Cristo vive el duelo de la muerte de Juan en una noche de intensa oración. Fortalecido y con una convicción ardiente, reclama ahora de sus discípulos una fe que permita caminar sobre el agua.
Una respuesta a «LA GRACIA del Domingo 7 de Agosto de 2011»
Los comentarios están cerrados.
Polechito Juan que murió tan inhumanamente. Pero murió satisfecho de haberle servido de corazón a PAPÁ DIOS y que sus enseñanzas dejaran huellas en todos por siempre, además de ser un buen ejemplo de cristiano, de discípulo del Señor.