ALIMENTO 20180706

Alimento del Alma
Viernes 06 de julio de 2018

Convento de Santo Domingo, Bogotá, COLOMBIA.
Tel. +57 (1) 249-3385

No. 9637
Cada día tiene su gracia…

 

 

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* Para el VIERNES: Hechos de los Apóstoles de América *

Los eremitorios franciscanos del siglo XVI y su fuerza misionera

Montilla, andaluza y cordobesa

Mateo Sánchez Solano, hombre modesto de la señorial Montilla cordobesa, trabajador y espabilado, conforme a sus deseos, llegó a ser rico, se casó con Ana Jiménez Gómez en 1549, y en marzo de ese año tuvo un hijo, Francisco Solano, el cual, ya crecido, supo que tenía dos hermanos mayores, Diego Jiménez e Inés Gómez. Para él quedó el nombre de Solanito, el pequeño de los Solano. Biografías suyas importantes son las del franciscano Bernardino Izaguirre (1908) y la de fray Luis Julián Plandolit (1963). Seguiremos aquí su historia conducidos por el franciscano José García Oro.

La hermosa Montilla, perteneciente a la poderosa familia de los Fernández de Córdoba, marqueses de Priego, tuvo como señora desde 1517 a Doña Catalina Fernández de Córdoba, casada en 1519 con el conde de Feria. Con su favor llegaron a la villa los agustinos, 1520, las clarisas, 1525, los franciscanos, 1530, los jesuítas, 1553, y también San Juan de Avila, que después de muchos viajes y trabajos, allí se recogió en 1555. En ese marco de vida religiosa creció Solanito en sus primeros años infantiles y escolares.

A Córdoba se fue a sus quince o dieciséis años, y allí, en un ambiente disciplinado y piadoso, «entró a aprender a escribir en las escuelas de la Compañía, en la sección de gramática y escritura». Fue un alumno bueno, «compañero amoroso» y buen cantor. En 1569, el año en que murió San Juan de Avila, volvió a casa Solanito, con 20 años, a su Montilla abierta a las sierras que bajan del norte, de la Sierra Morena.

¿Hacia dónde iría su vida en adelante?

Los franciscanos del Santo Evangelio

En aquellas sierras cordobesas había una serie de pequeños eremitorios franciscanos, llenos de entusiasmo espiritual, focos de vida ascética y de impulso misionero. A sí mismos se llamaban los frailes del Santo Evangelio, y merece la pena que evoquemos brevemente su gloriosa historia, pues habían de tener suma importancia en la evangelización de América. Ya en 1394, el eremitorio de San Francisco del Monte había encendido en los parajes de Sierra Morena el fuego de la ascesis solitaria y de la irradiación apostólica hacia el cercano reino moro de Granada.

De aquel impulso misionero vino el martirio de fray Juan de Cetina, uno de sus primeros moradores. Y también en el eremitorio franciscano de Arrizafa, de comienzos del siglo XV, instalado en una finca cordobesa próxima al antiguo palacio de Abderrahmán I, ardió el fuego de la contemplación y del apostolado, con figuras tan excelsas como San Diego de Alcalá (+1464). Estos son los principales precedentes de la reforma que vendría después.

En efecto, fray Juan de Guadalupe fundó en 1494 una reforma de la Orden franciscana que fue conocida como la de los descalzos. Combatida en un principio por todas partes, logró afirmarse en 1515 con el nombre de Custodia de Extremadura, más tarde llamada provincia descalza de San Gabriel. En ese año, precisamente, tomó en ella el hábito San Pedro de Alcántara (1494-1562).

Finalmente, aquellos franciscanos, que desde hacía decenios iban afirmando su estilo de vida en tierras extremeñas, leonesas y portuguesas, fueron confirmados por el padre Francisco de Quiñones, general de los franciscanos desde 1523, y Cardenal de Santa Cruz más tarde. Este fue el que, según vimos (119-120), con aquellas preciosas Instrucciones de 1523, envió a México desde la provincia franciscana de San Gabriel a los Doce Apóstoles, con fray Martín de Valencia a la cabeza.


El autor de esta obra es el sacerdote español José Ma. Iraburu, a quien expresamos nuestra gratitud. Aquí la obra se publica íntegra, por entregas. Lo ya publicado puede consultarse aquí.

