Hay una palabra que llena mi alma;
hay una palabra que me hace cantar;
hay una palabra que Cristo oraba:
de noche y de día, Cristo repetía: ¡Abbá!
1. Hay una palabra que vence al pecado
y que prevalece frente a la tentación;
todo cambia cuando te sabes amado
y cuando recuerdas que tu Padre es Dios.
2. Hay una palabra que vence a la duda
y que prevalece frente a la confusión;
si la necesitas, tan sólo escucha:
es el Nombre eterno de tu Padre Dios.