Lo de orar por el Papa no es pura cortesía de lenguaje ni frase repetida

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Ya todos tenemos claro que el Papa–este Papa y cada uno de los Papas–es un ser humano con talentos y fragilidad, con carismas únicos y riesgos inéditos. Por supuesto, no es distinto el caso de nuestro Papa Francisco: un hombre valiente y profético en tantas cosas pero tan necesitado de oración como ninguno.

Ya hemos visto con claridad que sus palabras serán interpretadas siempre del peor modo posible. Dice el Papa que los divorciados vueltos a casar no están EXCOMULGADOS y los medios de comunicación hacen coro para decir que el Papa dijo que SÍ PODÍAN COMULGAR. Son dos cosas totalmente distintas pero como se trata del Papa y como se trata de imponer el nuevo orden mundial, que es un nuevo desorden, ahí está un nuevo ataque.

DEBEMOS orar más y con mayor profundidad por el Papa para que goce más del don de la claridad, sobre todo en sus enseñanzas sobre la familia, y orar también para DEFENDERLO porque el enemigo malo, el demonio, padre de las peores confusiones, lucha contra el Sucesor de Pedro tratando de hacer el mayor daño posible a la Iglesia de Cristo.

Orar, orar, orar.

Perfil de un santo: Domingo de Guzmán

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Jordán de Sajonia fue un fraile de la primera generación dominicana. Entró en la Orden fascinado por la personalidad de Domingo. Y se convirtió en el primer sucesor del propio Domingo en el gobierno de al Orden, cuando era aún muy joven y apenas llevaba unos años de Dominico. Pero no murió sin dejar testimonio vivo de aquella personalidad de Domingo que tanto le había fascinado. Jordán nos transmite un retrato espiritual de Domingo lleno de afecto y sencillez. Es obligado comenzar cualquier meditación sobre Domingo con este retrato espiritual.

Dice así:

“Por lo demás, lo que es de mayor esplendor y magnificencia que los milagros, (Domingo) estaba adornado de costumbres tan limpias, dominado por tal ímpetu en el fervor divino, que revelaban plenamente en él un vaso de honor y gracia, un vaso guarnecido de toda suerte de piedras preciosas.

Su ecuanimidad era inalterable, a no ser cuando se turbaba por la compasión o la misericordia hacia el prójimo. Y, como el corazón alegre alegra el semblante, la hilaridad y benignidad del suyo transparentaban la placidez y equilibrio del hombre interior.

Tal constancia mostraba en aquellas cosas que entendía ser del agrado divino, que, una vez deliberada y dada una orden, apenas se conocerá un caso en que la retractase.

Y como la alegría brillase siempre en su cara, fiel testimonio de su buena conciencia, según se ha dicho, la luz de su semblante, sin embargo, no se proyectaba sobre la tierra.

Con ella se atraía fácilmente el afecto de todos. Cuantos le miraban quedaban de él prendados. Dondequiera que se hallase, fuese de viaje con sus compañeros, en las casas con sus hospederos y sus familiares, entre los magnates, los príncipes y los prelados, siempre tenía palabras de edificación y abundaba en ejemplos, con los cuales inclinaba los ánimos de los oyentes al amor de Cristo y al desprecio del mundo. En todas partes, sus palabras y sus obras revelaban al varón evangélico.

Durante el día nadie más accesible y afable que él en su trato con los frailes y los acompañantes.

Por la noche nadie más asiduo a las vigilias y a la oración. En las Vísperas demoraba el llanto, y en los Maitines, la alegría. Dedicaba el día al prójimo; la noche, a Dios; sabiendo que en el día manda el Señor su misericordia, y en la noche, su cántico. Lloraba abundantemente con mucha frecuencia, siendo las lágrimas su pan día y noche; de día principalmente cuando celebraba la Santa Misa, y de noche, cuando se entregaba más que nadie a sus incansables vigilias.

Era costumbre tan arraigada en él la de pernoctar en la iglesia, que parece haber tenido muy rara vez lecho fijo para descansar. Pasaba, pues, la noche en oración, perseverando en las vigilias todo el tiempo que podía resistir su frágil cuerpo. Y cuando venía el desfallecimiento y el espíritu cansado reclamaba el sueño, entonces descansaba un poco, reclinando la cabeza delante del altar, o en algún otro sitio, o sobre una piedra, como el patriarca Jacob, para volver de nuevo al fervor del espíritu en la oración.

Todos los hombres cabían en la inmensa caridad de su corazón y, amándolos a todos, de todos era amado.

Consideraba ser un deber suyo alegrarse con los que se alegran y llorar con los que lloran, y, llevado de su piedad, se dedicaba al cuidado de los pobres y desgraciados.

Otra cosa le hacía también amabilísimo a todos: que, procediendo siempre por la vía de la sencillez, ni en sus palabras ni en sus obras se observaba el menor vestigio de ficción o doblez.

Verdadero amigo de la pobreza, usaba siempre vestidos viles.

En la comida y en la bebida era templadísimo: rechazaba las viandas delicadas; gustoso se contentaba con un solo plato y usaba del vino aguándolo de tal forma y tenía tal imperio sobre su carne, que atendía a las necesidades corporales sin embotar la sutileza de su espíritu.

