Retiro de la Renovación Carismática en la Casa de Jesús – Lima, Perú.
“Hoy estarás conmigo en el paraíso.”
Alimento del Alma: Textos, Homilias, Conferencias de Fray Nelson Medina, O.P.
Retiro de la Renovación Carismática en la Casa de Jesús – Lima, Perú.
“Hoy estarás conmigo en el paraíso.”
Retiro de la Renovación Carismática en la Casa de Jesús – Lima, Perú.
“Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen.”
Cristo es condenado en un cruce de espantosas incoherencias: Pilato lo sentencia sabiéndolo inocente; las autoridades judías lo acusan de proclamarse rey mientras ellos declaran al César como su rey, renegando así del Reinado de Dios.
Cristo, asumiendo el lugar del cordero, frena el mal; y asumiendo el lugar del esclavo, abre caminos nuevos a la bondad.
La Semana Santa es como una sinfonía en tres pentagramas simultáneos: dolor del mundo, dolor de Cristo y amor de Cristo. Su amor dejo escritos dos mensajes en las llagas de su cuerpo: lo grave que es el pecado y lo inmenso que es el perdón de Dios.
Algo que cerró y selló los oídos de los fariseos contra Cristo fue que se sintieron firmes en su propio grupo. A veces escuchar al Señor requiere soledad: buscarle y oírle como si nadie más le pudiera oír.
“Justo” indica, en el Antiguo Testamento, lo que nosotros llamaríamos un santo. Pero los enemigos del justo no son los injustos sino los cínicos.
La justicia mira las cosas como son; la misericordia, como llegan a ser cuando Dios hace una nueva creación.
El amor de Dios será más tuyo cuanto más lo entregues a los demás.
El río que brota del templo es señal de cómo las bendiciones de Dios llegan vivas y victoriosas, fecundas y múltiples, al corazón de los creyentes.
Isaías anuncia un nuevo paraíso, propio de la nueva creación. La fe nos abre acceso a esa realidad no desde la ilusión sino desde la cruz gloriosa.
Marx, Nietzsche y Freud, cada uno a su modo, enseñaron al mundo el arte espantoso de no arrepentirse. Urge detenerlos con obras y palabras para que crezca el triunfo del amor.
El corazón de la samaritana es hábil para protegerse y para huir; pero el amor de Cristo marcará un antes y un después en la vida de ella.
No endurezcais vuestro corazon. La dureza de la vida se vuelve dureza del entendimiento y sordera del corazón. El poder del Señor, su cayado, quebranta la vida para renovarla.
La vigorosa profecía de Isaías enseña varias cosas: (1) Dios habla a veces en un lenguaje fuerte; hay que devolverle el derecho de sacudirnos. (2) Después de la conversión hay que “aprender” es decir, la inteligencia tiene su papel. (3) La conversión sucede en un horizonte de esperanza.
José, padre virginal de Cristo, nos invita reflexionar sobre las peculiaridades del amor paterno, en contraste con el amor propio de las madres.