Fr. Nelson M.
amigos@fraynelson.com

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La Foto de Hoy


Amor de padre

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Santo del Día

Santa María Goretti.-

María nació el 16 de octubre de 1890 en Corinaldo, provincia de Ancona, Italia. Hija de Luigi Goretti y Assunta Carlini, tercera de siete hijos de una familia pobre de bienes terrenales.

Era una familia rica en fe y virtudes, cultivadas por medio de la oración en común, rosario todos los días, y los domingos, Misa y sagrada Comunión.

Al día siguiente de su nacimiento fue bautizada y consagrada a la Virgen. A los seis años recibirá el sacramento de la Confirmación.

Después del nacimiento de su cuarto hijo, Luigi Goretti, debido a la dura crisis económica por la que atravesaba, decidió emigrar con su familia a las grandes llanuras de los campos romanos, todavía insalubres en aquella época.

Se instaló en Ferriere di Conca, poniéndose al servicio del conde Mazzoleni. Es aquí donde María muestra claramente, una inteligencia y una madurez precoces, donde no existía ninguna pizca de capricho, ni de desobediencia, ni de mentira.

Es realmente el ángel de la familia. Tras un año de trabajo agotador, Luigi contrajo una enfermedad fulminante, el paludismo, que lo llevó a la muerte después de padecer diez días.

Como consecuencia de la muerte de Luigi, Assunta tuvo que trabajar, dejando la casa a cargo de los hermanos mayores.

María lloraba a menudo la muerte de su padre, y aprovechaba cualquier ocasión para arrodillarse delante de su tumba, elevar a Dios plegarias, para que su padre goce de la gloria divina.

Junto a la labor de cuidar de sus hermanos menores, María seguía rezando y asistiendo a sus cursos de Catecismo. Posteriormente, su madre contará que el rosario le resultaba necesario. De hecho, lo llevaba siempre enrollado alrededor de la muñeca.

De igual manera, era importante la contemplación del crucifijo, que fue para María una fuente donde se nutría de un intenso amor a Dios y de un profundo horror por el pecado.

Amor intenso al Señor

María, desde muy chica, anhelaba recibir la Sagrada Eucaristía. Según era costumbre en la época, debía esperar hasta los once años. Pero, un día le preguntó a su madre: -“Mamá, ¿cuándo tomaré la Comunión? Quiero a Jesús”. -“¿Cómo vas a tomarla, si no te sabes el Catecismo?”

-“Además, no sabes leer, no tenemos dinero para comprarte el vestido, los zapatos y el velo, y no tenemos ni un momento libre”. -“¡Pues, nunca podré tomar la Comunión, mamá! ¡Y yo no puedo estar sin Jesús!” -“¿Qué quieres que haga? No debo dejar que vayas a comulgar como una pequeña ignorante”.

Ante estas condiciones, María se comenzó a preparar con la ayuda de una persona del lugar, y todo el pueblo la ayudó, proporcionándole ropa de comunión. De esta manera, recibió la Eucaristía el 29 de mayo de 1902.

La comunión constante acrecienta en ella el amor por la pureza y la anima a tomar la resolución de conservar esa angélica virtud a toda costa.

Un día, tras haber oído un intercambio de frases deshonestas entre un muchacho y una de sus compañeras, le dice con indignación a su madre: -“Mamá, ¡qué mal habla esa niña!” -“Procura no tomar parte nunca en esas conversaciones”. -“No quiero ni pensarlo, mamá; antes que hacerlo, preferiría…”.

Y la palabra morir queda entre sus labios. Un mes después, sucedería lo que ella sentenció.

Pureza eterna

Al entrar al servicio del conde Mazzoleni, Luigi Goretti se había asociado con Giovanni Serenelli y su hijo Alessandro. Las dos familias vivían en apartamentos separados, pero la cocina era común.

Luigi se arrepintió en seguida de aquella unión con Giovanni Serenelli, persona muy diferente de los suyos, bebedor y carente de discreción en sus palabras.

Después de la muerte de Luigi, Assunta y sus hijos habían caído bajo el yugo despótico de los Serenelli.

María, que ha comprendido la situación, se esfuerza por apoyar a su madre: -“Ánimo, mamá, no tengas miedo, que ya nos hacemos mayores. Basta con que el Señor nos conceda salud. La Providencia nos ayudará. ¡Lucharemos y seguiremos luchando!”

