Congreso de la Fe, 4 de 4, Creer en todo tiempo y saber celebrar nuestra fe

[Congreso en Poza Rica, México, en Marzo de 2013.]

Tema 4 de 4: Creer en todo tiempo y saber celebrar nuestra fe

* La fe es necesaria en todo tiempo. En el momento malo para evitar la desesperación; en el momento bueno para evitar la soberbia.

* La fe es necesaria en todos los oficios y profesiones, porque sin ella se pierde la perspectiva sobre quién es el ser humano, de modo que sin la verdad de Dios se disuelve la verdad del hombre hecho a imagen de Dios.

* Puesto que la fe es don; puesto que es regalo de tantísimo valor e importancia, es justo agradecerla y celebrarla.

* Para celebrar la fe, los cristianos seguimos el esquema general que viene del pueblo judío. Es un esquema basado en la secuencia temporal pasado – presente – futuro.

* Celebramos la fe en primer lugar mirando al pasado y haciendo MEMORIA de las maravillas del Señor. Esta fase la podemos llamar “anámnesis.”

* Celebramos luego la fe reconociendo en el hoy la PRESENCIA actuante y transformante de Dios por su Espíritu, cuya venida imploramos en la “epíclesis.”

* Y mirando hacia el futuro, confiamos en la PROMESA del señor, y aguardamos su “parusía.”

* Al celebrar la fe nos disponemos también para compartirla, de modo que todo discípulo está llamado a ser un misionero.

Congreso de la Fe, 3 de 4, Enemigos falsos y verdaderos de la fe

[Congreso en Poza Rica, México, en Marzo de 2013.]

Tema 3 de 4: Enemigos falsos y verdaderos de la fe

* La fe es un don que no podemos construir, pero sí está en nosotros, por lo menos, hasta un cierto punto, el cuidar, cultivar y defender ese don.

* Hay conflictos ficticios que oscurecen la naturaleza de la fe y del acto de creer. Son tres principalmente:

(1) La razón y la fe. No son opuestas: tienen su origen en Dios y buscan la verdad. El Nuevo Testamento no nos pide dejar de pensar cuando nos invita a creer. De hecho, la razón ayuda a clarificar, exponer y defender la fe frente a las objeciones contrarias. Razón y fe no se oponen pero racionalismo y fideísmo, sí crean incompatibilidades insolubles. Pero el racionalismo no es racional, ni el fideísmo es genuina fe.

(2) La ciencia y la fe. No son opuestas: la ciencia establece hechos y datos; descubre patrones y suele expresarse en leyes matemáticas, pero cuál sea el sentido de esas leyes, y cuál su origen último, trasciende a la ciencia. No es la ciencia sino el cientificismo lo que se opone a la fe.

(3) El dolor y la fe. No son opuestos, pues, ¿qué se resuelve con no creer? Además, Cristo nunca anunció una vida sin dificultades, sino que dijo que había que tomar la cruz cada día.

* Hay también conflictos reales; tres principalmente:

(1) El ídolo de la prosperidad, que nos llena de arrogancia y falsa seguridad.

(2) La ignorancia, que lleva a herejía o sincretismo.

(3) La lucha contra el poder de las tinieblas. Siempre hemos de recordar que el carácter de don de la fe implica que necesitamos del donante para conservarla: “Líbranos de la tentación.”

Congreso de la Fe, 2 de 4, Renovados al contacto con Jesucristo

[Congreso en Poza Rica, México, en Marzo de 2013.]

Tema 2 de 4: Renovados al contacto con Jesucristo

* Aunque sean diversas las presencias de Cristo, es siempre el mismo Cristo.

* El actuar sigue al ser, decían los filósofos medievales. Cristo no está pasivamente presente sino “activamente” presente. Donde está actúa.

* Memoria, ayuda pedagógica o referencia: ese es el tipo de presencia de los personajes históricos. ¿Es así la presencia de Cristo? Una comparación ayuda a ver que no es así.

* Una expresión como “¡Mao vive!” en realidad significa sólo que sus ideas o su lucha permanecen vigentes.

* Por el contrario, los Evangelios nos muestran que el Resucitado tuvo prácticamente que imponerse sobre los discípulos, que no estaban mal dispuesto sino completamente indispuestos para aceptar algo tan absolutamente nuevo como es la noticia de la resurrección.

* Así pues, la expresión “¡Cristo vive!” no es, como en el caso de Mao, un modo de referirnos a la vida que nosotros le damos a su memoria, sino la vida que él nos da.

* Recibir vida de Jesús es entonces permitirle que él actúe en nosotros, y entrar en interacción con él. Y conviene ver que en cada una de las formas de presencia mencionadas en la primera predicación hay un camino abierto para interactuar de modo vivo con Cristo.

