Retiro Espiritual en el Seminario de Bogotá. Tema 6: El imposible de una Iglesia “puramente humana.” San Pablo distingue en el hombre que es “sólo” humano (ánthropos psychikós) y el hombre que conoce y ha experimentado la gracia del Espíritu (ánthropos pneumatikós). Lo “sólo humano” no rechaza a la Iglesia pero quiere redefinirla con condiciones específicas: (1) Que acepta la democracia; (2) Que se pliegue ante la opinión pública y el consenso social; (3) Que limite su acción a lo intra-mundano, relegando lo demás al carácter de fábula o mito; (4) Que no pretenda juzgar en la vida privada de las personas. Por supuesto, una “iglesia” que aceptara eso no sería más la Iglesia de Cristo.