Desde la muerte de su marido, Assunta siempre estuvo en el campo y ni siquiera tenía tiempo para ocuparse de la casa, ni de la instrucción religiosa de los más pequeños.

María se encarga de todo, en la medida de lo posible. Durante las comidas, no se sienta a la mesa hasta que no ha servido a todos, y para ella elige las sobras. Su obsequiosidad se extiende igualmente a los Serenelli.

Por otra parte, Giovanni, cuya esposa había fallecido en el hospital psiquiátrico de Ancona, no se preocupa para nada de su hijo Alessandro, joven robusto de diecinueve años, grosero y vicioso, al que le gusta empapelar su habitación con imágenes obscenas y leer libros indecentes.

En su lecho de muerte, Luigi Goretti había presentido el peligro que la compañía de los Serenelli representaba para sus hijos, y había repetido sin cesar a su esposa: -“¡Assunta! ¡Regresa a Corinaldo!”

Por desgracia, Assunta está endeudada y comprometida por un contrato de arrendamiento.

Después de tener mayor contacto con la familia Goretti, Alessandro comenzó a hacer proposiciones deshonestas a la inocente María, que en un principio no comprendió.

Más tarde, al adivinar las intenciones perversas del muchacho, la joven está sobre aviso y rechaza la adulación y las amenazas.

Suplica a su madre que no la deje sola en casa, pero no se atreve a explicarle claramente las causas de su pánico, pues Alessandro la ha amenazado: -“Si le cuentas algo a tu madre, te mato”.

Su único recurso es la oración. La víspera de su muerte, María pide de nuevo llorando a su madre que no la deje sola. Pero, al no recibir más explicaciones, ésta lo considera un capricho y no concede ninguna importancia a aquella reiterada súplica.

El 5 de julio, a unos cuarenta metros de la casa, están trillando las habas en la tierra. Alessandro lleva un carro arrastrado por bueyes. Lo hace girar una y otra vez sobre las habas extendidas en el suelo.

Hacia las tres de la tarde, en el momento en que María se encuentra sola en casa, Alessandro dice: -“Assunta, ¿quiere hacer el favor de llevar un momento los bueyes por mí?”

Sin sospechar nada, la mujer lo hace. María, sentada en el umbral de la cocina, remienda una camisa que Alessandro le ha entregado después de comer, mientras vigila a su hermanita Teresina, que duerme a su lado.

-“¡María!”, grita Alessandro. -“¿Qué quieres?” -“Quiero que me sigas”. -“¿Para qué?” -“¡Sígueme!” -“Si no me dices lo que quieres, no te sigo”.

Ante semejante resistencia, el muchacho la agarra violentamente del brazo y la arrastra hasta la cocina, atrancando la puerta. La niña grita, pero el ruido no llega hasta el exterior.

Al no conseguir que la víctima se someta, Alessandro la amordaza y esgrime un puñal. María se pone a temblar, mas no sucumbe.

Furioso, el joven intenta con violencia arrancarle la ropa, pero María se deshace de la mordaza y grita: -“No hagas eso, que es pecado… Irás al infierno”.

Poco cuidadoso del juicio de Dios, el desgraciado levanta el arma: -“Si no te dejas, te mato”.

Ante aquella resistencia, la atraviesa a cuchilladas. La niña se pone a gritar: -“¡Dios mío! ¡Mamá!”, y cae al suelo.

Creyéndola muerta, el asesino tira el cuchillo y abre la puerta para huir. Sin embargo, al oírla gemir de nuevo, vuelve sobre sus pasos, recoge el arma y la traspasa otra vez de parte a parte; después, sube a encerrarse a su habitación.

María recibió catorce heridas graves y quedó inconsciente. Al recobrar el conocimiento, llamó al señor Serenelli: -“¡Giovanni! Alessandro me ha matado… Venga”.

Casi al mismo tiempo, despertada por el ruido, Teresina lanza un grito estridente, que su madre oye. Asustada, le dice a su hijo Mariano: -“Corre a buscar a María; dile que Teresina la llama”.

En aquel momento, Giovanni Serenelli sube las escaleras y al ver el horrible espectáculo que se presenta ante sus ojos, exclama: -“¡Assunta, y tú también, Mario, venid!”.

