LA GRACIA del Jueves 12 de Mayo de 2016

Ser cristiano es dejar brillar la gloria y la fuerza que Jesús nos ha dado para tener impacto en los demás y poder dar razón de nuestra fe.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA – Ayúdanos a divulgar este archivo de audio en las redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios.]

Evangelizar con la música y el arte, 2 de 4: Lugar de la belleza en la evangelización

[VI Encuentro de Música y Teatro organizado por la Renovación Carismática Católica del Paraguay]

Tema 2 de 4: Lugar de la belleza en la evangelización

La belleza conecta con las dos facultades esenciales al ser humano porque lo realmente bello habla de un orden que complace, una armonía que causa gusto o inspira amor. De alguna forma, lo bello es síntesis de los verdadero y lo bueno.

La Biblia nos hace ver el poder que tiene la belleza, y que puede manifestarse en lo bueno o en lo malo. Tres nombres de la Biblia son de mujeres, y en ellas brillan, junto con la belleza, la sabiduría y una forma peculiar de poder.

Dios deja conocer su belleza a través de sus obras. El esplendor de esas obras de creación y de redención está detrás de la noción de la “gloria” divina. La gloria es la manifestación de la belleza que está en Dios; la belleza que Él mismo es.

Quienes se han encontrado con esa gloria, como Isaías en el templo, o como Pedro en su barca, se descubren abrumados y a la vez encuentran un modo nuevo de percibir su propio realidad, lo cual les conduce a una humildad profunda y sincera.

Tal es el tipo de experiencia de los que verdaderamente sirven al Señor con el arte: son ministros de su gloria.

LA GRACIA del Martes 5 de Enero de 2016

Cristo por su compasión y misericordia actúa más allá de las circunstancias que parecen imposibles de superar, y así manifiesta su gloria.

DONDE LA EPIFANÍA SE CELEBRA SIEMPRE EL 6 DE ENERO, las lecturas y homilías correspondientes al día de hoy se encuentran aquí.

[REPRODUCCIÓN PERMITIDA – Ayúdanos a divulgar este archivo de audio en las redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios.]

Conocer y amar la Iglesia, 1 de 2

[Predicación en la Parroquia de la Inmaculada Concepción en San Luis Potosí, México.]

Parte 1 de 2: Relación entre el amor a Dios y el amor al prójimo

* Cuando uno habla de Jesucristo es fácil quererlo , pero al hablar de la Iglesia, no es tan fácil quererla. El papa Francisco habla de la necesidad de mantener unidos el amor a Cristo y el amor a la Iglesia porque “no se puede amar a Cristo si no se ama a la Iglesia.” Nosotros somos los hijos de la Iglesia. Su realidad es misteriosa porque en ella están presentes lo humano y lo divino pero tiene llagas que son sobretodo nuestros pecados y como hijos debemos amarla, cuidarla y curarla.

* Se tocarán tres temas:

– RELACIÓN ENTRE EL AMOR A DIOS Y EL AMOR AL PROJIMO
– PROPÓSITO DE CRISTO CON LA IGLESIA
– COMO PODEMOS AYUDAR EN LOS MOMENTOS DIFICILES DE LA IGLESIA

I. RELACIÓN ENTRE EL AMOR A DIOS Y EL AMOR AL PRÓJIMO:

* En la Escritura aparece que apenas se rompe el vinculo de amor y de unidad entre el hombre y Dios, de inmediato se rompe también el vínculo entre nosotros los seres humanos, es decir que apenas se daña el amor a Dios, se daña el amor al prójimo. Amar a Dios es amar lo mas perfecto en cambio amar al prójimo es amar las imperfecciones que cada uno de nosotros tiene.

* Nosotros como humanidad somos como un poema que pronuncia y crea Dios, por eso cada una de sus sílabas tiene que ser perfecta, y esa perfección es lo que se llama la santidad. Si una de ellas estuviera borrosa, no se vería tan claro el mensaje. Dios ha expresado su ser, gloria y bondad en un poema que es la creación y en esa creación las siglas mas significativas somos nosotros los seres humanos y es el pecado el manchón que no deja ver la gloria de Dios de modo que siguiendo la analogía, el manchón deja entrever a medias el poema de Dios.

* Así el demonio tiene enemistad con la mujer y quiere destruir el plan que Dios tiene para ella empezando por el encargo en el que nada y nadie puede reemplazarla que es dar humanidad, es por eso que el demonio la detesta. Pero también a todo ser humano, porque el demonio quiere destruir el poema de Dios. De aquí se pueden entender 3 cosas importantes:

(1) El pecado que cada uno de nosotros comete, no se queda únicamente en sí mismo, sino que atenta contra la gloria de Dios.

(2) Dios siente dolor por la pérdida de un hijo, lo pierde cuando esta en el pecado.

(3) Cuando se le enseña a un ser humano de quién es hijo y quién le ha amado, se esta limpiando lo que estaba manchado.

* La irrompible relación del amor a Dios y al prójimo es esta: PORQUE AMO A DIOS, QUIERO QUE BRILLE LA GLORIA DE DIOS EN LA VIDA DEL PRÓJIMO. El amor al prójimo no es un asunto de simpatía, es el deseo de que aparezca la luz y el amor de Dios en él.

Para darle gloria a Dios

Fray, pedirle que me ayude en lo sgte: Aprendí que la mejor forma de decir es: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo… y no: Gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo, porque no debemos dividir a Dios, porque es uno, tres personas en un solo Dios. ¿Es correcto lo primero, o lo segundo también es válido? Mil gracias por su respuesta padre, Dios lo siga iluminando por donde quiera que vaya… Y lo esperamos por aquí, Lima Perú… — M.A.

* * *

Aunque lo segundo puede entenderse correctamente, y en ese sentido las dos fórmulas son válidas, esa expresión segunda deja demasiado la idea de tres divinidades a las cuales hay que brindar alabanzas por separado. Es un asunto de matiz, y no hay herejía en usar tal expresión, pero sin duda es mejor evitarla.