El escandalo del P. Alberto Cutie

Después de varios días de seguimiento, un “paparazzi” logró su propósito: fotos reveladoras en las que el famoso padre Alberto Cutié aparece acariciando y besando a una mujer, tanto en un bar como en una playa de la Florida, lugar de residencia del mismo Cutié. El paparazzi intentó vender videos y fotos a varios medios estadounidenses. El Herald de Miami dice que el fotógrafo aspiraba a cifras “con seis ceros;” sin que se sepa el precio acordado, el hecho es que al final la revista de farándula TV Notas se quedó con ellas, y hoy pueden ser vistas sin mayor dificultad en Internet.

Se trata de un escándalo de proporciones inmensas pues el P. Alberto era párroco en la parroquia de San Francisco de Sales en Miami, director de Radio Paz, escritor reconocido, locutor y presentador de televisión. El obispo, John C. Favalora, tomó prontamente cartas en el asunto y también el clérigo ha renunciado ya a sus altos cargos y ha emitido un comunicado donde dice:

Ante Dios – lleno de amor y misericordia – y ante toda nuestra comunidad, quiero pedir perdón si mis acciones les han causado dolor y tristeza. Desde mi ingreso al seminario a los 18 años, el sacerdocio me ha traído gran alegría. Les aseguro que mi servicio y dedicación a Dios continuarán intactos. Doy gracias a Dios por la compasión y el apoyo humano que he recibido en el día de hoy de tantas personas en nuestra comunidad, especialmente mis feligreses y oyentes de nuestras emisoras. Sólo pido sus oraciones y apoyo. – P. Alberto Cutié.

La avalancha de comentarios no se ha hecho esperar. Resulta interesante clasificarlos.

  • Un número considerable mira este hecho como una demostración, una más, de la necesidad y urgencia de abolir la ley del celibato.
  • Otros comentan con cinismo el factor de que se trata de una mujer adulta–y no de otro hombre, o de un menor de edad.
  • Otros, unos pocos, reflexionan sobre el daño causado a la Iglesia y el dolor que esto supone para el Papa y ante todo para el Corazón de Cristo.

Tal como están las cosas parece que el querido “Padre Alberto,” como se le conoció en los medios de hispanoamérica, tendrá básicamente que elegir si se convierte en un abanderado de la abolición del celibato, y por tanto, opositor declarado de la postura actual de la Iglesia en Occidente, o si lleva una vida menos visible pero quizás más acorde con su ministerio. Esto lo digo porque puedo imaginarme los que querrán que el padre “salga del closet” y sencillamente se presente ante el mundo como un hombre “honesto” que lucha contra la “hipocresía” de la Iglesia. Realmente mi oración va en súplica a Dios sobre todo para que esta tentación, esta en particular, la de querer seguir como la gran figura y pretender ahora guiar a la Iglesia, no se adueñe del corazón de Alberto Cutié.

Además, cada vez que conozco de un escándalo relacionado con la situaciones afectivas o sexuales del clero suelo preguntarme qué tiene que ver el matrimonio con todo ello. ¿No hay muchos hombres casados que van a la playa o a un bar con sus amantes? La idea de que tener el derecho a sexo con una mujer hará a los hombres fieles no tiene el menor respaldo en la realidad social. Por dar un ejemplo: de hecho, y como se ha publicado ya muchas veces, la mayoría de los pederastas son casados. La energía o el apetito sexual no son como un capital que, si se “gasta” en una mujer, ya no se puede gastar en otros intereses o placeres, o en otras mujeres. Además, eso de imaginar a la mujer como “receptáculo” de apetitos que ya no deambularán por la haz de la tierra es del todo degradante y entraña un terrible irrespeto hacia la misma mujer. El matrimonio no es una “solución” para el problema sexual–ni en otro orden de ideas el sexo es una “solución” para los problemas matrimoniales.

Así que deducir que el escándalo de Cutié va a “ablandar” la ley del celibato es no conocer a los célibes, ni a los matrimonios, ni a la Iglesia.

Dos temas, en cambio, sí que creo yo que merecen análisis. Uno es el de las estrellas “mediáticas.” Cutié no es el primer sacerdote rutilante que cae en desgracia. En Colombia, mi país, un número significativo sacerdotes de gran éxito–quiero decir, de éxito ruidoso y presencia masiva en los medios–han tenido alguna dificultad grave o han dejado el ministerio. La pobreza doctrinal de Alfonso Llano negando o cuestionando la resurrección corporal de Cristo; las sugerencias de Carlos Novoa sobre Madonna como evangelizadora; el abandono del sacerdocio por Gonzalo Gallo, y otros escándalos que por menos públicos no creo que deba mencionar, todo eso apunta a una severa advertencia, que no es sino aquello de que nos hablaron los antiguos y sabios: enemigos del alma son el demonio, el mundo y la carne. Pues bien, el despliegue mediático masivo, la adicción a los aplausos, la necesidad de ver el propio nombre brillar… todo eso es mundo.