Mario Cimarelli, un jornalero de la granja, trepa por la escalera a toda prisa. La madre llega también: -“¡Mamá!”, gime María. -“¡Es Alessandro, que quería hacerme daño!”

Llaman al médico y a los guardias, que llegan a tiempo para impedir que los vecinos, muy excitados, den muerte a Alessandro en el acto.

Sufrimiento redentor

Al llegar al hospital, los médicos se sorprenden de que la niña todavía no haya sucumbido a sus heridas, pues ha sido alcanzado el pericardio, el corazón, el pulmón izquierdo, el diafragma y el intestino.

Al diagnosticar que no tiene cura, llamaron al capellán. María se confiesa con toda claridad. Luego, durante dos horas, los médicos la cuidan sin dormirla.

María no se lamenta, no deja de rezar y de ofrecer sus sufrimientos a la Santísima Virgen, Madre de los Dolores.

Su madre consigue que le permitan permanecer a la cabecera de la cama. María aún tiene fuerzas para consolarla: -“Mamá, querida mamá, ahora estoy bien… ¿Cómo están mis hermanos y hermanas?”

En un momento, María le dice a su mamá: -“Mamá, dame una gota de agua”. -“Mi pobre María, el médico no quiere, porque sería peor para ti”.

Extrañada, María sigue diciendo: -“¿Cómo es posible que no pueda beber ni una gota de agua?” Luego, dirige la mirada sobre Jesús crucificado, que también había dicho: “¡Tengo sed!”, y entendió.

El sacerdote también está a su lado, asistiéndola paternalmente. En el momento de darle la Sagrada Comunión, le pregunta: -“María, ¿perdonas de todo corazón a tu asesino?”

Ella le responde: -“Sí, lo perdono por el amor de Jesús, y quiero que él también venga conmigo al Paraíso. Quiero que esté a mi lado… Que Dios lo perdone, porque yo ya lo he perdonado”.

Pasando por momentos análogos a los que pasó el Señor Jesús en la Cruz, María recibió la Eucaristía y la Extremaunción, serena, tranquila, humilde en el heroísmo de su victoria.

Después de breves momentos, se le escucha decir: “Papá”. Finalmente, María entra en la gloria inmensa de la Comunión con Dios Amor. Es el día 6 de julio de 1902, a las tres de la tarde.

La conversión de Alessandro

En el juicio, Alessandro, aconsejado por su abogado, confesó: -“Me gustaba. La provoqué dos veces al mal, pero no pude conseguir nada. Despechado, preparé el puñal que debía utilizar”.

Por ello, fue condenado a 30 años de trabajos forzados. Aparentaba no sentir ningún remordimiento del crimen; tanto así, que a veces se le escuchaba gritar: -“¡Anímate, Serenelli, dentro de veintinueve años y seis meses serás un burgués!”.

Sin embargo, unos años más tarde, Monseñor Blandini, Obispo de la Diócesis donde está la prisión, decidió visitar al asesino para encaminarlo al arrepentimiento. -“Está perdiendo el tiempo, Monseñor” -afirma el carcelero-, “¡es un duro!”

Alessandro recibió al Obispo refunfuñando, pero ante el recuerdo de María, de su heroico perdón, de la bondad y de la misericordia infinitas de Dios, se deja alcanzar por la gracia.

Después de salir el Prelado, llora en la soledad de la celda, ante la estupefacción de los carceleros.

Luego de tener un sueño donde se le apareció María vestida de blanco en los jardines del Paraíso, Alessandro, muy cuestionado, escribió a Monseñor Blandino: “Lamento sobre todo el crimen que cometí, porque soy consciente de haberle quitado la vida a una pobre niña inocente, que hasta el último momento quiso salvar su honor, sacrificándose antes que ceder a mi criminal voluntad”.

Pido perdón a Dios públicamente, y a la pobre familia, por el enorme crimen que cometí. Confío obtener también yo el perdón, como tantos otros en la tierra”.

Su sincero arrepentimiento y buena conducta en el penal, le devuelven la libertad cuatro años antes de la expiración de la pena.

Después, ocupará el puesto de hortelano en un Convento de capuchinos, mostrando una conducta ejemplar, y será admitido en la Orden tercera de San Francisco.

