de amor y servicio
21. Conciencia del bien de la Cruz
Predicación a los servidores y la comunidad entera de Juventud Renovada en el Espíritu Santo, en Marzo de 2012. Son 21 pasos. Esta primera de dos partes contiene:
1. Fastidio del pecado
2. Conciencia de ser pecador
3. Esperanza de alivio en Dios
4. Conciencia de la ofensa hacia Dios
5. Fractura de la soberbia
6. Aceptación interior de las consecuencias
7. Confesión exterior y fractura de la vanidad
8. Confianza en el perdón
9. Agradecimiento y alabanza
No son dos madres, una de la cabeza y otra del cuerpo del bebé. Así también en Cristo: la misma Madre de Cristo cabeza es Madre del Cuerpo de Cristo, y quiere formar a Cristo en nosotros, de modo que seamos santos, imágenes de la gloria del Resucitado.
En la dura polémica con los falsos apóstoles, Pablo se ve obligado a precisar muy bien qué es ser un verdadero discípulo. [Una homilía para la Fiesta de Todos los Santos de la Orden Dominicana.]
332. Únicamente, olvidando lo que queda atrás, me esfuerzo por lo que hay por delante y corro hacia la meta, hacia el premio al cual me llamó Dios desde arriba por medio de Cristo Jesús. (Flp 3,13-14)
333. Entre el atrio y el altar lloren los sacerdotes, digan los ministros del Señor: Perdona, Señor, a tu pueblo, no entregues tu heredad al oprobio, no la sometan los gentiles, no se diga entre los pueblos ¿Donde esta su Dios? (Jl 2, 17)