ESCUCHA, Triduo Eucaristico, 3 de 3, La Sangre

[Predicación en el Monasterio “Madre de Dios” de las Dominicas Contemplativas en Baena, España.]

* ¿Por qué en la antigüedad las alianzas se sellaban siempre con sacrificios, o con sangre? Para indicar el grado de compromiso de los implicados.

* ¿Por qué era tan importante para Salomón celebrar matrimonios con mujeres de tan variadas tribus y naciones? porque pensaba que al mezclarse los linajes de sangre se garantizaba una paz más firme.

* ¿Qué impactó más a los antiguos paganos cuando florecía el cristianismo? Dos cosas, que ambas implican entrega de la vida: la vocación virginal y el martirio.

* La sangre es el lenguaje del amor sin reservas; es el lenguaje de la vida que se dona totalmente.

ESCUCHA, Triduo Eucaristico, 2 de 3, Anticipaciones en el Antiguo Testamento

[Predicación en el Monasterio “Madre de Dios” de las Dominicas Contemplativas en Baena, España.]

Cuatro escenas del A.T. nos ayudan a descubrir las riquezas del sacramento eucarístico.

* Los sacrificio de comunión estipulados en el Deuteronomio nos hablan de la unidad entre nosotros y con Dios.

* El maná caído del cielo nos recuerda la providencia divina, de quien todo lo bueno hemos de esperar.

* El banquete prometido por Isaías anuncia la gratuidad y la universalidad del don con que Dios nos alimenta.

* Y sobre todo, el cordero pascual nos enseña que esta es una comida de familia, que trae libertad y que nos pone en movimiento.

ESCUCHA, Triduo Eucaristico, 1 de 3, Accion y Presencia

[Predicación en el Monasterio “Madre de Dios” de las Dominicas Contemplativas en Baena, España.]

La Eucaristía es en primer lugar “acción,” acto, evento, suceso: no es repetición ni representación sino unión de la Iglesia, más allá del tiempo y el espacio, con el único sacrificio redentor, el de Cristo en la Cruz.

Pero los testimonios, ya desde la Iglesia Antigua, muestran que los cristianos entendían que había una presencia permanente, en el sentido de que el pan no vuelve simplemente a ser pan ni siguió siendo pan, al ser “eucaristizado.” Tal es la raíz remota de la adoración eucarística.