Gracias a su buena disposición, Alessandro fue llamado como testigo en el proceso de beatificación de María.

Resultó algo muy delicado y penoso para él, pero confesó: “Debo reparación, y debo hacer todo lo que esté en mi mano para su glorificación. Toda la culpa es mía. Me dejé llevar por la brutal pasión. Ella es una santa, una verdadera mártir. Es una de las primeras en el Paraíso, después de lo que tuvo que sufrir por mi causa”.

En la Navidad de 1937, Alessandro se dirigió a Corinaldo, lugar donde Assunta Goretti se había retirado con sus hijos. Lo hace simplemente para hacer reparación y pedir perdón a la madre de su víctima.

Nada más llegar ante ella, le pregunta llorando: -“Assunta, ¿puede perdonarme?” -“Si María te perdonó” ,-balbucea-, “¿cómo no voy a perdonarte yo?”

El mismo día de Navidad, los habitantes de Corinaldo se sienten sorprendidos y emocionados, al ver aproximarse a la mesa de la Eucaristía, uno junto a otro, a Alessandro y Assunta.

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Cumpleaños

Daniel Esmite.- Montevideo, Uruguay -Misionero

Rafael Jinete.- Bogotá, Colombia

Ruth.- Barquisimeto, Venezuela – Dios cuide y Bendiga a mi hija. Fátima Añez

Natalia Rios.- Bogotá, Colombia (1995) – Para mi mas hermosa hija, que mi Dios la bendiga para que sigas cumpliendo muchos años mas de vida, fortaleciendo todos esos valores que mi Dios te ha dado. Te amamos con todo nuestro corazón. Francisco.

Elisa de Dávila.- Arequipa, Peru – Feliz cumpleaños amada esposa suplico a Dios te proteja y te bendiga. Jorge

Isabella Sánchez Restrepo.- Medellín, Colombia (2009)

Sandra Yisel Plata Báez.- Floridablanca, Colombia – Que Dios te bendiga, que la sangre de Cristo te cubra y te proteja siempre, te llene de felicidad, amor, paz y prosperidad Amén. Felicidades en tu cumpleaños.

Martha Isabel Páez Arciniegas.- Neiva-Huila, Colombia (1958) – Agradezco a Dios que exista esta hermosa página de evangelización con este sacerdote tan especial, espero conocerlo personalmente.

[Añade otro cumpleaños]

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Bautismos
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Aniversario de Ordenación Sacerdotal
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Aniversario de Matrimonio

Hernando García y Gladys Barragán..- Bogotá, Colombia (1984) – 25 años de Casados. Dios los bendiga, y les pido mucha oración por mi matrimonio. Muchas Gracias.

[Añade otro aniversario de matrimonio]

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Grupos, Comunidades, Congregaciones…
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Evangelización Viva para hoy y los próximos días

[Añade otro evento de evangelización: Son bienvenidas fechas futuras, por ejemplo si deseas dar a conocer algún congreso, concierto, retiro, o similares]

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Otras fechas importantes para ti
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Fallecieron en un día como hoy…

Julieta Estrada.- Apartadó, Colombia (1983) – Mamá: si Dios te permite, intercede por tus hijos, nietos y esposo para nuestra conversión y unión familiar, te ruego que lo hagas, porque nuestra familia está muy dividida…. descansa mamá en paz y gracias por tu gran ejemplo de humildad, nobleza, fidelidad y tolerancia que tuviste con todos a pesar de las dificultades… te amo julieta… toda mi vida te amaré… gracias por tu amor. Lucelly

Sofía Medina.- Los Angeles California, Estados Unidos – Pido oración su alma, gracias y que Dios los bendiga. José Frausto

Luis Jorge Peña Chaves.- Bogotá, Colombia (2011) – Dios te tenga en su Gloria.

[Añade el nombre de personas fallecidas por las que quieres que oremos]

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Enlace recomendado para este día

Razones para obrar en la adversidad

“Afortunadamente, han quedado muy atrás aquellos moralismos austeros de otros tiempos, con esa exagerada exaltación del sacrificio y con desproporcionados sentimientos de culpa. Ahora, sin embargo, habría que preguntarse: ¿es posible vivir rectamente sin sacrificio y sin una adecuada noción de culpa?” Haz click AQUÍ.

