ABC de la Teología del Cuerpo
1. Identidad: el ser humano es unidad sustancial de alma y cuerpo, de modo que el cuerpo no es vestido del que pueda desprenderme como uno deja un vestido. La reencarnación es engaño, y lo que amamos, buscamos o hacemos de nuestro cuerpo no es separable de lo que somos en el tiempo y en la eternidad.
2. Lenguaje: A través del cuerpo nos hacemos presentes en la vida de otras personas. Nuestro primer lenguaje y la condición misma de todo nuestro expresarnos es nuestro cuerpo y lo que hacemos con él, por ejemplo, en la manera como actuamos, el tono que usamos o los vestidos que nos ponemos.
3. Salvación: Santo Tomás llama al cuerpo de Jesucristo “instrumento unido a la divinidad.” El cuerpo es vehículo de salvación por la realidad sacramental que prolonga la encarnación de Cristo, y por la presencia del Espíritu en nosotros que hace que otros puedan sentirse amados por el amor que Dios les da a través nuestro.
[Predicación en el marco de la IX Semana de la Familia, en la Parroquia de la Asunción en Zipaquirá, Colombia.]