LA GRACIA 2025/10/26 Jesús nos llama a poner en orden nuestra vida ante Dios

DOMINGO XXX DEL TIEMPO ORDINARIO, CICLO C

Nuestro Señor Jesucristo nos muestra que por el camino de la humildad y el arrepentimiento restablecemos nuestra relación con Él y permitimos que el orden de Dios llegue a nuestras vidas.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2025/10/16 Gracias a Jesucristo brilla la justicia de Dios

Nuestra relación con Dios está desajustada por lo que Él envió a su Hijo para restaurarnos y mostrarnos su verdadero amor; por medio de la fe en Jesucristo alcanzamos la justificación.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2025/07/21 La raíz de toda injusticia

La injusticia más profunda es negar a Dios el lugar que le corresponde y de esa ruptura surgen todas las demás injusticias; sólo cuando reconocemos al Dios verdadero, todo en nuestra vida y en la sociedad recupera su orden y su sitio.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2025/03/29 Recordar qué es la justificación

La justificación según la Biblia es el proceso por el cual una persona deja su injusticia, su vida de pecado para encaminarse hacia Dios y ajustarse a su querer.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2025/03/10 Relación entre la sed de justicia y la auténtica caridad

La vida cristiana tiene fases: la primera es decidir no ser malo, la segunda es aprender a ser bueno y la tercera fase es ser bueno también con aquellos que nunca me podrán pagar.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2024/10/03 El libro de Job supera la teología de la retribución

El libro de Job nos ayuda a salir de la idea de que todo se paga en esta vida. Es muy distinto creer en un “dios” que retribuye todo en esta vida a creer en Dios, que es justo para siempre.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2024/03/13 Jesús es juez al traer el orden de Dios

Recordemos que Jesucristo es nuestro juez, no para vivir en pánico sino para traer a nuestra mirada la realidad de que Él nos trae la verdad, el plan, el orden de Dios a nuestra vida ahora y en la eternidad.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2023/11/25 Dios es justo y compasivo

Evitemos la enfermedad del cinismo donde se cree que se puede pecar impunemente y la enfermedad de la desesperación donde se cree que la misericordia de Dios es muy corta.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2022/11/12 Dios hará justicia

Saber que al final de la historia Dios hará justicia nos lleva a permanecer en la esperanza, a comprometernos en nuestro camino cristiano y nos cambia la manera de ver el mundo, nuestra vida y el futuro.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

LA GRACIA 2021/12/18 Cristo nuestra justicia

Dios nos promete algo mejor de lo que ya ha hecho, el futuro en Él supera al presente. Cristo es nuestra justicia, en Él se recupera el orden que habíamos perdido por el pecado.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

Relación entre religión y santidad

Que la palabra santidad, según parece, se toma por dos cosas. Una, pureza, y según esto, significa lo que la palabra griega agios, que es como decir sin tierra. Otra, firmeza. De ahí el que los antiguos llamasen santo a lo firmemente establecido por las leyes, de suerte que se lo debiera considerar inviolable; y el que se llame sancionado (o santo) a lo prescrito de manera inmutable por la Ley. Ésta palabra santo, según los latinos, puede referirse asimismo a la pureza, si se toma sanctus (santo) como derivado de sanguine tinctus (tinto o teñido en sangre), porque antiguamente quienes querían purificarse se mojaban con la sangre de la víctima, como dice San Isidoro en sus Etymol.

Uno y otro sentido convienen en atribuir santidad a lo que está destinado al culto divino, de tal modo que no sólo los hombres, sino también los templos, cálices y otras cosas parecidas se dice que están santificados por el mismo hecho de destinarlos al culto divino. La pureza, pues, es necesaria para que nuestra mente se una a Dios. Porque la mente humana se mancha al alearse con las cosas inferiores, como se ensucia cualquier materia al mezclarse con otra más vil; por ejemplo, la plata con el plomo. Es preciso, según esto, que nuestra mente se separe de las cosas inferiores para que pueda unirse al ser supremo. De ahí el que sin pureza no haya unión posible de nuestra mente con Dios. Por eso se nos dice en la carta a los Heb 12,14: Procurad tener paz con todos y santidad de vida, sin la cual nadie podrá ver a Dios. También se exige firmeza para la unión de nuestra mente con Dios. Se une a El, en efecto, como a su último fin y a su primer principio, extremos que necesariamente están dotados de la máxima inmovilidad. Por eso dice el Apóstol en Rom 8,38-39: Estoy persuadido de que ni la muerte ni la vida me separarán del amor de Dios. Así, pues, se llama santidad a la aplicación que el hombre hace de su mente y de sus actos a Dios. No difiere, por tanto, de la religión en lo esencial, sino tan sólo con distinción de razón. Se le da, en efecto, el nombre de religión por servir a Dios como debe en lo que se refiere especialmente al culto divino, como en los sacrificios, oblaciones o cosas similares; y el de santidad, porque el hombre refiere a Dios, además de eso, las obras de las demás virtudes, o en cuanto que, mediante obras buenas, se dispone para el culto divino. (S. Th., II-II, q.81, a.8 resp.)


[Estos fragmentos han sido tomados de la Suma Teológica de Santo Tomás, en la segunda sección de la segunda parte. Pueden leerse en orden los fragmentos publicados haciendo clic aquí.]

LA GRACIA 2021/12/10 Dos maneras de rechazar a Dios

¿Has rechazado a Dios porque te parece muy duro o lo has trivializado porque se predica cualquier cosa sobre su misericordia? Porque Él es justo no es justo seguir pecando y porque es misericordioso su misericordia es capaz de perdón y transformación para mi vida.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA en redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios. Tu donación hace fuerte la evangelización católica. ¡Dona ahora!]

Por qué hay que volver YA al Bien Común

Hay dos modos sencillos de reventar una sociedad y hacer desaparecer toda posibilidad de convivencia:

(1) Exaltar unos derechos omitiendo sistemáticamente otros.

(2) Privilegiar a unas personas y relegar sistemáticamente a otras.

Dos ejemplos de exaltación unilateral de derechos:

(1) Me importa tanto proteger “mi” propiedad privada que no me interesa quién se muera de hambre.

(2) Es tan importante el derecho a la protesta que no interesa cuánto se afecte el derecho de otros a su trabajo o su movilización.

Dos ejemplos de privilegios:

(1) Hay una brecha entre ricos y pobres. Y sucede que sólo los hijos de los ricos tienen las mejores oportunidades, con lo que la brecha sigue.

(2) Los miembros del partido comunista tienen plenos derechos ciudadanos, y los que no lo sean carecen de ellos.

La búsqueda consecuente del BIEN COMÚN, enseñanza predicada con perseverancia por la Iglesia, intenta apartarnos de esas visiones unilaterales, precisamente para ayudar a construir sociedad en condiciones de paz y convivencia humana para todos.