3 respuestas a «Las Preguntas nacen de las Convicciones»

  1. Interesante planteamiento. Para donde quiera ir el hombre, no puede evitar encontrarse con sus creencias, con algo que está mas allá de lo físico. Es curioso, Algunos científicos se presentan como una nueva raza para dejar atrás el oscurantismo de las religiones, y sin embargo, también están basados en sus propias creencias.

  2. Muy interesante e importante este dialogo, que espero participemos, a mi me cayo como anillo al dedo, y que bueno porque nos pidemos preguntar, yo tengo mil preguntas, mil cosas que quisiera saber. Bueno en fin espero nos leamos, espero participemos, todos Bendiciones

  3. Son importantes las reflexiones que se hace con respecto a la capacidad que tenemos los seres humanos para hacernos preguntas. Estas preguntas surgen cuando nos enfrentamos a un problema. El problema viene a ser como el motivo que pone en marcha el pensamiento y dirige el proceso reflexivo hacia la búsqueda de la solución adecuada.

    En la solución de un problema la persona se vale de su experiencia y conocimiento para aclarar situaciones difíciles que requieren un nuevo enfoque. Entonces, el problema tiene un carácter subjetivo, ya que no existe aparte de quien lo experimenta.

    Ahora, los problemas pueden ser de tipo práctico o de tipo intelectual. En los primeros la persona necesita actuar, en los segundos la persona necesita comprender.

    Hablo de problema, porque es precisamente ante estas situaciones cuando las personas nos cuestionamos y cuestionamos a los demás para encontrar una solución a aquello que nos inquieta, nos admira, que necesitamos aclarar, a lo que se encuentra dentro del marco de nuestra propia experiencia.

    En lo que tiene que ver con el aspecto religioso sería muy interesante hablar de la experiencia religiosa en el ámbito personal, explorando no sólo las cualidades, sino también el significado. Es decir, no quedarse sólo en el por qué de determinada experiencia, sino hacerse la pregunta: cómo. Cómo es mi enojo corporal, afectivamente, interpersonal y socialmente, en el contexto de mis creencias religiosas, etc. Aquí surgirían infinidad de preguntas.

    Es que la experiencia personal no está al margen de la experiencia religiosa, sino que debe existir un punto de integración, porque de los contrario, los seres humanos estaríamos divididos, lo cual ocurre con bastante frecuencia y da origen a una fe sin vida, a una fe de creencias que está lejos de lo que vivimos día a día, a una fe que no debe agradar a Dios, porque es falsa. Dios no está separado de la vida, sino que precisamente es ahí donde Él nos sale al encuentro.

    Es demasiado amplio este tema. Me parece que daría pie a una discusión muy rica, amplia y profunda.

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