Ayer en la noche fui a un “Concierto de Invierno” en el UCD (University College Dublin). Precioso. El director, Desmond Earley, tenía de qué sentirse feliz. Los aplaudieron (aplaudimos) a rabiar. Los jóvenes intérpretes –es una coral de estudiantes del UCD–, hombres y mujeres, se lucieron en latín, italiano, inglés, irlandés y alemán. Villancicos, salmos, motetes, folclor irlandés y un toque de Yesterday. Nada mal para estudiantes de medicina, derecho, ingeniería (y también arte y música, por supuesto).