La reproduccion de estos textos y archivos de audio, para uso privado o publico, esta permitida, aunque solamente sin fines de lucro y citando la fuente: http://fraynelson.com/homilias.html.
Sobre las fechas y horas de publicación de estas oraciones mira aquí
Ten presente en tus intenciones de este día:
Haz click en los nombres para ver más información:
San Martín es un Santo muy querido para los franceses y muy popular en todo el mundo. Nació en Hungría, pero sus padres se fueron a vivir a Italia. Era hijo de un veterano del ejército, y por tanto, a los 15 años, vestía ya el uniforme militar.
Una noche vio en sueños que Jesucristo se le presentaba vestido con el medio manto que él había regalado a un pobre y oyó que le decía: "Martín, hoy me cubriste con tu manto".
Luego de esta visión, renunció a las armas y decidió seguir a Cristo en una milicia más noble. De inmediato, se fue a Poitiers, donde era Obispo el gran sabio San Hilario. Él lo recibió como discípulo y se encargó de instruirlo.
Como Martín sentía un gran deseo de dedicarse a la oración y a la meditación, San Hilario le cedió unas tierras en un sitio muy solitario. Allá fue con varios amigos, fundando el primer Convento o Monasterio que hubo en Francia.
En esa soledad estuvo diez años dedicado a orar, a hacer sacrificios y a estudiar las Sagradas Escrituras.
En Tours fundó otro Convento, contando pronto con 80 monjes. Gracias a los milagros, la dedicación y la piedad del nuevo Obispo, rápidamente desapareció el paganismo en esa región.
San Miguel, El Salvador (1966) - Soy un religioso franciscano, asiduo lector de su sitio web, soy sacerdote desde hace 9 años. Me encomiendo a sus oraciones pues vivo en Roma y estudio Derecho Canónico en El Antoniano. bendiciones. Me encomiendo a sus oraciones para ser fiel y envejecer amando a Dios y mi vocación.
Bogotá, Colombia (1966) - En esta fecha se inicia una nueva etapa de nuestras vidas que aún gracias a Dios continuamos recorriendo plenos de años y felicidad. Alberto
Amad la justicia, los que regís la tierra, pensad correctamente del Señor y buscadlo con corazón entero. Lo encuentran los que no exigen pruebas, y se revela a los que no desconfían. Los razonamientos retorcidos alejan de Dios, y su poder, sometido a prueba, pone en evidencia a los necios. La sabiduría no entra en alma de mala ley ni habita en cuerpo deudor del pecado. El espíritu educador y santo rehúye la estratagema, levanta el campo ante los razonamientos sin sentido y se rinde ante el asalto de la injusticia. La sabiduría es un espíritu amigo de los hombres que no deja impune al deslenguado; Dios penetra sus entrañas, vigila puntualmente su corazón y escucha lo que dice su lengua. Porque el espíritu del Señor llena la tierra y, como da consistencia al universo, no ignora ningún sonido.
La sabiduría es un espíritu amigo de los hombres; el espíritu del Señor llena la tierra (Sabiduría 1,1-7)
Salmo
Señor, tú me sondeas y me conoces; / me conoces cuando me siento o me levanto, / de lejos penetras mis pensamientos; / distingues mi camino y mi descanso. R.
Todas mis sendas te son familiares. / No ha llegado la palabra a mi lengua, / y ya, Señor, te la sabes toda. / Me estrechas detrás y delante, / me cubres con tu palma. / Tanto saber me sobrepasa, / es sublime, y no lo abarco. R.
¿Adónde iré lejos de tu aliento, / adónde escaparé de tu mirada? / Si escalo el cielo, allí estás tú; / si me acuesto en el abismo, allí te encuentro. R.
Si vuelo hasta el margen de la aurora, / si emigro hasta el confín del mar, / allí me alcanzará tu izquierda, / me agarrará tu derecha. R.
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Es inevitable que sucedan escándalos; pero ¡ay del que los provoca! Al que escandaliza a uno de estos pequeños, más le valdría que le encajaran en el cuello una piedra de molino y lo arrojasen al mar. Tened cuidado. Si tu hermano te ofende, repréndelo; si se arrepiente, perdónalo; si te ofende siete veces en un día y siete veces vuelve a decirte: "Lo siento", lo perdonarás."
Los apóstoles le pidieron al Señor: "Auméntanos la fe." El Señor contestó: "Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: "Arráncate de raíz y plántate en el mar." Y os obedecería."
Si siete veces en un día vuelve a decirte: "Lo siento", lo perdonarás (Lucas 17, 1-6)
El camino de vida cristiana está en que mi pecado no sea obstáculo para otro, que perdone el mal del otro para que no sea obstáculo para mi, y que avance con fe hacia la plenitud en Cristo. 4 min. 37 seg.
La sabiduría no entra donde hay pecado por ello: si cuidamos nuestro cuerpo y nuestra boca, manteniendo limpio nuestro lenguaje, sabemos que vamos en su camino. 5 min. 57 seg.
El perdón cristiano no consiste en olvidar; es una manera de recordar, entendiendo la miseria que hay en quien me ofendió y mi miseria y que Dios es poderoso para sacar un bien de eso que sucedió. 3 min. 43 seg.
Haz una donación
para que esta obra continúe, y llegue a más personas! ¡La gloria sea para Dios!
1.1 La Biblia invita en muchos lugares a buscar la sabiduría; hoy, sin embargo, hace apremiante ese llamado para aquellos que tienen la posibilidad o la responsabilidad del gobierno.
1.2 Esto llama la atención porque fácilmente tenemos la idea de que un político es alguien que "ya sabe", y precisamente porque sabe, ha logrado subir, "escalar" hasta llegar al lugar que tiene. El lugar de mando, por tanto, es visto como un "logro" y como un "pago". La consecuencia es que, gobernar se vuelve un ejercicio de astucia (para ganar poder) y de codicia (para acrecentar el propio pago).
1.3 La primera lectura de hoy ve las cosas de muy diverso modo. El gobernante, a imagen del rey Salomón, debe ser ante todo y siempre un alumno, un discípulo de la eterna sabiduría. Según este otro esquema, gobernar no es escalar, sino ser elegido, invitado, ungido; gobernar no es disfrutar de un botín, sino recibir un llamado a la pureza de intención y a la lucidez de mente.
2. Perdonar y Creer
2.1 Así provenga sólo de los azares del proceso redaccional de Lucas, es muy ilustrativo en el evangelio de hoy la relación entre perdonar y creer. Uno como que puede decir, después de oír el texto de hoy, que perdonar es un ejercicio de fe, y que creer es el gran principio para llegara perdonar.
2.2 Y nada de ello suena descabellado: el que cree llega a conocer las dimensiones del perdón divino, y ello, solamente ello, le faculta para dejarse invadir de la fuerza maravillosa y restauradora del perdón que alcanza a los demás. Según esto, sin un crecimiento en la fe es imposible un verdadero avance en el perdón.