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Un poco de Humor…

Niños de hoy

– ¿Pablito, has hecho los deberes?
– Profesora, ¿ha corregido ya los últimos exámenes?
– Tengo más alumnos que ustedes.
– Tengo más asignaturas que la suya.

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Palabra de Dios
para alimentar tu día


Tiempo Ordinario, Año Par,
Semana No. 13, Viernes


Lecturas de la S. Biblia

Temas de las lecturas: Enviaré hambre, no de pan, sino de escuchar la palabra del Señor * No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. * No tienen necesidad de médico los sanos; misericordia quiero y no sacrificios

Textos para este día:

Amós 8, 4-6. 9-12:

Escuchad esto, los que exprimís al pobre, despojáis a los miserables, diciendo: “¿Cuándo pasará la luna nueva, para vender el trigo, y el sábado, para ofrecer el grano?” Disminuís la medida, aumentáis el precio, usáis balanzas con trampa, compráis por dinero al pobre, al mísero por un par de sandalias, vendiendo hasta el salvado del trigo.

Aquel día -oráculo del Señor- haré ponerse el sol a mediodía, y en pleno día oscureceré la tierra. Cambiaré vuestras fiestas en luto, vuestros cantos en elegía; vestirá de saco toda cintura, quedará calva toda cabeza. Y habrá un llanto como por el hijo único, y será el final como día amargo.

Mirad que llegan días -oráculo del Señor- en que enviaré hambre a la tierra: no hambre de pan ni sed de agua, sino de escuchar la palabra del Señor. Irán vacilantes de oriente a occidente, de norte a sur; vagarán buscando la palabra del Señor, y no la encontrarán.

Salmo 118:

Dichoso el que, guardando sus preceptos, / lo busca de todo corazón. R.

Te busco de todo corazón, / no consientas que me desvíe de tus mandamientos. R.

Mi alma se consume, deseando / continuamente tus mandamientos. R.

Escogí el camino verdadero, / deseé tus mandamientos. R.

Mira cómo ansío tus decretos: / dame vida con tu justicia. R.

Abro la boca y respiro, / ansiando tus mandamientos. R.

Mateo 9, 9-13:

En aquel tiempo vio Jesús a un hombre llamado Mateo sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: “Sígueme”. El se levantó y lo siguió. Y estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: “¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?” Jesús lo oyó y dijo: “No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa “misericordia quiero y no sacrificios”: que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”.

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Homilías para escuchar

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Más…

1

1996/07/05 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
Dios necesita evangelizadores que no se apoyen en sus propias fuerzas.

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2

1996/07/05 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3

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3

2000/07/07 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3

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4

2002/07/05 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
Justicia y misericordia, dos modos de actuar que tiene Dios.

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5

2010/07/02 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
La justicia que se busca sin Dios, se vuelve venganza y solo deja a su paso muerte y destrucción.

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6

2012/07/06 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
En Cristo resuena el llamado de Dios que nos conduce de nuevo a la amistad y vida junto a él.

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7

2012/07/06 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
El “sígueme” de Cristo tiene tres virtualidades: (1) Desata del pasado; (2) Anuncia un nuevo camino; (3) Nos presenta su PROPUESTA de amor de Dios, que espera de nosotros una RESPUESTA, que es precisamente la fe.

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8

2014/07/04 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
Cristo como médico nos recibe con amor pero no para dejarnos enfermos en nuestro pecado sino para ponernos a andar y a avanzar.

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9

2016/07/01 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
¡El tiempo se agota, es la hora de la salvación!; demos el paso para retornar a Dios, empleemos y aprovechemos el tiempo para volver a nuestro Creador.

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10

2016/07/01 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
Desierto y jardín, regaño y mimo, desolación y consolación: todo tiene un lugar en el plan de amor de Dios para educarnos y conducirnos a la plena comunión de amistad con Él.

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11

2018/07/06 Haz click para escuchar o grabar una versión en MP3
Cristo hace su obra en los opresores porque ellos también están oprimidos por el pecado y por el demonio, ellos también necesitan de médico.

