Superar la interpretación materialista de Mateo 25

Superar la interpretación materialista de Mateo 25.- En este pasaje Cristo está proponiendo el mismo tipo de amor que, de modo explícito, propone en otros lugares de Mateo, o del Nuevo Testamento: es el amor característico del Padre Celestial, que no depende de la respuesta sino de la necesidad.

Gratitud hacia la Iglesia Católica en Bolivia

Quiero expresar desde este lugar mi agradecimiento a la Facultad de Teologìa “San Pablo” de Cochabamba, Bolivia, por invitarme a participar como ponente en el Simposio Teológico “Misericordiosos como el Padre,” celebrado hace breves días en ese lugar.

Y quiero poner a disposición de todos las reflexiones que allí pude ofrecer.

LA GRACIA del Lunes 3 de Octubre de 2016

Ayudar siempre supone un riesgo, en este Año de la Misericordia pregúntate si el temor a que te hagan daño es más grande que el amor que sientes por la persona en necesidad.

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LA GRACIA del Miércoles 14 de Septiembre de 2016

Aún hay tiempo para que en este Año de la Misericordia entremos en el corazón de Cristo, nos dejemos tocar por su amor, seamos dóciles a su voz y le digamos que sí nos unimos a Él.

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LA GRACIA del Domingo 17 de Julio de 2016

DOMINGO XVI DEL TIEMPO ORDINARIO, CICLO C

Pidamos al Señor acoger a Cristo en nuestro hermano que muchas veces padece necesidad aunque no se note.

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Jubileo sacerdotal de la Misericordia

[Predicación para el clero de la Diócesis de Riohacha, en la Guajira, Colombia.]

Introducción

1. La misericordia es ante todo una mirada. Atención al logo del Jubileo 2016.

2. Juan Pablo II en Pastores dabo vobis: la caridad pastoral como centro unificador de la vida del sacerdote.

3. El Don del Espíritu Santo en Hechos 3:
+ Nos da nuevos ojos frente al mendigo
+ Nos da nueva riqueza: “oro ni plata yo tengo”
+ Elimina la competencia por los primeros puestos

La novedad de la misericordia

1. Nuevo sentido de la justicia. La gran pregunta: ¿Y los que no han recibido?

2. Nuevo sentido de la verdad: ¿cómo se ve el Evangelio desde las periferias? La experiencia de la gratuidad.

3. Nuevo sentido del amor: crear el bien, cuidar el bien, restituir el bien

Una Iglesia en salida

1. Necesidad de conversión en todos, como historias personales.

2. Necesidad de conversión eclesial o institucional: renovación en la autoridad, la fraternidad y el servicio.

3. Relación con la Nueva Evangelización, la Inculturación y la Evangelización del Amor.

Las indulgencias

Con motivo del Año de la Misericordia se escucha mucho la palabra “indulgencia.” ¿Qué significa y por qué es importante en la vida de un católico?

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Digamos dos definiciones:

Brevemente: indulgencia es la supresión de la pena debida por los pecados que la Iglesia otorga a quien realice determinadas acciones.

La indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos. (cfr. Mt 16, 19). El perdón de la confesión no elimina TODAS las consecuencias del acto de pecar.

Tipos de indulgencias: Las indulgencias se agrupan en dos clases: Indulgencias plenarias: borran todo resto de pecado dejando el alma dispuesta para entrar inmediatamente en el cielo. Indulgencias parciales: borran parte de la pena que los pecados cometidos reclaman.

Condiciones para conseguir una indulgencia plenaria: Esta indulgencia tiene un valor muy grande y requiere varias condiciones:

+Los mismos requisitos que en las indulgencias parciales:
. realizar la acción que la Iglesia premia con esta indulgencia.
. estar en gracia de Dios antes de acabar la obra premiada.
. tener intención al menos general de ganar la indulgencia.

+ Sólo se puede ganar una indulgencia plenaria cada día.

+ Tener la disposición interior de un desapego total del pecado, incluso venial.

+ Confesarse, al menos veinte días antes o después de realizar la acción premiada (sin olvidar que hay que estar en gracia de Dios antes de acabar la acción). Una misma confesión puede servir para ganar varias indulgencias plenarias.

+ Comulgar, en ese mismo periodo de tiempo.

+ Rezar por las intenciones del Papa un Padrenuestro y un Avemaría, u otras oraciones. Debe hacerse también en esos días.

[Adaptado de Catholic.net]

Mensaje del Papa Francisco para el 1 de Enero de 2016

Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 1 de enero 2016

Vence la indiferencia y conquista la paz

1. Dios no es indiferente. A Dios le importa la humanidad, Dios no la abandona. Al comienzo del nuevo año, quisiera acompañar con esta profunda convicción los mejores deseos de abundantes bendiciones y de paz, en el signo de la esperanza, para el futuro de cada hombre y cada mujer, de cada familia, pueblo y nación del mundo, así como para los Jefes de Estado y de Gobierno y de los Responsables de las religiones. Por tanto, no perdamos la esperanza de que 2016 nos encuentre a todos firme y confiadamente comprometidos, en realizar la justicia y trabajar por la paz en los diversos ámbitos. Sí, la paz es don de Dios y obra de los hombres. La paz es don de Dios, pero confiado a todos los hombres y a todas las mujeres, llamados a llevarlo a la práctica.
Continuar leyendo “Mensaje del Papa Francisco para el 1 de Enero de 2016”

La otra Navidad

La fiesta de Navidad trae la oportunidad de reuniones familiares; todavía mejor, para algunos cristianos es un momento fuerte de encuentro con la humildad, la ternura y la bondad de Dios. El solo hecho de renovar el afecto con nuestros parientes y amigos es algo muy valioso; todavía mejor si hemos recuperado el sentido de la Navidad y hemos aprendido a descubrir en Cristo nuestro gran regalo!

Los que hemos sido bendecidos con tanto amor no podemos olvidarnos de los que todavía se sienten lejos lejos de su familia, lejos de sus amigos, o lejos de algún corazón que pudieran llamar realmente cercano. Es mayor el drama de los que no han descubierto a Cristo; peor aún la condición de los que no quieren saber de Cristo. Nosotros, que hemos recibido tanto, elevamos nuestras oraciones por aquellos que todavía ignoran lo que Dios les ha preparado y lo que ya les ha ofrecido.

Pido entonces que en esta Navidad señalada por el Año de la Misericordia nuestro corazón se vuelva compasivo hacia aquellos que no conocen el verdadero Regalo aquellos que ignoran, omiten o rechazan a Cristo.

Que nuestro testimonio y nuestras oraciones ayuden a crear puentes y avenidas a la gracia divina para que muchos más sepan cuánto han sido amados.

Amén.