Ejercicios sobre el perdón: Práctica No. 4

Cuando mi corazón está amargado

InconformeRespiro profundamente, despacio. Ojalá viendo entrar y salir el aire de mis pulmones: el que sale es oscuro, el que entra es claro.

Siento mi corazón amargado y como endurecido. Lo siento frío, mudo, inaccesible. Siento la presencia de Jesús a mi lado.

Expongo mi corazón a las caricias del sol, que es Jesús. Voy recibiendo su ternura, su suavidad como el agua cadenciosa.

Caliento mi corazón con la presencia cálida de Jesús, manso y humilde de corazón.

Alabo a Jesús y veo su rostro manso, misericordioso, veo la humildad de su corazón.

Bendigo y felicito a Jesús por ser bondadoso, humilde y siento que su calor, su dulzura, su humildad, como el sol, me va penetrando, me va llenando de su suavidad y mansedumbre.

Mi corazón se abre todavía tímidamente, vacilante, a Jesús.

La Escuela del Arrepentimiento

Millones de niños han recibido alguna preparación para hacer su Primera Comunión. La mayoría de ellos no reciben sino rudimentos para preparar su primera confesión. Además, ese modo de hacer las cosas presume que los niños esperan a pecar hasta una edad que a veces es avanzada. Todo ello muestra lo poco que educamos el corazón para que aprenda a ser sincero, humillarse, confiar y recibir la gracia divina. He aquí pasos concretos para corregir tal situación.

101. A qué he venido a tu vida

Angel101.1. ¿A qué me envía Dios a tu vida? Esta pregunta debería resultar fácil de responder. La piedad del pueblo creyente nos llama “Ángeles de la Guarda” o “Ángeles Custodios.” Son expresiones bellas que indican una especie de protección o providencia de parte nuestra, y que reconocen, de vuestro lado, la necesidad de ser cuidados y provistos.

101.2. Usualmente esta providencia se mira en términos de los riesgos físicos. El cuadro típico es el del Angel que guarda de caer a uno o unos pequeños niños. Es una imagen tierna que infunde confianza y cercanía la corazón humano, pero que de ningún modo agota nuestra misión. Otras expresiones y verbos dicen un poco más: inspirar, interceder, dirigir, enseñar, y desde luego amar. Ha querido Dios que seamos expresiones de su amor, y que, en razón de este amor, realicemos toda otra obra.

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Ejercicios sobre el perdón, 17

La Envidia
(Lucas 15, 25-32; 18,9-14; Mateo 20,1-16; Hechos 13,44-45; Génesis 37,1-36)

SuspicaciaLes invito a reflexionar sobre uno de los sentimientos más comunes entre hombres y mujeres, la envidia. Nos ayudaremos del evangelista Lucas, en su extraordinaria parábola del “hijo pródigo”, que tiene dos partes bien diferenciadas. Examinemos la segunda parte, a partir del v. 25, donde se nos muestra la relación del hermano mayor con el menor y con su padre. El hermano mayor al ver la alegría de su padre por el regreso del hermano, se enfureció. Un poder oscuro salió a luz desde las profundidades de su endurecido corazón: brotó la envidia. De repente apareció la persona resentida, orgullosa, severa y egoísta, que estaba escondida dentro de él, y con los años se había hecho todavía más fuerte y poderosa.

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Marcha contra las FARC

secuestroEsta es una breve nota para indicar que como creyente, como sacerdote y como colombiano me uno a la marcha de protesta que tendrá lugar en muchas partes del mundo el próximo 4 de febrero. Se trata de denunciar públicamente la violencia sistemática de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a quien la Unión Europea, los Estaods Unidos de América y sobre todo el sentido común le han reservado un adjetivo grave, tan grave como las cosas que ellos han hecho a mi país: las FARC son una organización terrorista cuyas prácticas son una afrenta contra la Humanidad. Más claro no puedo decirlo.

Sin embargo, esta postura mía no es un aval a los enemigos de las FARC. La maldad de las FARC no hace buenas las torturas de tantos grupos paramilitares, en algunos casos con conocimiento y aprobación de las Fuerzas Militares. Los secuestros de las FARC no hacen buena la injusticia social que padece mi país, y que padecen tantos otros países, en la distribución de la riqueza y también de las oportunidades para millones de sus ciudadanos. La crueldad de las FARC no hace bueno el egoísmo con el que muchos colombianos quisieran que desapareciera la guerrilla solamente para consagrarse más de lleno a su exclusivo interés, sin una brizna de compasión o solidaridad.

Dicho de otro modo: repugna el comportamiento de las FARC pero no debe ser tratado como el único problema de mi país. En Colombia, lo mismo que en tantos otros sitios del mundo, necesitamos una mirada amplia para reconocer que las huellas del dolor son muchas y el clamor por la injusticia tiene muchos tonos. Y necesitamos también mucha sensatez para que sea el amor por el bien, sobre todo el bien de los más postergados y más pequeños, el que brille. Bien sabemos que cuando algo tiene éxito le resultan muchos padrinos que tratan de justificar sus propias agendas. Lo importante es que, lejos de todo espejismo, demos el 4 de febrero un paso adelante con sabiduría, con valor y con espíritu de fe.

100. Eres un Afortunado

100.1. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Muy feliz100.2. Hay un texto que con razón te hace estremecer; allí donde la Carta a los Hebreos resume en cierto modo el límite de la grandeza de la fe de tus antecesores: «En la fe murieron todos ellos, sin haber conseguido el objeto de las promesas: viéndolas y saludándolas desde lejos y confesándose extraños y forasteros sobre la tierra» (Heb 11,13).

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