Congreso de la Fe, 1 de 4, La fe y los modos de presencia de Cristo

[Congreso en Poza Rica, México, en Marzo de 2013.]

Tema 1 de 4: La fe y los modos de presencia de Cristo

* ¿Por qué celebrar un “Congreso de Fe”? Porque la fe brota en el encuentro con Cristo, siempre: en el Antiguo Testamento, es encuentro con el Cristo esperado, anunciado, anhelado; en el Nuevo Testamento, es encuentro con la Palabra hecha carne, cuya gloria hemos contemplado, dice San Juan (1, 14); en el tiempo de la Iglesia, es encuentro con el Cristo Total, según expresión de San Agustín.

* Pueden destacarse siete modos principales de presencia de Cristo:

(1) En la Comunidad creyente: “Donde dos o tres se reúnen en mi Nombre, ahí estoy yo,” dice el Señor.

(2) En la creación entera: “Todo fue hecho por él y para él.”

(3) En la Divina Eucaristía, de la que dijo el Señor: “Tomad y comed; esto es mi Cuerpo.”

(4) En los pobres: “Lo que hicisteis a uno de mis humildes hermanos, a mí me lo hicisteis.”

(5) En las Escrituras: “Ellas hablan de mí,” dice Jesús.

(6) En el Cielo: “A la derecha de Dios Padre,” según expresión de San Pablo.

(7) Con los que anuncian el Evangelio: “Cooperando con los que anuncian por todas partes,” según dice el Evangelista Marcos.

Luchar por la fe

Padre, en la Cristíada, suceso de mexico, cuando se prohibio el culto a la iglesia catolica porque se decia que era un complot de la misma contra el estado, los cristeros decidieron luchar por su fe, si es para defender la fe, la guerra esta bien? — Preguntado en formspring.me/fraynelson

* * *

Pienso que la enseñanza del Catecismo, n. 2309, es muy esclarecedora:

Se han de considerar con rigor las condiciones estrictas de una legítima defensa mediante la fuerza militar. La gravedad de semejante decisión somete a esta a condiciones rigurosas de legitimidad moral. Es preciso a la vez:

— Que el daño causado por el agresor a la nación o a la comunidad de las naciones sea duradero, grave y cierto.

— Que todos los demás medios para poner fin a la agresión hayan resultado impracticables o ineficaces.

— Que se reúnan las condiciones serias de éxito.

— Que el empleo de las armas no entrañe males y desórdenes más graves que el mal que se pretende eliminar. El poder de los medios modernos de destrucción obliga a una prudencia extrema en la apreciación de esta condición.

Estos son los elementos tradicionales enumerados en la doctrina llamada de la “guerra justa”.

La apreciación de estas condiciones de legitimidad moral pertenece al juicio prudente de quienes están a cargo del bien común.

Catoliscopio

“Nosotros somos una organización de jóvenes católicos en busca de la propagación de los valores cristianos a la sociedad de Chihuahua, desarrollando una página por internet, en donde la interacción principal es por medio de la participación de ideas, actitudes, emociones, entre otros aspectos, que son plasmados en diversos artículos y videos para la contribución de un mejor entendimiento de la fe en Jesús, María y la Iglesia…”

catoliscopio

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Miguel Alvarez habla sobre lo negociable y lo no-negociable

En la segunda de dos entrevistas con fr. Nelson Medina, el mexicano Miguel Alvarez, presidente de SERAPAZ, aborda estas cuestiones:

1. ¿Qué hace que una planeación sea exitosa? O en sentido opuesto: ¿Qué podemos llamar una receta para el fracaso?

2. Hay factores negociables y no-negociables. ¿Dónde situar la frontera para que un proyecto comunitario no naufrague?

Miguel Alvarez habla sobre planeacion en la Iglesia

En una primera de dos entrevistas con fr. Nelson Medina, el mexicano Miguel Alvarez, presidente de SERAPAZ, habla sobre el sentido y las posibilidades que abre la planeación en el quehacer de evangelización y en la vida misma de la Iglesia.

Algunos puntos para destacar:

1. Planear o buscar estrategias no es reemplazar al Espíritu Santo, sino querer captar mejor y con todas sus implicaciones lo que el Espíritu está haciendo hoy.

2. Un proyecto no es lo mismo que un plan. Lo propio del proyecto son los énfasis, las estrategias y las líneas de acción; lo propio del plan es explicitar el detalle, la operación, lo concreto-puntual.

3. En la Iglesia, los clérigos podemos sentirnos tentados de creer que nuestro punto de vista es completo y suficiente; en el fondo, esto sería dejar entrar el individualismo que hace estragos en tantos otros sitios de la sociedad.