En tierra extranjera, y aún en la propia tierra, todos pasamos por momentos en que necesitamos una luz de esperanza. Hace poco el Señor me regaló esta tonada que hoy comparto con gusto para todos.
Balada de la Esperanza
No estoy en mi mejor momento
pero eso no impide cantar:
la sangre corre por mi corazón,
encima de estas nubes brilla el sol,
¡yo sé que mi Señor vendrá!
Y cuando llegue, yo le cantaré;
por qué se demoró preguntaré,
pero con alegría,
con una sonrisa,
en su Corazón al fin descansaré.
Si quieres escucharla cantada, con un simpático arreglo electrónico, haz click aquí (alrededor de 395 Kb). Necesitarás el programa Real Audio para oírla. Si no tienes instalado ese programa, hay una versión gratuita que se consigue en http://www.real.com.
Bendiciones!