“Consideremos el notable fenómeno del transgenerismo. Un trastorno de identidad de género que afecta a un minúsculo número de estadounidenses se ha convertido en un objeto de controversia culturalmente polarizador. Su influencia –captando la atención pública y exigiendo cambios sociales- ha sido extraordinaria, desproporcionada en relación al número de personas insatisfechas con su género. Mientras que la izquierda política ha hecho suya totalmente la agenda transgénero como un “derecho civil” al que sólo se oponen los intolerantes y las personas llenas de odio, mucha gente ve el movimiento como un ataque concertado contra los usos y costumbres tradicionales, un asalto indisimulable a las normas, las costumbres y la moralidad convencionales…”
Haz clic aquí!