Los siete ángeles del libro de Tobías

Buenos días, fray Nelson. La pregunta existente en nuestra casa surge leyendo del libro de Tobias 12:15; y es ¿cuáles son los siete (07) ángeles que están ante la gloriosa presencia del Señor?. Agradecemos tu maravillosa orientación. Dios te bendiga. – LJGC.

* * *

Siempre que recibo una pregunta me pongo a pensar qué podría servir de respuesta. Por ejemplo; ¿qué se responde a esta pregunta? Si alguien me pregunta: “¿Quiénes eran esos señores que llegaron anoche a la cena?,” ¿qué espera que le diga? Probablemente su oficio, su relación con los demás invitados, o quizás sus nombres?

Sobre lo que nos dice el libro de Tobías podemos afirmar muy poco. La Iglesia ha dejado muy en claro que el uso de nombres distintos de los que aparecen en la Biblia es un error fundamentalmente porque no se sabe a quién se está invocando [véase por ejemplo este artículo]. Ninguna autoridad o revelación privada puede cambiar esta disposición de la Iglesia porque si alguien dice haber tenido una revelación que indica unos nombres y luego otra persona dijera que los nombres son otros nada saldría de ahí sino solo confusión y daño.

Así que la respuesta no puede consistir en nombres.

En cuanto al oficio de los ángeles, no conocemos tampoco distinciones claras. La distribución clásica en nueve coros nos ayuda a ver cuántos lugares dentro de la creación y dentro del plan de salvación están colmados de la presencia de los ángeles pero de ningún modo se puede considerar como una especie de “mapa” del cielo.

En cuanto a su relación con nosotros, no sabemos más de lo que afirma la Escritura: que contamos, por bondad de Dios, con el auxilio de nuestros Ángeles Guardianes, y que ha habido intervenciones específicas de los arcángeles Gabriel, Miguel y Rafael.

Según todo esto, uno ve que lo importante no son los nombres de los ángeles, ni qué misiones específicas tienen, sino sólo el valor que pueda tener ese número, claramente simbólico: siete. Y ese número indica plenitud o totalidad en la Sagrada Escritura. Así que el significado del pasaje citado podría ser: “De la inmensa gloria y majestad de Dios, que brilla en el Cielo, y que se muestra con particular esplendor en los espíritus que ha creado, he sido enviado yo…”

Los ángeles y las mentiras de la Nueva Era

“La New Age (Nueva Era) ofrece una angelología radicalmente diferente a la doctrina Bíblica Católica. Vemos esto claramente cuando salió a la venta en mayo de 1996 el primer tomo de Los grandes temas del Esoterismo llamado: “los ángeles, hijos de Dios y hermanos del hombre”. Para el cristiano, no hay nada tan distinto, tan opuesto a su fe que el esoterismo mezclado con los ángeles de Dios. Otro ejemplo típico, esta en el libro “ángeles” del ya fallecido teósofo C. W. Leadbeater donde promueve la creencia en los ángeles, y a la vez la reencarnación y viajes fuera del cuerpo…”

Click!

Hermosa oración a San Miguel Arcángel

¡San Miguel, el Arcángel! glorioso Príncipe, el jefe de las huestes celestiales; guardián de las almas de los hombres; vencedor de los ángeles rebeldes! ¡Qué hermoso eres, con tu armadura. ¡Nosotros te amamos, querido Príncipe del Cielo!

Nosotros, tus felices devotos, anhelamos disfrutar de tu protección especial. Pedimos a Dios tener parte de tu coraje robusto; orar para que podamos tener un amor fuerte y tierno para nuestro Redentor y, en todo peligro o tentación, ser invencibles contra el enemigo de nuestras almas.

¡Abanderado de nuestra salvación! Quédate con nosotros en nuestros últimos momentos y cuando nuestras almas dejan este exilio terrenal, llévanos con seguridad al trono del juicio de Cristo, y que nuestro Señor te mande llevarnos rápidamente al reino de la felicidad eterna.