El otro tema es la mujer. Ya dije que no comparto la idea de “solucionar” crisis con mujeres. Habría que empezar por resolver las crisis de las mujeres, que también las tienen. Pero sí creo que la Iglesia necesita dar pasos, muchos pasos, para realmente incorporar lo que Juan Pablo II llamaba el “genio” de la mujer. Entre la misoginia, la relación furtiva y el escándalo, nuestra Iglesia requiere mucha oración, mucho discernimiento y mucha capacidad de diálogo para acertar en esta área.

Entre tanto, nuestras oraciones no cesan por la Arquidiócesis de Miami, por Mons. John C. Favalora, por el P. Alberto Cutié, por aquella mujer de las fotos, y por toda la Iglesia. Y también pido yo que se ore por mí y por cada sacerdote.

8 respuestas a «El escandalo del P. Alberto Cutie»

  1. Gracias Fray Nelson por Tomar la voz en estos momentos. Claro que oramos por ti, por todos los sacerdotes y por todos nosotros los laicos con ministerios. Oramos porque este camino no es fácil. Oramos porque no hemos sabido vivir de acuerdo a la Justicia del Padre en Jesús. Oramos para ser perdonados también nosotros por no saberles acompañar en medio de sus muchas dificultades, y no saber actuar con el amor y la misericordia de Dios para acoger al que se equivoca o se debilita en el camino, y antes bien nos comportamos como fariseos e hipócritas, dejandonos mover por el amarillismo de los medios y la Falsedad de la mundanidad.
    Dios Padre, infinito en misericordia, nos ayude a asumir nuestra humanidad Confiando siemre en Su Gracia y no dejándonos apartar de Dios NUNCA.
    Chairein Shalom

  2. Paz y bien.

    Estoy totalmente de acuerdo con su merced, Fray Nelson. Pero tambien es momento que los laicos no bajemos la defensa en la oracion, y nos apropiemos de nuestros sacerdotes y vocaciones religioso como un tesoro de la iglesia, es decir nosotros como laicos nocuidamos a nuestros sacerdotes y vocaciones religiosas, las dejamos solas, no las rodeamos con verdadero calor fraterno y de familia, vemos en los sacerdotes cajeros espirituales a los que acudimos solo cuando tienen problemas… en fin. Oremos y como fieles comuniquemos a tiempo y adestiempo el verdadero valor del Sacerdocio. Mi esposa y yo oramos por todos los sacerdotes en especial por aquellos que se sienten solos, y derrotados.

  3. Hola mi querido Fray, solo queriamos unirnos y apoyar tu punto de vista, y tambien compartir un pequeno pensamiento de mi esposo y dice asi:

    “Con amor y verdad se perdona el pecado; Honrando al Senor se aleja uno del mal” (Prov 16,6)

    De nuevo una herida mas en el cuerpo de Cristo. Hoy expresamos nuestro gemir de tristeza y dolor, ante las ultimas noticias. No podemos evitar tan notable perdida, en esta batalla que libramos como iglesia, presencia de Cristo, que busca vivir en la luz de la verdad.
    Tiempos de conflicto, tiempos de silencio y reflexion profunda, sobre el sentido de lo que somos y hacemos. !Cuanta responsabilidad nos ha dado el Senor!
    Ofrecemos una voz de perdon, con la absoluta conviccion, de a quien le corresponde el juicio.
    Exhortamos desde nuestro deber como creyentes, a todo el pueblo de Dios, en especial a quienes se encuentran en situacion similar. !POR FAVOR, ABANDONEN CUALQUIER TIPO DE TENDENCIA A VIVIR UNA VIDA MORAL DOBLE! !HUYAN DE LA LEVADURA DE LOS FARISEOS!
    Pidamos a nuestro Dios que nos de la gracias de considerar con seriedad y temor las palabras de nuestro Senor Jesucristo al respecto (Como podran escapar del fuego purificador de su presencia?)
    Por casos como este, los lobos que quieren destruir el rebano, estan haciendo fiesta. Queremos ver la valentia, de los pastores, que estan dispuestos a dar la vida por sus ovejas, mueriendo a sus propios intereses.
    Muchos han aparecido, por doquier, en este tiempo hablando y predicando de Cristo. Artistas por aqui y por alla. Hermanos, cuidado, el evangelio de Jesucristo, no es un juego. Esto es serio y trascendente. Debemos seguir orando por toda esta realidad, que nos inquieta profundamente.
    La invitacion es, que hagamos todo lo que este a nuestro alcance, para orar, interceder, discernir, orientar y proteger tantas almas inocentes que anhelan percibir a Dios desde nuestro ejemplo de vida.
    El punto es “Todo nos es permitido, mas no todo nos conviene” Que todo nuestro quehacer de evangelizadores, gire en torno al bien comun y no en torno a justificar nuestros propios caprichos e interpretaciones de la fe o de la religion.
    EL PECADO, HA DE PERDONARSE, CON AMOR Y VERDAD

    Que Dios tenga misericordia de nosotros y nos de la fuerza para no desfallecer….