¿Quién será capaz de imitar en todo la virtud de este hombre? Podemos admirarla, y a su vista considerar la desdicha de nuestros días: poder lo que él pudo, fruto es no ya de su virtud humana, sino de una gracia singular de Dios que podrá reproducir en algún otro esa cumbre acabada de perfección. Mas, para tal empresa, ¿quién será idóneo?

Imitemos, hermanos, en la medida de nuestras fuerzas, las huellas paternas, dando al mismo tiempo gracias al Redentor, que concedió tal caudillo a sus siervos por él regenerados, y pidamos al Padre de las misericordias que, regidos por aquel espíritu que mueve a los hijos de Dios, caminando por las sendas de nuestros padres, merezcamos llegar sin descarríos a la misma meta de la perpetua felicidad y sempiterna bienaventuranza en la que nuestro Padre felizmente entró. Amén” (B. Jordán de Sajonia).

Otros biógrafos reproducen casi literalmente este retrato espiritual de Domingo. Es la fisonomía del Padre presente en el recuerdo de los primeros frailes dominicos y transmitida por quienes habían sido testigos oculares del itinerario humano, evangélico y apostólico de Domingo.

Es falsa la versión para televisión de la vida de Santa Laura Montoya

Lo que temíamos cuando se anunció que CARACOL, una cadena comercial colombiana de medios de comunicación, iba a presentar la vida de Santa Laura Montoya por televisión, resultó lamentablemente cierto. CARACOL deforma los hechos y presenta falsedades históricas sobre la santa, seguramente para lograr más popularidad introduciendo ficciones de relaciones amorosas y otros hechos inventados.

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Acercarse al pensamiento de Platón, 1 de 6: ¿Por qué filosofar?

[Curso especial ofrecido en el Convento de Santo Domingo de Bogotá, en Junio de 2015.]

Tema 1 de 6: ¿Por qué filosofar?

* ¿Por qué filosofar? La filosofía en cuanto cuestionamiento obstinado sobre el por qué y el sentido de las cosas es inevitable ya que es connatural al ser humano. Por eso, cuanto menos filosofemos, más útiles somos a los intereses de los poderes que ya saben que hacer con nosotros porque el espacio de pensamiento siempre es un espacio de libertad y cuando se quiere dominar a la gente, una consigna es que no piense.

* Es importante distinguir entre la ciencia y la filosofía. La ciencia se ocupa de constatar el “ser”, no es parte de su oficio el “deber ser”. La sola acumulación de datos científicos no da por sí misma sabiduría.

* Hay un modo de ver la inteligencia, muy en boga hoy en día, que propone que la inteligencia humana es homogénea con la inteligencia animal; grave error que deja perder lo propio de la inteligencia humana.

* Por contraste, un filósofo como Xavier Zubiri distingue dos formalidades: formalidad estimúlica, centrada en estímulos (en el “para mí”), propia del comportamiento animal y la formalidad de realidad, propia del comportamiento humano, que se centra en las preguntas; facultad que permite interesarse por el “en sí” de las cosas, y que así se preocupa por el “ser” y la “verdad.”

Cinco tuits por la visita del #PapaFrancisco

  • Para millones de personas sólo hay un líder a nivel mundial que, cuando los visita, los trata con respeto y afecto. Gracias, #PapaFrancisco!
  • Gracias, #PapaFrancisco! La justicia no puede ser el único tema pero tampoco puede dejar de ser tema en un mundo que maltrata millones.
  • Confío en el fruto de vida y de fe que traerá la visita del #PapaFrancisco. Ya lo vi con mis ojos en los días de preparación en #Paraguay!
  • De algo estoy seguro: #PapaFrancisco no viene a Sur América a visitar a los grandes dignatarios sino a los más pobres y siempre olvidados.
  • Si el Papa se encerrara en el Vaticano no habría cansancio ni riesgo de regalos absurdos ¡pero cuánto perderíamos! ¡Gracias #PapaFrancisco!

Texto primero publicado en mi cuenta de Twitter. Soy consciente que en cuanto a la visita del Papa Francisco a Sur América hay opiniones diversas. Mi deseo, sin embargo, es que cada uno, desde lo que ve, quiera amar y servir a la única Iglesia de Cristo.

El Papa explicado a los niños

Buenas tardes desde Houston. Donde puedo informarme para poder explicarle a mi hija de 7 años esta pregunta que me hizo: ¿quien es el Papa Francisco? Se me hizo difícil por que no encuentro una forma simple de explicarle. Muchas gracias Bendiciones! — LSL

“Jesucristo eligió doce apóstoles. Uno de ellos, llamado Pedro, recibió un encargo muy especial del mismo Jesucristo: Pedro tenía la misión de ayudar con su oración y con sus palabras a sostener la fe de los demás apóstoles, de modo que nunca se fueran a apartar de las palabras y todas las enseñanzas del Señor. Por supuesto, Pedro no podía durar para siempre, y por eso el encargo que él recibió tenía que quedarle después a otro que hiciera esa tarea, y luego, de ese a otro, y pasando el tiempo, de ese, a otro. Así vemos que hay una serie de hombres que han sido elegidos de varios modos pero que tienen el mismo de encargo de Pedro de ayudar a todos los demás sucesores de los apóstoles a conservar bien la fe. Nosotros llamamos “Papas” a esos sucesores de Pedro. Ya ha habido casi 300 de ellos, y el actual sucesor de San Pedro es el papa Francisco.”