Aprender a interceder en la Escuela de Maria

Interceder es:

1. Ponerse entre dos que no se entienden.
2. Sabiendo que eso trae consecuencias, y habrá un precio qué pagar.
3. Porque uno busca la gloria de Dios con inmenso amor, y por encima de todo.
4. Y en humilde escucha está dispuesto a recibir el plan de Dios.

Por eso interceder es subirse a la Cruz, no por heroísmo basado en vanidad, sino por un llamado del amor, que tiene su hora.

Ejemplo sublime de intercesión es María, especialmente en la hora oscurísima de la Cruz, en la cual la fe brilla de modo incomparable.

La Palabra entre nosotros

“La Palabra Entre Nosotros existe para ayudar a los creyentes a leer, meditar y entender las Sagradas Escrituras y proveer ayuda práctica y eficaz para vivir la fé católica… Cada uno de nosotros puede tener una relación de amor y amistad con el Hijo de Dios.”

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El libro de oracion por excelencia

“Hoy quisiera comentar el libro de oración por excelencia, el libro de los Salmos. Los ciento cincuenta cantos que lo componen, con distintas temáticas y géneros literarios, expresan la riqueza de la experiencia humana. Dos ideas centrales pueden resumir esa amplia gama de sentimientos, la súplica y la alabanza, ambas profundamente unidas…”

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VII-F. Ejemplos biblicos de oracion

275. Vosotros rezad así: ¡Padre nuestro del cielo! sea respetada la santidad de tu nombre, venga tu reinado, cúmplase tu designio en la tierra como en el cielo; danos hoy el pan de cada día, perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes sucumbir en la prueba y líbranos del maligno. (Mt 6,9-13)

276. Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre. (Lc 1,42)

277. María dijo: Proclama mi alma la grandeza del Señor, mi espíritu festeja a Dios mi salvador, porque se ha fijado en la humildad de su esclava y en adelante me felicitarán todas las generaciones. Porque el Poderoso ha hecho proezas, su nombre es sagrado. (Lc 1,46-49)

278. Muy de madrugada se levantó, salió y se dirigió a un lugar despoblado donde estuvo orando. Simón y sus compañeros salieron tras él y cuando lo alcanzaron, le dijeron: Te están buscando todos. (Mc 1,35-37)