Parejas renovadas en Cristo, 2 de 2, Conocer al hombre y conocer a la mujer

[Encuentro con parejas organizado por la Fundación MOCE. Octubre de 2014.]

Tema 2 de 2: Conocer al hombre y conocer a la mujer

* Todo corazón humano es peregrino de algunas búsquedas fundamentales: la verdad, la bondad, la belleza y la unidad. Son búsquedas porque son realidades que queremos cerca nuestro. Nadie quiere que le mientan, ni que le hagan daño; no queremos lo desagradable ni entrar en contradicción que nos debilite.

* ¿Hay búsquedas específicas del corazón del varón? Sí las hay. Hay diferencias entre el cerebro masculino y el femenino.

(1) El cerebro masculino conecta con mayor abundancia el lóbulo frontal (razonamiento) y el occipital (visión). esto predispone al varón a centrarse en metas y buscar los medios para conseguirlas.

(2) El cerebro femenino conecta con mayor fuerza los dos hemisferios, izquierdo y derecho, de modo que, en general la experiencia vital de la mujer es mucho más integral, entre lo sensible, lo emocional, social, intelectual.

* El varón se fija metas y se concentra en ellas, pero sus posibilidades y fuerzas no son infinitas. La distancia hasta llegar le impacienta y desanima. Por ello, en expresión bíblica necesita una “ayuda adecuada” en la mujer, en la que busca particularmente apoyo, descanso y alegría.

* Cristo bendice el corazón del varón haciéndolo más compasivo y sacándolo de su tendencia a utilizar personas y recursos para sus fines.

* Cristo bendice el corazón femenino recordándole su dignidad irrenunciable de persona humana, y mostrándole que no puede pagar cualquier precio por cumplir su deseo de acompañar y estar acompañada.

*La pareja ha de descubrir en cristo su fortaleza y su mejor aliado.

Parejas renovadas en Cristo, 1 de 2, ¿Sobre qué bases construyes tu hogar?

[Encuentro con parejas organizado por la Fundación MOCE. Octubre de 2014.]

Tema 1 de 2: ¿Sobre qué bases construyes tu hogar?

* El estrepitoso derrumbe y luego demolición de unas torres hermosas, pero mal construidas, nos obliga a pensar en los materiales y las bases que suelen llevar las parejas al comenzar un nuevo hogar. Solemos preocuparnos mucho de las apariencias pero la realidad termina imponiéndose, y lo que no tiene base cae al final.

* Los tres principales errores de fachada y de apariencia son:

(1) Muchas parejas se preparan, no para una vida, sino para momentos; típicamente los momentos que son idealizados en las publicaciones que miran al mercado de las bodas y planes de luna de miel.

(2) El individualismo: cada uno piensa demasiado en sus derechos y en todo lo que no quiere dejar de su soltería. El que quiere ser casado y soltero a la vez, termina no siendo ni lo uno ni lo otro, sino separado.

(3) Dios no va en primer lugar. Es sólo una prioridad cuando hay crisis.

Necesitamos renovar nuestra mente para renovar nuestro corazón y nuestra vida.