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Más información sobre este día aquí

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Homilía para leer

Temas de las lecturas: Enviaré hambre, no de pan, sino de escuchar la palabra del Señor * No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. * No tienen necesidad de médico los sanos; misericordia quiero y no sacrificios

1. De Dónde Nace el Hambre de la Palabra

1.1 La primera lectura nos presenta el estilo viejo y repetido del pecado. Ya desde aquellas épocas y desde aquellas culturas están las balanzas con trampa y la insaciables codicia del ser humano. Detrás del engaño y de la riqueza ilícita, la opresión: el pobre se convierte en moneda, cuenta por su utilidad y es intercambiable. Se puede prescindir de él porque sólo representa un ingreso, una cantidad que los poderosos le asignan.

1.2 El rostro de Dios queda así disminuido y afrentado. La imagen de Dios, que es el ser humano, ya es menos que una caricatura y sólo vale reducido a la categoría de animal o cosa, como “un par de sandalias.”

1.3 Así entendemos la manera como el profeta mira la intervención de Dios: el sol que se oscurece, negando la vida y la alegría, o el llanto generalizado son indicaciones de un orden universal que ha quedado destruido. La Creación se rebela, porque el hombre, que ha renunciado a ser imagen de Dios, ya en realidad no le representa.

1.4 Esa ruptura entre la Creación y el hombre es también una distancia entre la voz de Dios y el mismo hombre. Frente a la Creación que se le rebela, el hombre busca un sentido, una dirección, un por qué. Así llega a sentir hambre de la Palabra de Dios, porque sólo la Palabra que hizo todas las cosas podrá de algún modo explicar el desorden que cunde en todo. De este modo, el hombre que con rebeldía se había apartado de su Dios, aprende a través de la rebeldía de la Creación su propio estado y entonces busca con ansia la Palabra que le ilumine y le levante.

2. Jesucristo, Médico Divino

2.1 Hoy, en el evangelio, Jesús se ha dado el título de “médico”. ¡Qué buena noticia para los que reconocemos nuestras dolencias!

2.2 Miremos las actitudes y el corazón de este médico que en su generosidad, como dice Santa Catalina de Siena, llegó a beber la amarga medicina que el enfermo ya no podía recibir en su maltrecha humanidad. Por eso se acerca piadoso al pecador y con la cercanía de su trato y conversación va destruyendo los prejuicios y temores que encierran con su tiranía al que se sabe culpable.

2.3 Observemos en el evangelio de hoy a quien llama Jesús “enfermo” : es un hombre cruel y tirano que con la opresión de los impuestos cobrados a nombre del Imperio Romano va haciendo su propia fortuna. Es un opresor, y Jesús lo llama “enfermo”. No quiere destruirlo sino reconstruirlo. No quiere devastarlo sino levantarlo. Jesús sabe bien, y quiere que nosotros sepamos, que la primera víctima de la crueldad o de la opresión es el mismo cruel opresor, y por eso le trata de “enfermo”.

2.4 Nos resulta fácil compadecernos de un anciano desvalido o de un niño abandonado, pero la verdadera caridad descubre al enfermo aunque lo encuentre con alientos para hacer daño a otros. ¡Bendito amor que en esta cuaresma ha de movernos a entregarnos a nuestro Médico y a entender que su caridad desborda nuestros juicios miopes!

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Video recomendado para este dia!

[Retiro en Sydney, Australia: Ninguna familia sin futuro, ningún futuro sin familia. Predicación 2 de 4] Dificultades mas frecuentes para una vida familiar sana, fuerte y feliz – NFSF 2 de 4 * Nuestro punto de partida es que la familia tiene un lugar único en la sociedad porque forma seres humanos según la naturaleza humana. La familia es como una nave que avanza en mediod e dificultades y quiere llegar a puerto, alumbrada por dos grandes faros: complementariedad y fecundidad.

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  • Los textos del SANTO DEL DÍA son responsabilidad y cortesía de Aciprensa o de la Archidiócesis de Madrid. Ten en cuenta, sin embargo, que la celebración litúrgica de un santo o santa en particular depende de factores locales, del tiempo litúrgico, de si cae en domingo, y algunos otros. Los breves esquemas que ofrecemos son sólo para edificación espiritual. Los demás textos no bíblicos son responsabilidad de sus autores o si no se indica, de Fray Nelson Medina, O.P. Estos pueden ser divulgados declarando la fuente. Tus aportes en oración, tiempo, servicios, ideas o dinero son siempre bienvenidos. Puedes visitar nuestra página de ayuda.
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