A tu Imagen

Porque no olvidase

cómo es grande tu poder,

tú quisiste darme la memoria, Señor;

en ella descubro los prodigios de tu amor:

¡grande has hecho tú mi poca fe!

Porque comprendiese

cómo es grande tu verdad,

tú diste a mi alma entendimiento, Señor;

con mi luz pequeña me levanto hacia tu amor,

¡y tu luz me da la claridad!

Porque yo te amase

con tu misma caridad,

tú me diste voluntad y fuerza, Señor;

y ese Fuego inmenso que es tu Espíritu de Amor,

llena el alma de tu libertad.

Me diste memoria,

entendimiento y voluntad:

a tu imagen, tú quisiste hacerme, Señor;

y pues tu Verdad y tu Poder son solo Amor,

¡te bendigo, Eterna Trinidad!