Apartes de un escrito de Santiago Vidal Roldán, seminarista de la Arquidiócesis de Cali:
Adoptar no es un derecho de los adoptantes sino de los niños, que en justicia deben recibir lo que por las causas que sean, les fue impedido tener: Un papá y una mamá. Esto lo afirmo en materia de justicia y de derecho, ya que se debe dar a cada quien lo que corresponde.
¿Alguien se ha detenido a pensar en los niños? Los niños no son mascotas, trofeos o un privilegio para satisfacer caprichos.
La “paternidad-maternidad” homosexual es inviable, incluso físicamente. Hasta los dueños de la marca “Dolce y Gabanna” han manifestado su oposición a permitir la adopción de niños por parte de estas personas.
No seamos borregos y veamos el trasfondo del lobby gay que pretende destruir la familia, que es la base de la sociedad.