Firmes en la fe, crecidos en el amor, 3 de 3: El crecimiento en la fe es algo real

[Retiro para la comunidad hispana de Hackettstown en diciembre de 2014.]

Tema 3 de 3: El crecimiento en la fe es algo real

* Recomendaciones

(1) Usar la fe: La fe es como un músculo, hay que ejercitarla para que se fortalezca. Se ejercita siendo obedientes a Cristo, por ejemplo en la oración; La oración no es un instrumento para premiar a los que me tratan bien y para castigar a los que me caen mal. Ella es mi aporte al plan de Dios para que ese plan se realice en la vida de mis enemigos, de mis amigos y en mi propia vida. Para orar por los demás es diciendo “Señor, cumple tu voluntad en …(la persona por la que se esté orando)”. Los tres bienes que traer orar de esta manera son:
– te exime de creerte Dios
– sales del plan del demonio
– preparas tu corazón para que poco a poco llegues a los verdaderos sentimientos (primero van las obras y luego los sentimientos)

(2) Oir Predicación: La predicación ayuda a que la palabra penetre en mi vida.

(3) Conocer testimonios y las vidas de los Santos: Una de las tentaciones es hacernos creer que estamos solos en nuestra batalla, pero al conocer la vida de los Santo, descubrimos que ellos también tuvieron dificultades y problemas, mas sin embargo lograron vencer esas dificultades.

(4) Estudiar: La persona que no ha estudiado la palabra, fácilmente entra en fanatismo o fundamentalismo. El estudio nos ayuda a ver la conexión que tienen unos textos con otros y el avance de la revelación de Dios.

(5) Aprender a defender la sana doctrina: No permitir que nos contaminen la fe, hay que cuidarla. Mantenerse en las fuentes limpias de la Iglesia (Doctores y Padres de la Iglesia, catecismo). No hay que dejar que se ensucie lo que le costo tan caro a Jesucristo, ese tesoro venido del cielo que es la fe.