    Lo queremos mucho Fray Neson, y que Dios nos siga regalando pastores como usted y muchos que a pesar de sus fragilidades se la han jugado por Dios.

  4. Comprendo y comparto lo expuesto por Ud al respecto, sin embargo considero importante hacer eco de un sentimiento muy generalizado acerca de que, el celibato debiera ser opcional. No como una solución a los problemas derivados del comportamiento sexual y social inadecuado, sino como una posibilidad de que “interpretando el sino de los tiempos” se facilite el ingreso de los hombres casados al servicio del Presbiterado, el cual no se reemplaza realmente con el “diaconado”,y que serviría además para fortalecer la función de la familia en la evangelización y para suplir lo que si es un verdadero escándalo: como es la ausencia de la “Eucaristía” en innumerables sitios, debido a la escacez de sacerdotes.
    un abrazo,
    luishmayolo

  5. Cordial saludo en Cristo Jesús, nuestro Salvador.
    Soy un católico comprometido. Al tenor del escándalo que está pululando en la actualidad con motivo del romance del padre Alberto Cutié, con una mujer, en Miami, Estados Unidos, deseo colocar a consideración de la Iglesia Católica, estas sencillas reflexiones, que, pido a Dios, contribuyan al desarrollo libre, pacífico y consagrado de la Iglesia Católica.
    Inicialmente deseo exhortarlos a la mesura y a la oración, como lo está pidiendo el mismo padre Alberto. Es preciso separar, como lo ha realizado acertadamente Fray Nelson Medina, entre el tema de la popularidad y la vanidad de los medios de comunicación y el hecho central del misterio del Celibato. En el evangelio de san Mateo, capítulo 19, versículos 1 al 12; Jn 14, 11-14, se presenta el caso del matrimonio, y cuál sería, la situación si se produjese una separación; Jesús, responde que el matrimonio es indisoluble y que, salvo en caso de adulterio puede existir separación; seguidamente, los discípulos extrañados, ya que era, y noto que hoy también lo es, que el caso de adulterio es tan común, que es extraño controlar dicha práctica, y agregan los discípulos, que entonces es mejor abstenerse de casar; a lo que responde Jesús, que tal condición se explica desde tres características: ser eunucos, desde su nacimiento; o porque han acudido a un médico para serlo; o se han consagrado libremente al Reino de Dios, siendo eunucos “espirituales”, no genética ni quirúrgicamente, sino eunucos para servir al Reino de Dios y dedicarse completamente a la Sagrada Predicación. Considero que aquí en este texto se encuentra el núcleo del problema planteado inicialmente. Es preciso tener en cuenta que para seguir más fielmente a Dios, es necesario estar “suelto”, libre y poder renunciar a muchas cosas materiales y afectivas (Mt 10,37 al 39), pues paradójicamente, quien quiera salvar su vida, la perderá, pero quien la pierda por amor al Reino de Dios, la encontrará (Mt 16,25). Ahora bien, cuando Jesús instituyó a los Doce discípulos, escogió a los que Él, quiso (Mc 3,14), es decir, Jesús, llama a una vida de austeridad y consagración a los que Él quiere, y tampoco llama a todo el mundo para realizar la obra de la Evangelización, sino a un número necesario, en éste caso, a Doce; número que representa al Nuevo Pueblo de Dios, que le sirve y le ama.
    Las personas que se acercan a Jesús, alcanzan de Él, una identidad y autoridad tan grande como la del mismo Jesús, para Gloria de Dios Padre, en Jn 14, 11-14. Hasta aquí estamos de acuerdo en que, para seguir a Jesús, fielmente, se requiere, voluntad y abnegación; y sobre todo, elección de Jesús mismo. Entonces, ¿Qué tiene que “ver” aquí el Celibato?
    Considero, que es necesario diferenciar entre sacerdocio y apostolado. Jesús, en la última cena, dejó claro, que Él venía a desarrollar una Nueva Alianza, y la realizó con sus Doce Apóstoles (Lc 22,7-20), no con Doce Sacerdotes. Es más, Jesús, tuvo serios conflictos con los sacerdotes de su época, a tal punto que fueron los sumos sacerdotes quienes lo entregaron al suplicio de la crucifixión (Jn 18,28-19,14). Con esto, no quiero crear ningún tipo de polémica, entre el dinamismo del ser Apóstol (Enviado) y el del sacerdocio. Ahora, considero que es importante, plantearnos la pregunta: ¿Es posible armonizar apostolado y sacerdocio? Yo considero que sí; pero, deduzco que el apostolado lo puede acoger mejor el celibato; y el matrimonio, acogerlo mejor el sacerdocio. En el judaísmo, los sacerdotes se casan; en la Iglesia oriental, los sacerdotes se casan, o mejor, los casados pueden ser sacerdotes. El caso, no es justificar el matrimonio para los sacerdotes católicos. Pablo, en la primera carta a los Corintios, en todo el capítulo 7, plantea, el dilema de quedarse soltero para Evangelizar o, casarse para llevar una vida digna e igualmente comprometida con la fidelidad para gloria de Dios y de su Iglesia. También, los epíscopos (obispos) y diáconos podían casarse, para ser fieles (1 Tim 3,1-9). Y los sacerdotes católicos en general, podían casarse hasta el siglo XVI (Concilio de Trento, 1545 – 1583; el cual lo prohibió por los abusos pastorales y económicos a los que el matrimonio para sacerdotes, se vio expuesto (http://es http://es.wikipedia.org/wiki/Celibato.wikipedia.org/wiki/Celibato) En esencia, nuestra búsqueda de Dios, es lo más importante, y la mejor forma es siendo Santo, sea como Apóstol, sea como casado.
    Para concluir, considero que la opción al celibato sacerdotal se necesita reglamentar y así mismo, el matrimonio para sacerdotes se ha de replantear, de manera que se armonice, la evangelización por parte de los sacerdotes célibes, quienes tendrían la opción primera y directa para aspirar al Obispado y por consiguiente al Papado; y los sacerdotes casados, quienes tendrían que casarse antes de ser diáconos y después sacerdotes; sólo alcanzarían el orden sacerdotal, y su pastoral y bienes estarían circunscritos administrativamente a una parroquia, (El sacerdote casado sólo tendría derecho económico a un sueldo); la parroquia, no sería un bien sucesivo ni embargable y pertenecería jurídica y canónicamente sólo a la Arquidiócesis. Considero que una reglamentación de esta naturaleza, propiciaría y promovería el amor y la santidad sacerdotal; el futuro económico de los sacerdotes casados; y otorgaría toda la dignidad y proyección pastoral de los sacerdotes célibes.

