Alimento del Alma: Textos, Homilias, Conferencias de Fray Nelson Medina, O.P.
En el contexto de una predicación para la Renovación Carismática, el Espíritu comienza a llamar a la gente para que asuma con fuerza, con valor, con alegría el encargo de dar a conocer a Jesucristo. Una parte de la oración está en lenguas.
Un par de preguntas básicas ayudan a situar la mente cuando se trata de cómo iniciar una familia o cómo sanarla según el plan de Dios.
Tres metas concretas se ofrecen aquí para aquellos laicos que quieren vivir su bautismo y no sólo recordarlo. Estas metas son: volver a las fuentes, ser pescadores de hombres y emprender resueltamente un camino de santidad.
El lema de la Renovación Carismática Católica en Quito lo podemos considerar como punto de partida para un análisis juicioso del presente y futuro de un Movimiento Católico que ha brindado fuerza y fuego a la Iglesia, como un Nuevo Pentecostés.
Originalmente esta fue una homilía (¡de una hora de duración!), predicada en la Parroquia de N. S. de Fátima en Quito, el viernes después de Epifanía. Sobre la base del texto de san Juan sobre los “tres testigos” sigue una exposición de cómo el testimonio de Dios vence sobre las voces engañosas del demonio, el mundo y la carne.
El solo asomarnos a la realidad más preciosa de nuestra fe, que somos hijos de Dios, produce inmensa alegría, y una esperanza irresistible y contagiosa. Esta alabanza incluye oraciones en lenguas, y tuvo lugar en el grupo “Jesús, mi Divino Redentor.”
El capítulo primero de la Carta a los Efesios contiene un himno precioso al plan de Dios. De él aprendemos cuánto significa llamarnos y ser hijos de Dios. El versículo clave en esta meditación es Efesios 1,5.
El sosiego de Dios, es una especie de preludio de la armonía que sólo Él puede crear. Esta alabanza incluye oración en lenguas, y tuvo lugar en el grupo “Jesús, mi Divino Redentor.”
Aliados nuestros en la adoración, los Santos Ángeles son invitaciones vivas a servir a Dios con todo nuestro ser. Esta alabanza incluye oración en lenguas, y tuvo lugar en el grupo “Jesús, mi Divino Redentor.”