Cristo Vivo. Retiro con Frailes Dominicos del Vicariato del Ecuador, en Enero de 2012. Tema 4: Kairós.
* Al comienzo de su misión, Jesús anuncia que “el tiempo se ha cumplido.” San Pablo habla de la llegada del Hijo de Dios como “plenitud de los tiempos.” ¿Qué noción de tiempo hay aquí?
* En griego bíblico puede hablarse del tiempo como “chronos” o como “kairós;” el primero es más cuantitativo, objetivo, repetitivo, impersonal; el segundo es cualitativo e intensamente personal: habla de lo único e intransferible de las oportunidades y circunstancias de cada quien.
* Quienes miran el tiempo como chronos luego intentan escapar de la prisión de lo repetible señalando un “destino” que vendrá a romper el círculo de repeticiones. La Biblia presenta, en cambio, a un hombre libre y responsable, y a un Dios cercano y providente. Lo propio de nuestra fe no es aguardar a que suceda lo inevitable, sino ver, como en ecografía , qué se está gestando y discernir el paso de Dios en ello.
* Ser profeta no es, entonces, haber visto el final de una película y luego poder contarle ese final a los que tendrán que vivirlo como su “destino.” El entonces Cardenal Joseph Ratzinger expuso con brillante claridad este hecho al referirse al Tercer Secreto de Fátima, dado que por ese tiempo muchos dudaban que los acontecimientos vividos por el Papa Juan Pablo fueran en algún sentido el “cumplimiento” del Tercer Secreto. Por lo visto, ellos esperaban algo más cinematográfico, como quien lee un guión y luego ve una película.
* Lo fundamental es abrirse a la mirada profunda, que es verdadera y que nos hace verdaderos, la mirada de Dios. Y lo fundamental es reconocer que la luz de esa mirada nos pone en una ruta en la que nada debemos idolatrar ni temer, pues apunta a Cristo mismo.