  6. Con Sorpresa Veo mas de una opinion favorable al Leon Rugiente que nos acecha.
    Recordemos que ser Pastor es opcional y que escandalizar a los pequeñuelos que creen, “mas valiera no haber nacido”.Si se opta por algo en la vida hay que ser consecuente o claudicar (que pesar) sin hacerle daño al prójimo.
    Unos nacen eunucos y otros se hacen por amor al reino.
    La orden es no llevar tunica de repuesto y ha funcionado 2 mil años.
    El sarmiento separado de la vid ya no da mas fruto y al fuego.

    Sacudamos el polvo de las sandalias.

    Oremos por los pastores y que la virgen los ilumine

  7. No puedo olvidar la cara de dolor y las lágrimas que mojaban la piel ajada de una anciana, que se negaba a aceptar las terribles noticias que señalaban al padre Alberto Cutie. “Todo es un montaje, no puede ser, él no es así”. Estas actitudes de desobediencia por parte de algunos miembros del Clero, me invitan a a reflexionar sobre para lo que algunos es considerado el talón de aquiles para nuestra amada Iglesia. Celibes o no Celibes, este no es el problema, es una decisión, nadie los obliga, su voluntad es la que los motiva. Y aunque considero que este tema debería reevaluarse, actualmente, no tiene discución y por esto nuestros queridos sacerdotes, no deberían dudar de su vocación, este tema no está en discución, ellos lo saben desde un principio y no entiendo porque la polémica. Lo que si es cierto, es el daño tan grande que le hacen a las fribras íntimas de nuestra iglesia; desafortunadamente, algunos fieles, siguen el ejemplo de sus sacerdotes, y no siguen el ejemplo de Cristo Jesús. Ahora me pregunto, ¿Que opina Jesucristo de todo esto, su sacrificio fue tan mínimo como para que situaciones como estas, alejen a los feligreces de su verdad?, porque lo cierto, es que mucha gente no diferencia entre los deseos del hombre y los deseos de Dios. Un simple mortal, que atendiendo a sus instintos humanos, actua como lo que es, un hijo de Dios que aprende de sus caidas, me alejará de mis convicciones… Le creo más a lo que veo en este mundo o lo que nunca vi y que otros experimentaron, así es el misterio del amor de Jesús, dichósos los que han creido sin ver, no te he visto Jesús, ni presencie tu sacrificio, pero tu amor es la mejor prueba de mi verdad. Celibes o no celibes, Cristo sigue ahi, intacto y esto no tiene discución…

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