Nuestro servicio de evangelización se ha visto interrumpido esta semana. Es bueno saber por qué. En un día típico se están descargando cerca de 400 Gb de homilías de mi sitio web, que está exactamente para eso: para servir a todos.
En palabras sencillas, lo que ha sucedido es que el servidor colapsó y que hubo que buscar otro sistema para seguir ofreciendo nuestros servicios. Hoy no voy a hablar de dinero pero todos saben que eso implica nuevos gastos. Esa parte no nos preocupa. Sencillamente es hermoso que haya tanta hambre de la Palabra de Dios.
Gracias a todos los que nos han apoyado con su oración y palabras de afecto.