[Predicación en la Asamblea de la Renovación Carismática, Región Andalucía Occidental, 2012.]
Tema 3 de 3: Con espíritu firme.
* Si hay algo que pronto descubre el que se propone algo bueno es que el bien es arduo y la perseverancia en el bien es virtud escasa en la raza de Adán.
* El Antiguo Testamento muestra con abundancia de ejemplos cómo el pueblo que Dios eligió es pronto para aceptar los mandamientos pero también demasiado ágil en quebrantarlos y luego en endurecerse ante la palabra que le reconviene.
* El problema no está en que uno no vea el bien–eso es posible para una conciencia despierta o para todo el que oiga la proclamación de la Ley de Moisés. El problema es la falta de alegría, de gusto en el bien, de certeza de que aun lo malo es bueno, si se enfrenta buscando con sinceridad el bien mayor.
* Por eso la antigua alianza termina fallando: porque el puente que Dios quiere tender con el hombre se sostiene del lado de Dios pero no es firme del lado del hombre.
* Esta situación cambia para mejor con la Nueva Alianza. Abierto el camino por la Cruz de Cristo, el don del Espíritu Santo se asienta en nosotros y vive su misterio en nosotros. No nos suplanta sino que nos hace alcanzar la plenitud de lo que podríamos ser y estamos llamados a ser. Y al obrar así, el puente ya está firme y funciona, porque Dios está a ambos lados.