[Predicación en Radio Betania de Santa Cruz, Bolivia.]
* ¿Hay una relación real entre los textos de Hechos 2 que nos describen una comunidad donde todo se comparte, y el comunismo como sistema político? En un plano exterior y superficial parece que sí precisamente porque el compartir de bienes hace que no haya propiamente diferencias de clase. pero hay una realidad más profunda.
* Lo que propone el comunismo es un proceso que empieza por una siembra de odio hacia la clase social poseedora de los bienes de producción. Y la siembra de odio produce espirales de envidia, intriga y violencia. Además, el decapitar un sistema social simplemente produce nuevas élites con nuevos privilegios.
* La comunión que propone la Escritura es otra. Parte de un tesoro grande que compartimos, que no es otro que Cristo mismo, que se ofreció a sí mismo por nuestra redención. Y quien comparte lo mayor no encuentra resistencia para compartir lo menor.