Enséñanos a repetir el grito sublime: “¿Quién como Dios?”

Amén.

Ángeles de Dios

20141130

Ángeles de Dios,
que en las alturas del Cielo
veneráis al Altísimo,
y en los caminos de la Tierra
sois ministros de su Providencia
para con los hombres:
haced nuestros corazones
semejantes a los vuestros:
prontos a la alabanza de Dios
y al servicio de nuestros hermanos.
Por Jesucristo, Nuestro Señor.
Amén.

Cánticos Cristológicos, 3 de 4, Colosenses

[Retiro de Semana Santa en el Convento de Santo Domingo, en Bogotá, versión 2014.]

Tema 3: Cristo en Colosenses 1,12-20

* En la Grecia antigua se juntaban dos mundos: Oriente y Occidente. En ciudades como Colosas se multiplican los predicadores y de la misma forma abunda todo tipo de filosofías y religiones. Algunas de estas teorías hablan de fuerzas y misterios, y usan un lenguaje complejo, a la vez que usan símbolos que apuntan las dimensiones trascendentes del cosmos.

* Los hombres de aquella época, lo mismo que nosotros, terminan por preguntarse qué o quién gobierna el mundo. Están convencidos de que las fuerzas en juego no son solamente las que alcanzan a ver nuestros ojos. Sus mentes se abren a un mundo espiritual en que hay muchos poderes y muchos señores.

* Pablo ve en esa situación una oportunidad para afirmar la primacía de Cristo: Él es el Señor, de TODO, lo que vemos y lo que no vemos, lo que conocemos, y lo que no conocemos, incluso más allá del alcance de nuestra imaginación.

Cualidades y cantidades en hombres y en ángeles

Mi pregunta viene específicamente en este fragmento de un libro del P. Ovila M.: “Las personas que constituyen la especie humana, difieren por la materia y por sus relaciones cuantitativas; Por otro lado, los Ángeles, buenos y malos, que son también personas y cada uno de los cuales constituye una especie única, difieren por sus relaciones cualitativas.” ¿Cuáles son las relaciones cuantitativas y cualitativas? – C.V.A.

* * *

Parece bueno el contenido del libro, a juzgar por las citas que me transcribes.

Esa pregunta tiene que ver con los conceptos de materia y forma, conceptos aristotélicos, que la Iglesia, después de Santo Tomás de Aquino, aplica a la realidad del ser humano, definido como unidad substancial de cuerpo y alma.

Si uno se pregunta qué hace distinta a una persona humana de otra, sabiendo que la diferencia no puede venir de la especie, porque ambos son de especie humana, resulta evidente que la causa de la diferencia no está en alguna CUALIDAD esencial, que estaría en el alma, porque, en esencia, todos somos simplemente miembros de la especie humana. La diferencia debe provenir entonces del cuerpo: son las proporciones, duraciones y distribuciones de los elementos materiales y corporales los que nos hacen distintos, en concordancia con la historia personal de cada uno de nosotros. Cuando se habla de proporciones, duraciones y distribuciones se puede decir que se está hablando de CANTIDADES. Por eso se dice, en filosofía clásica, que las diferencias entre seres humanos no son esencialmente cualitativas sino cuantitativas.

Si ahora pasamos al caso de los ángeles, de inmediato se nota una diferencia con los seres humanos: ni los ángeles buenos, ni los malos, tienen cuerpo. No hay realidad corporal en ellos. No pueden ser distintos unos de otros en razón de proporciones, duraciones o distribuciones, porque todo ello es propia de la materia. Entonces un ángel no se diferencia cuantitativamente de otro. pero sí son distintos. Entonces deben ser distintos cualitativamente, o lo que es lo mismo, aunque ambos son ángeles, no son de la misma especie: las cualidades esenciales de uno y de otro deben ser diferentes porque si no, ellos no serían diferentes.

Esto es lo que quiere decir que en los seres humanos las diferencias son cuantitativas, y entre los ángeles son cualitativas.